De acuerdo con una entrevista hecha por Bloomberg al presidente Juan Manuel Santos, mensualmente estarían llegando cerca de 100.000 venezolanos en Colombia. Esto implica que, desde que la migración masiva inició al explotar la crisis en el país vecino, se habrían recibido cerca de 800.000 venezolanos.
Aunque las cifras todavía se están recolectando a través del censo que lleva a cabo el Gobierno Nacional desde el pasado 4 de abril a más de 500 municipios del país y que se extenderá hasta el 8 de junio, lo cierto es que la llegada de los habitantes del país vecino ya está teniendo repercusiones en la economía colombiana.
Santos aseguró que si bien estamos preparados para recibir y apoyar la migración de los venezolanos que afrontan una de las situaciones más difíciles de su historia con una inflación del 13.000% y una contracción económica en 2017 del 15%, espera que “se logre resolver el problema de manera pacífica con el fin de evitar que Colombia se vaya a ver más afectada por ello”.
Implicaciones de la llegada de venezolanos a Colombia
Y es que, de acuerdo con las cifras obtenidas por Anif, de las 800.000 personas venezolanas que se encuentran en Colombia, 520.000, es decir el 65%, posee permiso especial de permanencia mientras que las 280.000 restantes corresponden a población flotante, que han asumido empleos informales y han afectado el mercado laboral para los residentes en Colombia.
Según los escenarios que pinta Anif, en Colombia hay aproximadamente 2.4 millones de personas buscando trabajo, lo que representa una tasa de desempleo del 9,4% de acuerdo con el último informe del DANE. Sin embargo, si las empresas contrataran el 50% de los venezolanos que se encuentran en el país, esto implicaría un aumento de la tasa de desempleo del 0.3%.
“Ahora bien, si consideráramos que la probabilidad de contratación es tan solo del 20%, el incremento en la tasa de desempleo alcanzaría el rango entre un deterioro de 0.6pp hasta 1.7pp en el desempleo nacional. Esto significa que la tasa de desempleo nacional podría ascender del 9.4% actual (promedio año) hacia el rango del 10% al 11%, en función de la mayor oferta de los inmigrantes y de su tasa de contratación”, dice el informe.
Esto sin contar con el gasto que tendría en términos de atención en salud. De acuerdo con Anif, si se llegan a atender en salud a 200.000 venezolanos, con gastos minimos al UPC, esto podría implicar un gasto de 72 millones de pesos al año.
Para el presidente Santos y para Anif, hay que guardar la esperanza de que la situación en Venezuela mejore, pero de no ser así, el mercado laboral colombiano deberá estar preparado para asumir el panorama que se viene, entre ello, organizar a las empresas para que la migración no sea desastrosa.