Publicado: agosto 15, 2018, 9:33 pm
El crecimiento tímido que tuvo la economía a lo largo del 2017, donde solo llegó a 1,8%, hizo crecer la expectativa, y en algunos casos incertidumbre, de empresarios y sectores respecto al comportamiento económico del 2018. Varios factores fueron claves en esta cifra el año pasado como política, consumo e inflación.
Sin embargo, buenas noticias se reciben en este primer semestre respecto al crecimiento económico. Al parecer, las cosas vuelven a su sitio y la confianza se recupera. Los primeros resultados se recibieron tras los tres primeros meses del año en los que la economía presentó un crecimiento de 2,2%, gracias al buen comportamiento de las actividades financieras y de seguros (6,1%), Administración pública y defensa (5,9%) y Actividades profesionales, científicas y técnicas (5,6%).
Ahora, tras cerrar el segundo trimestre, el resultado del comportamiento económico según el Dane llega a 2,8, creciendo 0,6%, respecto al trimestre inmediatamente anterior. En este periodo, la administración pública y defensa (5,3%), el comercio al por mayor y al por menor (3,6%) y las industrias manufactureras fueron los sectores que impulsaron el crecimiento (3,8%), los cuales aportaron cerca de 2 puntos porcentuales al crecimiento total de la economía colombiana. (Lea también: Pymes reportan comportamiento favorable de su situación económica)
En un consolidad del semestre, el porcentaje de crecimiento llegó a 2,5%. Y en este resultado, es evidente la ausencia del impulso de los sectores que por años fueron protagonistas como la explotación de minas y canteras, y la construcción, los cuales se han convertido, por el contrario, en los que jalan en sentido contrario el crecimiento de la actividad productiva.
Se espera que este comportamiento continúe. Incluso, como lo proyecta el área de investigación y análisis de Bancolombia, se continúa estimando un crecimiento para todo el 2018 de 2,6%, dado que con estos resultados del primer semestre, implica que la segunda parte del año será más dinámica.
«Lo anterior es producto de la disipación de la incertidumbre provista por el ciclo electoral que se dio a lugar en el país; un crecimiento sectorial más balanceado; y la recuperación de la confianza de los agentes que permitirá materializar decisiones de gasto e inversión en los próximos meses”, dice el análisis.
