Publicado: enero 2, 2022, 11:05 am
Por: Gonzalo Gómez Betancourt**
El año 2021 ha sido extraño, y en muchas ocasiones indescifrable por la cantidad de acontecimientos empresariales que no han tenido precedentes anteriores, al menos en nuestro país, lo ocurrido al final de año con el mercado de valores fomentado por el grupo Gilinski, así como el crecimiento de la economía de casi dos dígitos, además de una coexistencia con la pandemia que nos ha traído más aprendizajes en todo sentido, desde cómo planear nuestras empresas y cómo ejecutar las operaciones debido a los problemas de logística y abastecimiento, y unos insensatos paros con violencia que acabaron con vidas humanas e infraestructura, y que llevaron la economía a sus peores momentos en esos meses. Los anteriores acontecimientos no son para empresarios con problemas cardíacos, la verdad nos gustaría un país más predecible en todo sentido.
El próximo 2022 quiero pedir doce deseos para nosotros los empresarios, que consiste básicamente en aspectos del entorno político, económico y social, pero además de ciertas habilidades que serán cada vez más necesarias para poder subsistir en otro año de transición de pandemia, pero con una recuperación económica que no dejará de tener sorpresas como las de este año.
- El primero y más importante tiene que ver con las elecciones a la presidencia de la república, lo que más esperamos es que quede al frente de este país una persona sensata, capitalista consciente y que no quiera destruir lo que con tanto esfuerzo hemos creado, por un sistema que no ha tenido ningún éxito en ninguna parte donde se ha aplicado. Igualmente, que nombremos un congreso equilibrado que no permita arrasar con las instituciones democráticas de este país.
- La esperanza de que no se desborde la devaluación, para esto necesitamos cada vez más exportaciones de nuestros productos principales y no tradicionales, para obtener una balanza de pagos positiva.
- Que siga la inversión extranjera en nuestro país especialmente en sectores como la infraestructura, y el turismo.
- Que los empresarios tengamos más compromiso con un capitalismo consciente y así evitar a toda costa lo que está pasando en otros países latinoamericanos que se han convertido a la izquierda.
- Que las instituciones de Colombia se fortalezcan en especial la justicia de nuestro país.
- Que los todas las personas al margen de la ley comprendan que el país no se construye con violencia y odio, y que hay espacio para construir empresas que alimenten el empleo y de esta manera el estado de bienestar.
- Que las empresas cada vez más incorporen sistemas de gobierno corporativo de primer nivel con el que puedan establecer estrategias claras, y mecanismos de control de riesgos, así como políticas más conscientes de manejo de stakeholders.
- Que las estructuras organizativas de las empresas aprovechen más el tema de las tecnologías de la información para poder facilitar las comunicaciones entre los empleados y que con esto pueda flexibilizarse los horarios empresariales y pasar a unos sistemas de control más basados en el cumplimiento de los objetivos sin perder el compromiso y cohesión de los empleados.
- Que las tecnologías de información nos permitan la integración con proveedores y clientes de una manera más ágil y que toda la información recibida, sea analizada por personas que realmente tengan las capacidades técnicas y puedan leer los nuevos hábitos de consumo o al menos tratar de predecirlos con esa minería de datos.
- Que las organizaciones cada vez tengan más deseos de internacionalizarse y empezar a diluir el riesgo país.
- Que la necesidad de buscar capital para el crecimiento venga acompañada de inversionistas sensatos y que se apliquen las mejores prácticas de gobierno corporativo para mantener el ánimo societario, entre ellas los mejores mecanismos de valoración, y transacción de acciones, buscando la mejor forma de crear liquidez en los accionistas.
- Que los sistemas de compensación y evaluación de las empresas sean separados, para que tengamos en cuenta que uno no premia con bonificaciones a los que no cumplen primero con los valores de la empresa.
Señores empresarios, empieza un nuevo año 2022, espero que todos podamos cumplir con nuestros deseos y para ello debemos primero visualizarlo y después trabajarlo para que se consiga, para todos ustedes un muy próspero año 2022.
**Ph.D. – CEO Legacy & Management Consulting Group
