El nuevo embajador de Colombia en Estados Unidos, Francisco Santos Calderón, asume el cargo en un momento crucial para la relación entre los dos países, cuya agenda, si bien ha sido estable históricamente, tiene actualmente temas que requieren de acciones rápidas para avanzar y fortalecer la confianza binacional.
“El Embajador Santos llega a Washington con una agenda que va más allá de la erradicación de cultivos ilícitos e incluye aspectos como la chatarrización, la propiedad intelectual y asuntos laborales relacionados con la protección a sindicalistas y denuncias de agresiones a líderes sociales que están en manos de la justicia colombiana”, indicó la directora de la Cámara de Comercio Colombo Americana, AmCham Colombia, María Claudia Lacouture, al reiterar el respaldo de la entidad a la gestión del diplomático.
Lacouture agregó que “para avanzar en estos temas, debemos poner en marcha una estrategia con acciones que complementen la labor del Gobierno desde los gremios y empresarios para que con nuestros pares en Estados Unidos en asociaciones y agremiaciones quede claro el mensaje de que Colombia es un aliado y en comercio somos complementarios pues importamos materia prima clave para la industria nacional y en particular desde estados como Carolina del Sur, Luisiana y Florida, los tres de importancia para el presidente Donald Trump. Desde la AmCham Colombia ya estamos avanzando en esta labor de manera articulada con la Embajada de Colombia”
En relación con la chatarrización, directora de AmCham Colombia propuso analizar un esquema implantado en México hace unos años para renovar el parque automotor mediante “un mecanismo que permite que un pequeño transportador pueda comercializar su unidad “chatarra” a una compañía más grande, la cual le venderá a su vez un vehículo con máximo ocho años de antigüedad y se encarga de destruir la unidad obsoleta, así como de gestionar los estímulos para adquirir un vehículo nuevo”.
Asuntos relacionados con la propiedad intelectual y la lucha contra el contrabando también forman parte de los pendientes en la agenda con Estados Unidos. En el primer punto, preocupa en EE.UU. la figura de la “Declaración de interés público” en la legislación colombiana para algunos medicamentos, así como cambios en las reglas de juego para el control de precios los cuales ponen en peligro la continuidad de la inversión extranjera y la llegada de nuevos capitales.
En la lucha contra el contrabando, Estados Unidos ha llamado la atención de las autoridades colombianas para aumentar las acciones para combatir la piratería en línea y falsificación de productos para lo cual sugiere mejorar los mecanismos y herramientas en poder de la Policía, la Fiscalía y la DIAN en este sentido.