Publicado: septiembre 21, 2020, 2:16 pm
La semana comenzó con un resurgimiento de preocupaciones sobre el desempeño de la economía global y de la norteamericana en particular, por el clima de polarización que se vive en vísperas de las elecciones presidenciales de noviembre.
Como resultado de ello, los mercados y analistas consideran poco probable la aprobación de estímulos fiscales adicionales en lo queda del año, en el país del norte.
A ello hay que sumar que el número de casos de Covid 19 ya superó los 31 millones en el mundo, mientras que las víctimas fatales se acercan cada vez más al millón (961.352), según cifras recopiladas por el Ministerio de Salud de Colombia.
En Colombia, el dólar logró superar nuevamente el nivel psicológico de los $3.800 y se estabilizó entre $3.773 y $3.802 en el resto de la jornada. A pesar del sesgo alcista, al final registró un precio promedio de $3.790,43 y cerró en $3.789,5, $59 por encima de su última negociación, con lo que el peso registró una depreciación diaria de 1,6% frente al dólar, la más alta de la región. En la jornada se negociaron US$ 701 millones.
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“El desempeño estuvo influenciado por la caída en los precios del petróleo, a medida que crecen los temores sobre un debilitamiento más fuerte de la demanda global de crudo, y luego de que Libia retomara su producción, intensificando el desequilibrio en este mercado”, explica un análisis de Bancolombia.
Según la última Encuesta de Opinión Financiera de Fedesarrollo, para septiembre los analistas proyectan que la tasa de cambio se ubicará en un rango entre $3.700 y $3.734 con $3.710 como respuesta mediana.
La mediana de las proyecciones para el cierre de 2020 aumentó respecto al mes anterior, situándose en en $3.700 ($3.655 en la edición de agosto), estando en un rango entre $3.650 y $3.775, explicó el centro de investigaciones.
En un clima de polarización y creciente tensión, con marchas como las de ayer en varias de las principales ciudades del país, la calificadora Fitch Ratings reveló que el deterioro de las condiciones sociales podría afectar las expectativas de crecimiento, tal como se dio a finales de 2019.
En el frente fiscal, Fitch aseguró que espera un déficit más próximo a -9.0% del PIB, por encima de lo planteado por el Gobierno de -8.5% para 2020.
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