Publicado: mayo 31, 2020, 12:14 pm
Por Alexander Riascos
Hace décadas atrás buscar información sobre algún tema en especial llevaba una importante dedicación de tiempo. La consulta transcurría entre bibliotecas, libros del amigo o una que otra enciclopedia de la casa.
Han pasado varios años desde que un buen promedio de hogares en Latinoamérica en general cuenta acceso a la internet, bien sea desde un computador o tal vez únicamente desde un celular.
Atrás quedaron las interminables horas buscando información, por el contrario, gracias a la creciente conexión con la que se cuenta hoy, es muy fácil hacerlo. En ese sentido, si bien contar con información disponible es importante y sin duda alguna valiosa en términos de ahorro de tiempo, hoy nos estamos exponiendo más bien al exceso mismo de información disponible versus la cantidad que la mente humana podría procesar de manera eficiente.
Es ahí cuando surge una frase que han llamado: “La infoxicación”.
Sin duda alguna, esta tendencia de ser “bombardeados con contenidos” no va a cambiar y cada día estará más accesible, el reto es… ¿cómo logro filtrar o procesar tanta información? ¿Cómo logro centrar mi atención en la tarea específica o el objetivo sin terminar en algo distinto?
Primero, hay que comprender que la navegación en internet cada día está más enfocada en captar tu atención hacia tus gustos, intereses y demás. Es decir, busca desviarte constantemente del objetivo por el cual entraste a navegar.
El Big Data y análisis de la información, entre otros, son determinantes para ello. Por tal motivo, es importante que te ejercites en tus propias condiciones humanas para saber soportar estas “malas intenciones” de la red.
Recomiendo 10 tips que te podrían ayudar en este proceso:
- Primero. Define tus objetivos de trabajo antes de investigar, escríbelos preferiblemente y haz un check list a medida que cumplas.
- Segundo. Define tiempos de conexión y desconexión, suelo utilizar la técnica del “30-5”. Es decir, haz el intento de suspender la actividad que haces en promedio cada 30 minutos y haz pausas de 5 minutos aproximadamente, verás cómo tu mente se oxigena.
- Tercero. En una matriz que podrás hacer al inicio de tu día o semana, define lo que realmente es importante y con grado de urgencia. Solo así lograrás enfocarte en las prioridades.
- Cuarto. No permitas notificaciones a tu PC o celular sobre gustos particulares, a no ser que estas hagan parte de asuntos muy importantes que debas seguir.
- Quinto. Utiliza aplicaciones que te permitan ordenar tu agenda de trabajo (Google Keep, Evernote, Google Calendar, entre otras).
- Sexto. Si utilizas redes sociales, selecciona contenidos a priorizar en página de inicio, sólo aquellos que aporten a tu crecimiento (preferiblemente monotemático).
- Séptimo. No busques aprender de todo a la vez. Tómate tu tiempo en cada tema y enfócate en profundizar en uno solo. Debes llevar tu propio calendario, haz de cuenta que estás cursando algo y por niveles.
- Octavo. Desconectarse de la red y hacer un proceso de introspección y validación con el entorno es importante para afianzar el conocimiento, así podrás lograr, no solo afianzar lo aprendido, sino aplicarlo seguramente.
- Noveno. Cuando alguien te pregunte algo que no recuerdes muy bien, evita acudir inmediatamente a Google, tomate tu tiempo para pensarlo y siéntete con derecho a equivocarte, finalmente todo lo tendrás a un dedo de distancia en caso de que necesites hacer una validación más rigurosa.
- Décima. -Finalizaré con esta: se vale no saber de todo. En tiempos de infoxicación, muchos se creen expertos solo por haber leído algo de información. Recuerda que el conocimiento no lo da la información misma, sino la aplicabilidad del aprendizaje.
Ahora, manos a la obra, a desinfoxicarse.
Director ejecutivo Fundación Emprende Mejor
