Con una participación del 68% en el PIB, el consumo es el principal motor de la economía colombiana desde el punto de vista de la demanda. Por ello, las expectativas juegan un rol fundamental en las decisiones de compra de todo tipo de bienes: desde un televisor hasta una vivienda.
De acuerdo con la última Encuesta de Opinión del Consumidor (EOC) de Fedesarrollo, en mayo el Índice de Confianza del registró un balance de -5,0%.
Aunque esta cifra es negativa, la buena noticia es que representa un aumento de 4,5 puntos porcentuales (pps) frente al mes anterior, pero un deterioro de 13,9 pps relativo al mismo mes de 2018.
La mejora en la confianza de los consumidores obedeció a un mejor desempeño en el Índice de Condiciones Económicas y en menor medida a un aumento en el Índice de Expectativas del Consumidor. Al comparar los resultados de mayo con los de abril, mejoró la valoración del país y la valoración del hogar.
En mayo, el ICC mejoró en las cinco ciudades encuestadas frente al mes anterior: Cali 6,9 pps, Bogotá 5,3 pps, Bucaramanga 5,1 pps, Medellín 1,1 pps y Barranquilla 0,8 pps, y se ubicó en terreno positivo en 4 de ellas.
La confianza de los consumidores mejoró en los estratos medio y bajo respecto al mes anterior, pero disminuyó frente a mayo de 2018 en ambos estratos. Por su parte, en el estrato alto, el ICC se redujo frente al mes pasado, pero aumentó comparado con mayo de 2018.
Finalmente, la disposición a comprar bienes durables mejoró frente al mes pasado, pero se deterioró con respecto a mayo de 2018, mientras que la disposición a comprar vivienda aumentó ligeramente con respecto a ambos periodos de análisis.