Aunque al cierre de julio, el sistema general de pensiones contaba con 23,6 millones de afiliados a los fondos de pensiones obligatorias, solo 8,6 millones eran cotizantes activos, es decir, que efectuó la cotización obligatoria en el mismo mes. El resto, sencillamente, no aportaba.
¿Resultado? A juicio de los expertos, el 80% de los colombianos corre el riesgo de no pensionarse por no cumplir los requisitos mínimos: 1.300 semanas (25 años) y 57 años las mujeres y 62 los hombres en el régimen de prima media (Colpensiones); o 1.150 semanas (3 años menos) en el de ahorro individual de los fondos privados, cuando se ha acumulado el capital suficiente para acceder a una pensión equivalente a un salario mínimo.
Actualmente, el sistema general de pensiones solo cuenta con 1,620.063 pensionados, la mayoría en Colpensiones (1.422.202) y 197.861 en los fondos privados, que comenzaron a funcionar en los años 90.
Del total el 69.2% (1,121,172) fueron pensionados por vejez, 23.6% (382,486) por sobrevivencia y 7.2% (116,405) por invalidez. De acuerdo con la distribución por género, 53.7% son mujeres y 46.3% hombres.
De ese total de 23,6 millones, 16,804.701 están afiliados a los fondos privados y 6,831.350 millones al régimen de prima media; el 55,5% son hombres y el 44.5% mujeres.
Del total de afiliados, 8.621.499 solo son cotizantes activos: 6.029.646 aporta a los fondos privados y 2.591.853 al régimen de prima media.
La difícil misión de pensionarse
En un país con una informalidad laboral superior al 60%, no sorprende que varios estudios – como el último análisis de Natixis Investment Managers, el Índice Global de Retiro 2020- sostengan que Colombia está entre los 5 peores países para jubilarse.
A pesar de que el país escaló dos posiciones en el ranking hasta el lugar 40 entre 44 países analizados, Colombia se sitúa todavía entre los 5 últimos puestos del Índice, solo por arriba de Grecia, Turquía, Brasil e India.
El ranking se calcula con base en cuatro elementos que tienen subíndices: Salud donde se considera la expectativa de vida, la inversión en salud per cápita y los gastos de salud no asegurados; Calidad de vida, para lo cual se tiene en cuenta la felicidad, la calidad del aire, el agua, el hábitat, la biodiversidad y los factores ambientales; Finanzas para el retiro, para lo cual se consideran la dependencia de la vejez, la inflación, tasas de interés, presión fiscal y la deuda del Gobierno; y el bienestar material, con la desigualdad de ingresos, ingresos per cápita y desempleo.
Según cálculos del gremio de los fondos privados de pensiones, Asofondos, el régimen de prima media solo va a jubilar un 15% de los afiliados, mientras que en el privado el porcentaje será del 25% (aunque con una pensión menor dada la ausencia de los subsidios que ofrece el primero).
“El régimen público da unos subsidios muy regresivos. Se estima que hasta 1.000 millones es el subsidio para quienes cotizan por 25 salarios mínimos”, afirma Santiago Montenegro, presidente de Asofondos. “El 75% se va a los quintiles de la población más ricos. Esto no es culpa de Colpensiones, es que la regulación es así. Lo más vergonzoso no son los subsidios, es lo que pasa con los que no se jubilan en el RPM y que tienen una devolución de aportes».
En la actualidad, hay cerca de 390 pensionados con subsidios en promedio de 1.000 millones de pesos, unos recursos que podrían usarse para ofrecer una renta vitalicia a 13 mil colombianos de la tercera edad que están sumidos en la pobreza.
De acuerdo con el gremio, en los últimos 6 años en promedio los que no se jubilaron recibieron 7 veces menos de devolución de sus aportes que en el régimen privado, porque allí no se reconoce la tasa de interés real a los que no se jubilan.
“Si eliminamos gradualmente los subsidios podemos aumentar el programa Colombia Mayor que hoy tiene cobertura de 1.5 millones a 3 millones y medio. Con los BEPS podríamos entregar una renta vitalicia con la que podemos sacar de la pobreza a 6 millones de colombianos», agrega Montenegro.
Según cálculos, la pobreza en los adultos mayores en Colombia es del 42% y en todo el país es del 24%. Se estima además que los subsidios del régimen público equivalen a dos puntos del PIB, 20 billones de pesos.