Publicado: noviembre 18, 2020, 6:30 pm
Aunque una caída del -9% en el PIB sigue siendo una mala noticia para cualquier economía, lo positivo de la cifra revelada por el Dane ayer es que al fin tocamos fondo y, de no mediar nuevas medidas restrictivas, lo peor habría quedado atrás.
De hecho, en el tercer trimestre la economía creció 8,7% frente al trimestre anterior, impulsada por la demanda interna, y el consumo de los hogares -que representa el 70% del PIB- ‘solo’ cayó -4,7%, una cifra inferior a las caídas del -6% -8% registradas antes.
En líneas generales, la contracción del -9% estuvo en línea con las proyecciones de los analistas. Según el BBVA Colombia, el consumo privado mostró un buen dinamismo, no solo por el fin del aislamiento restrictivo, sino también por las mejoras del mercado laboral que se dieron durante el trimestre.
A pesar de ello, el consumo aún se mantiene por debajo de los niveles registrados en el mismo momento del año pasado, por lo cual Mauricio Hernández, economista de BBVA Research, sostiene que la reapertura es solo el primer paso para la recuperación.
“La recuperación será un proceso de varios años, en el cual las decisiones públicas y privadas serán determinantes para su mayor o menor éxito”, señaló. Con esas cifras, el BBVA proyecta una caída del – 7,5% para el año completo mientras que para 2021 prevé 5,5%.
Según un análisis de Bancolombia, la recuperación de la economía colombiana después de los choques sufridos puede tomar entre 2 años (en la perspectiva más optimista) y 5,2 años (en la perspectiva pesimista), con una extensión más probable de 3,1 años. “El PIB está cerca del 90% de los niveles observados antes de la pandemia y el reporte del Dane nos permite reafirmar nuestro escenario base de variación del PIB para el año completo de -7,5%”.
Además: «La recuperación de la economía será larga, desigual e incierta»: FMI
De hecho, hace poco el Gobierno empeoró su proyección de crecimiento para este año, en un rango de -6,0% y -7,0%, con un rebote el próximo año equivalente a 5,0%, por debajo del 6,6% previsto inicialmente.
Según el DANE, las actividades que más contribuyeron a la dinámica económica fueron:
- Comercio al por mayor y al por menor; reparación de vehículos automotores y motocicletas; Transporte y almacenamiento; Alojamiento y servicios de comida decrece 20,1% (contribuye -3,9 puntos porcentuales a la variación anual).
- Construcción decrece 26,2% (contribuye -1,8 puntos porcentuales a la variación anual).
- Explotación de minas y canteras decrece 19,1% (contribuye -1,2 puntos porcentuales a la variación anual).
“Septiembre fue un mes de recuperación importante para el comercio, la construcción y la industria, unos sectores que pesan casi el 40% del PIB y que, aunque siguen cayendo, mostraron números mejores que en agosto”, explicó Mauricio Santamaría, presidente de ANIF.
“Seguimos mal pero mucho menos. Sin duda, la peor noticia es que el dato fue peor al esperado (esperábamos -7), lo que ocurrió por el mal comportamiento de agosto. En ese mes las inútiles cuarentenas sectorizadas de Bogotá frenaron la recuperación de manera sustancial”, agregó el economista.
De acuerdo con ANIF, de no haberse presentado esas cuarentenas el crecimiento hubiera sido -7.3 en vez de -9, con impactos positivos en el empleo e ingreso de los hogares.
“Agosto pasará a la historia como un mes perdido en economía y salud por decisiones apresuradas”.
