Publicado: agosto 29, 2020, 5:30 pm
Una de las primeras medidas decretadas por la mayoría de los gobiernos en el mundo fue la suspensión de las clases presenciales. En el mes de abril, cerca de 194 países cerraron los centros educativos para evitar la propagación del virus. Esta decisión afectó al 91 % de los estudiantes a nivel global, según un artículo publicado por la Unicef.
Sin embargo, la reapertura de las escuelas se ha convertido en una preocupación para los padres y maestros que ven este retorno como un peligro para la salud de los niños, padres y maestros. Ante esto, varias universidades se han encargado de investigar qué tan peligroso es el nuevo coronavirus para los más pequeños.
De acuerdo con los últimos estudios realizados por la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard, la mayoría de la población infantil puede contraer el coronavirus. No obstante, aseguran que muchos de ellos no presentan síntomas, y los que se enferman tienden a experimentar síntomas leves, como fiebre baja, fatiga y tos.“ Algunos niños han tenido complicaciones graves, pero esto ha sido menos común”, agregaron los expertos.
Otra investigación realizada por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, reveló que la tasa acumulada de hospitalización pediátrica por Covid-19 en el país norteamericano fue de 8,0 por 100.000 habitantes, entre el primero de marzo y el 25 de julio. Dicha tasa «es baja en comparación con la de los adultos», que asciende a 164,5 por 100.000 habitantes, apuntaron los científicos en el estudio, que fue publicado la semana pasada.
En cuanto a la transmisión de la enfermedad respiratoria de niños a adultos, varios estudios globales, hechos por la Escuela de Higiene y Medicina Tropical y el Colegio Universitario (UCL) de Londres, indicaron que los niños tenían aproximadamente la mitad de posibilidades de contraer el Covid-19 que los adultos, lo que significa que es menos probable que lo transmitan.’
Según los datos publicados por estas dos entidades a finales de junio, los menores de 9 años les transmitieron el virus a adultos con una frecuencia menor (5,3 %) al promedio de la población (11,8 %). En cambio, aquellos con edades entre 10 y 19 años propagaron el brote por encima del promedio (18,6 %).
Por su parte, Hans Kluge, director regional para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), dijo que las escuelas no son foco de trasmisión del coronavirus, pero aclaró que su capacidad como propagadoras está ligada también al nivel de contagio que existe en una comunidad.
“Hasta ahora sabemos que el entorno escolar no es un factor principal en la pandemia. Pero cada vez hay más publicaciones que refuerzan la evidencia de que los niños sí desempeñan un papel en la transmisión, aunque más vinculado a reuniones sociales”, explicó el funcionario.
¿Qué medidas ayudan a una reapertura segura?
Distanciamiento social, lavado de manos y uso de mascarillas.
Ventilación de los salones, limpieza y desinfección de la superficies.
Horarios escalonados, grupos pequeños de alumnos y protocolos en el caso que se presenten contagios.
Con información de la BBC y la OMS.
