Publicado: agosto 7, 2020, 4:45 pm
El sector turismo sabe que debe volver a ganarse la confianza de los viajeros para ir a un hotel y subirse a un avión sin riesgo. Conozca las medidas.
Según el viceministro de Turismo, Julián Guerrero, la base de recuperación del sector, es la confianza de los consumidores ya que por la pandemia la gente está desconfiada, así los hoteles estén abiertos.. Y todo inicia con asegurar unos protocolos de bioseguridad.
El “Sello de bioseguridad turística” no es obligatorio para operar sino voluntario, lo obligatorio son los protocolos. El sello funciona para brindar confianza.
Tenerlo, significa que el establecimiento está cumpliendo con las exigencias de la Organización Mundial del Turismo, OMT.
La sostenibilidad hará parte del nuevo entorno ya no como parte de los programas de responsabilidad social de las empresas sino como herramienta competitiva.
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Aviones seguros
El gerente de IATA (International Air Transport Association), Andrés Uribe, coincide en que lo primero que hay que hacer es volver a ganarse la confianza de los viajeros.
El transporte aéreo en el sistema es más seguro sobre otras modalidades pues los sistemas de ventilación hacen que el aire siempre esté circulando y la posibilidades de contagio sean casi cero.
De otra parte recordó que la contraprestaciones y el combustible hacen que lo cotos de los vuelos sean muy elevados, pues el petróleo que se genera en los Llanos debe viajar hasta la costa para ser distribuido como combustible, algo que no ocurre en países vecino como Panamá donde llega por barco y hacen más competitivo el negocio.
Hoteles con baja ocupación
La hotelería en teoría puede abrir porque está contemplada dentro de las excepciones del gobierno. Sin embargo, 80 por ciento de los hoteles están cerrados porque no hay turismo ni clientes a la vista.
Se estima que se han perdido dos billones de pesos en ventas que suponen una reducción de 98 por ciento en los ingresos.
El presidente de Cotelco, Gustavo Toro, indicó que en estos cuatro meses que el sector ha estado detenido, se han venido preparando para ofrecer protocolos de bioseguridad. Están haciendo visitas presenciales a los establecimientos para verificar que los protocolos se están cumpliendo de manera estricta.
Los hoteles también han venido mejorando su inversión en la tecnología ya que es evidente que la presencia digital en la hotelería es fundamental para reactivarse.
Desde el momento de la reserva hasta automatizar el encendido de luces, del televisor o de las cortinas es clave para evitar el contacto físico en las instalaciones o con otra personas.
Dentro de los protocolos que se adelantan están el uso de habitaciones con ventilación natural, el servicio de alimentación a la habitación en vez de la apertura de restaurantes, hacer limpieza de cuartos a puerta cerrada, exigir el uso de tapaboca y el distanciamiento social y solo ofrecer elemento como planchas y secadores a solicitud del huésped.
Agregó que están solicitando revisar el Estatuto al consumidor ya que los hoteles son víctimas de una práctica de fraude repetida y es que algunos clientes después de usar el servicio, desconocen el cargo a su tarjeta y el hotel deja de percibir esos ingresos.
Según estimaciones de Cotelco, para fin de año puede haber un aumento en la ocupación hotelera de 2,7 por ciento actual a 25 por ciento.
Esa cifra sigue siendo baja lo que los obliga a reestructurar desde ahora su modelo de negocio en temas de contratación de personal, uso de instalaciones y ocupación para no generar sobrecostos que afectan todavía más las finanzas del sector.
Agencias livianas
La presidente de Anato, Paula Cortés, dijo que desde las agencias de viajes también están viendo cómo recuperar la confianza de los viajeros.
El rol de las agencias es justamente informar y educar a los viajeros acerca de las normas de bioseguridad que deben seguir tanto en medios de transporte como en hoteles.
El despegue del sector se dará tímidamente y por eso las agencias deben volver a salir al mercado con menos personal, lo más livianas posibles.
Desafortunadamente harán parte de los más de cinco millones de colombianos que por la pandemia quedarán sin empleo.
