Cada vez son más los adeptos y personas interesadas en ingresar al ecosistema de las criptomonedas, los beneficios que genera su comercialización, la utilización de éstas como medio para la adquisición de bienes o servicios y la revolución tecnológica que están generando en la economía digital, hace que muchas personas se sientan atraídas y busquen la forma de acceder a estos activos digitales.
Sin embargo, aún existen muchas inquietudes respecto a su tecnología, funcionamiento, comercialización y regulación, lo que genera desinformación, falsas ideas, confusión y especulación al respecto, afectando así, no solo a las personas que consideran ingresar a este ecosistema sino también, a la reputación y el potencial de estos activos digitales. Por tal motivo, y debido al desconocimiento generado Buda.com, realiza un compilado de los mitos y verdades sobre éstos activos digitales que están cambiando la forma de concebir la economía:
Las criptomonedas son ilegales en Colombia
FALSO – Aunque en el momento no existe una ley que regule sus operaciones y funcionamiento, las autoridades o entes reguladores se han pronunciado de forma discreta, sin argumento alguno sobre su prohibición o en contra de su utilización, por lo que no son consideradas ilegales.
Declaraciones emitidas por el Banco de la República y la Superintendencia Financiera, aseguran que el Estado asume una postura preventiva en la que advierte sobre los riesgos de las operaciones con criptomonedas y establece que los usuarios son los únicos responsables del manejo de los activos, lo cual no respalda ni prohíbe su uso como medio para la comercialización o adquisición de bienes y servicios. No obstante, cartas circulares emitidas por la Superintendencia anteriormente mencionada, restringen únicamente a las entidades financieras a tener cualquier tipo de vínculo con criptomonedas, tema de debate actual desde el punto de vista jurídico.
Las criptomonedas no cuentan con el respaldo del Estado
CIERTO – Al igual que el dinero fiat o de curso legal que goza únicamente de la confianza asociada a su uso, las criptomonedas se basan en este principio. La naturaleza descentralizada y distribuida de su tecnología subyacente (blockchain) hace que las mismas estén respaldadas por la confianza que depositan en ellas sus usuarios, mediante su adopción como medio válido para realizar operaciones comerciales.
Las transacciones realizadas con criptomonedas no pueden ser rastreadas
FALSO – La gran mayoría de las criptomonedas operan bajo la tecnología blockchain. En esta, se lleva a cabo la validación de todas las transacciones y queda registro inmutable de las mismas sin importar el lugar o la hora en las que se realicen. Por ende, cualquier operación que involucre la transferencia de activos digitales puede ser consultada en la red siempre y cuando se conozca la dirección o el código asociado de la transferencia.
En este sentido, podemos hablar de “Pseudoanonimato”, ya que las transacciones se expresan en forma de caracteres alfanuméricos y están asociadas con el monedero virtual del dueño de los activos. Por lo que si una persona u organización tiene conocimiento de con quién está vinculada dicha dirección, es posible rastrear a quién envía los fondos y saber cuánto dinero está movilizando con la moneda digital correspondiente, información que luego puede ser cotejada con las cuentas bancarias para determinar si hay indicios que apunten a la realización de actividades ilegales.
Las criptomonedas son utilizadas para actividades ilegales
CIERTO – A pesar de no haber estadísticas oficiales al respecto, estos activos pueden ser utilizados como medio para la realización de transacciones ilegales. Sin embargo, sería erróneo asegurar que solo las criptomonedas son empleadas para este fin, ya que las principales monedas de curso legal constituyen el vehículo preferido para el lavado de dinero y/o el financiamiento de actos ilegales (principalmente mediante pagos realizados en efectivo).
De acuerdo con datos de la ONU, el tráfico de drogas anualmente capitaliza más de USD $1.000.000.000.000, mientras que apenas un poco más del 20 % de esta cifra es lo que se comercializa en los mercados de criptomonedas según CoinMarketCap. En este sentido, las monedas digitales no pueden ser catalogadas como buenas o malas ya que la naturaleza de su uso recae sobre las acciones de sus usuarios.
A su vez, y siguiendo los lineamientos establecidos por el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), las compañías que operan con criptomonedas -como lo es el caso de Buda.com- implementan mecanismos de autorregulación que contribuyen a evitar el lavado de activos y el financiamiento de actos ilegales, principalmente mediante la solicitud de datos de identificación a sus usuarios y el reporte de actividades sospechosas a las autoridades locales.
Hay mucha volatilidad en los mercados de criptomonedas
CIERTO – La cotización de estos activos digitales está directamente relacionada con el comportamiento de los mercados, por lo que los mismos suelen fluctuar con facilidad cuando ocurren eventos importantes dentro del ecosistema o cambios en su estructura tecnológica y de desarrollo (ya sea que afecten de forma positiva o negativa los precios). Lo anterior ocurre por la etapa inicial en la que se encuentra el mercado, en la medida que ingresen más personas al ecosistema y haya una mayor inyección de capital sus precios deberían tender a estabilizarse.
Es importante aclarar que también existen instrumentos financieros, principalmente de renta variable (acciones, ETF´s, Hedge Funds, entre otros) y derivados (contratos a futuro) que tienen de igual o mayor forma, un grado de riesgo aún más alto por el apalancamiento y volatilidad en los precios de sus activos subyacentes.
Las criptomonedas no pueden ser falsificadas
CIERTO – Cada moneda digital opera con códigos propios, y dada la naturaleza de la tecnología blockchain que registra todas las transacciones y su orden, no es posible que actores malintencionados dupliquen transacciones o creen criptomonedas de forma independiente sin que el sistema los detecte y bloquee.
Las criptomonedas están diseñadas para ser utilizadas por personas con mayor conocimiento tecnológico
FALSO – Cualquier persona puede operar con estos activos ya que fueron diseñados para que sea práctico y sencillo realizar transacciones entre sus usuarios. Todas las personas están en la capacidad de intercambiar sus activos comprendiendo los principios generales de su funcionamiento. Para el caso de comprar o vender criptomonedas, los interesados pueden hacerlo a través de plataformas de intercambio, las cuales detallan paso a paso el proceso a seguir para adquirir, vender o transferir las mismas de forma segura y sencilla.
Las transacciones con criptomonedas toman menos tiempo que las bancarias
CIERTO – La tecnología blockchain permite que las personas envíen saldos en criptomonedas sin importar el lugar o país en el que se encuentren. El receptor del pago recibe prácticamente al instante los activos sin tener que esperar entre 24 y 72 horas como establecen los bancos tradicionales. Además, las operaciones con criptomonedas resultan ser más económicas que las realizadas a través de instituciones bancarias ya que no requieren de intermediarios en el proceso. Los usuarios simplemente deben consignar por cada transacción una pequeña comisión que varía según la demanda de transacciones en la red, sin importar la cantidad que desee transferir.