El plan del gobierno colombiano en contra de la deforestación se compromete a recuperar 934.000 hectáreas de bosques a 2022, sembrar 180 millones de árboles nuevos y reducir a cero la deforestación en los sectores cárnico y lechero. La estrategia Artemisa es uno de los objetivos planteados en el Plan Nacional de Desarrollo que ya fue aprobado e incluye acciones muy concretas en el marco de la legalidad y el acompañamiento social a los campesinos para impulsar una agricultura sostenible.
Para el Ministro de Ambiente, Ricardo lozano, el objetivo “será reducir esta tendencia. En 2020 vamos a disminuir la deforestación en un 20% respecto a los cálculos que muestra el modelo. Es decir, será de 252 mil hectáreas, aproximadamente. Y para 2022 la disminuiremos en un 30%, aproximadamente. Eso quiere decir que ese año la tala ilegal no sobrepasará las 252 mil hectáreas comparada con la tendencia del modelo que muestra una degradación de 360 mil hectáreas”. Para analistas como el Exministro de Medio Ambiente, Manuel Rodríguez, estas metas no cumplirían con los objetivos propuestos.
¿Para qué diablos sirve la cacareada Campaña Artemisa contra la deforestación? La meta propuesta por el gobierno de @IvanDuque es inaceptable: una perdida de 1.035.467 has de bosque de 2019 a 2022. OJO: significa un aumento de 264.920 hectáreas en comparación con 2014-2018.
— Manuel Rodríguez B. (@manuel_rodb) 1 de mayo de 2019
Por otra parte, respetar la frontera agrícola del país y fortalecerla es otra de las medidas que contribuirán con la medida. Por ejemplo, la viceministra de Agricultura, Marcela Urueña, afirma que: “En este camino, hemos priorizado diez productos: arroz, papa, maíz, cebolla cabezona, caña panelera, carne, lácteos, algodón, pesca y acuicultura y algodón”.
La primera operación de Artemisa fue realizada en conjunto por la Fuerza Pública y la Fiscalía General de la Nación, en el Parque Nacional Natural Serranía de Chiribiquete, uno de los bosques tropicales más grandes del mundo con cerca de 4.3 millones de hectáreas, y donde se recuperaron en su intervención 120 hectáreas de bosques según el reporte del Gobierno Nacional. La campaña está planteada para que sea el plan para combatir la deforestación de forma permanente, con trabajo interinstitucional, y donde está incluída la Fiscalía General de la Nación, el Ministerio de Ambiente, toda la Fuerza Pública, las autoridades locales. Consta de tres pilares: detener lo que el presidente Duque a llamado «hemorragia deforestadora» que se ha visto en los últimos años, recuperar la selva tropical húmeda y judicializar a las personas que están causando esta deforestación ilegal.
Sin embargo, durante la operación en Chiribiquete se evidenció algunas vacíos que tiene la iniciativa sobre la financiación. Por ejemplo , el general Nicacio Martínez, comandante del Ejército, afirmó que en esta operación se invirtieron 700 millones de pesos en solo horas de vuelo y a las demás operaciones en el país se sumará el 10% de los más de 60 mil soldados que esperan reclutar este año, para reforzar el trabajo de los batallones de alta montaña y de selva, y que generarán costos en la operación por tierra.
El presidente Duque ha manifestado en varias ocasiones que ‘Artemisa’ se llevará a cabo a pesar de que asegura que el gobierno Santos no dejó presupuesto para mitigar la deforestación y se avanza en las alianzas con el Reino Unido para lograr el crecimiento y desarrollo sostenible entre los dos países.
“Nunca subestime el poder de la fuerzas del mercado, o la influencia que tenemos sobre ellas. Veo un movimiento imparable hacia la sostenibilidad. La gente lo exige. Los gobiernos responden con nuevas regulaciones. Los mercados responden insistiendo en productos verificados. Durante años, los bosques han estado por fuera del debate sobre cambio climático. Sin embargo, son el mecanismo más poderoso para capturar carbono (o por el contrario de liberarlo a la atmósfera). Para 2019, todos debemos poner los bosques y la deforestación en el centro de los debates en torno al clima, la biodiversidad y la alimentación”, explicó Justin Adams, Director de la Tropical Forest Alliance, una alianza mundial público-privada organizada en el Foro Económico Mundial que, la semana pasada, realizó su Reunión Anual en Bogotá.