Publicado: mayo 29, 2020, 1:40 pm
Sucedió lo que esperaba la mayoría de los analistas y economistas: una explosión en la tasa de desempleo por cuenta de la ampliación del aislamiento obligatorio, que ya supera los 2 meses.
Según el Dane, nivel nacional, la población ocupada en abril fue 16,5 millones de personas, lo que representa una disminución de 5,4 millones de personas frente al mismo período de 2019 (21.9 millones) En las 13 ciudades y áreas metropolitanas, la disminución fue 7,7 millones de personas ocupadas.
Como resultado de la ampliación del aislamiento obligatorio y de la parálisis de la economía, la tasa de desempleo en el total nacional fue del 19,8% y en las 13 ciudades y áreas metropolitanas del 23,5%.
A nivel nacional, Industrias manufactureras fue la rama que concentró la más alta disminución de población ocupada (-1,0 millones de personas), contribuyendo así en -4,6 p.p. al total nacional; en esta rama se destacó la contribución negativa de la Elaboración de otros productos alimenticios (-6,3 p.p. al total de la rama).
Comercio y reparación de vehículos aportó -4,3 p.p. al total nacional, registrando una disminución de 943 mil personas ocupadas, donde se resaltó el Comercio al por menor en establecimientos no especializados, con una contribución de -7,2 p.p. al total de la rama.
“Las cifras de desempleo resultaron mucho peor de lo esperadas. Estamos en niveles más altos incluso que en la crisis del 99. Se perdieron cerca de 5 millones de empleos, más de 515.000 en Bogotá”, explicó Mauricio Santamaría, presidente de Anif. “Esto en ingreso de los hogares son casi $6 billones que se esfumaron”.
Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, dijo que los datos del empleo hablan de una catástrofe económica: se perdieron 5,4 millones de empleos, una cuarta parte del total de empleos en el país. La tasa del 19,8%, subestimada sustancialmente por el aumento en inactividad. La cuarentena es insostenible”.
Oskar Nupia, profesor de la Universidad de los Andes, señaló: La cifra de destrucción de empleo es muy mala noticia, pero sobre todo triste. La política de encierro debe repensarse ya para que esas 5 millones de personas tengan oportunidad de rehacer sus vidas. Entre más nos demoremos, menos posibilidades tendrán.
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