La proporción de personas mayores de 60 años en el país se ha incrementado de manera significativa en los últimos años. De acuerdo con las cifras preliminares hasta ahora divulgadas por el DANE, esta población pasó de representar el 6.9% de la población total en 1993 al 13.4% en 2018. Es decir, que en un lapso de 25 años el número de personas mayores en Colombia se duplicó. A pesar de ser un grupo cada vez más numeroso y que muchas cifras evidencien la importancia de las personas mayores en el desarrollo económico de sus territorios, los viejos son considerados como una “carga” para sus familias.
La Misión Colombia Envejece, estudio realizado por la Fundación Saldarriaga Concha y Fedesarrollo, encontró que a pesar de que sólo el 23% de las personas en edad de jubilación reciben pensión, el 61% de la población mayor de 60 años tiene a su cargo una o más personas y el 24% asume la totalidad de los gastos de la vivienda.
Este panorama dista mucho de la idea de que las personas mayores son improductivas, no tienen qué aportar a la familia y que ya no tienen mucho por vivir. Al respecto, la Misión Colombia Envejece también encontró que muchas personas mayores de 60 años trabajan, e incluso, que el 7% de los mayores de 80 años continúan haciéndolo, convirtiendo sus aportes económicos en factores determinantes dentro del presupuesto familiar.
Ante este panorama, La Fundación Saldarriaga Concha, decidió crear un Modelo de Cuidado con enfoque de envejecimiento activo, que actualmente se está implementando en la ciudad de Manizales bajo el nombre de “Me cuido activo Manizales” y que cuenta con el apoyo de diferentes organizaciones locales como la Fundación Luker, la caja de compensación familiar CONFA, CEDER, Universidad de Caldas, Universidad Autónoma y la Alcaldía de Manizales.
La Economía Plateada
Cada vez son más los emprendimientos registrados por adultos mayores en el mundo. Un estudio realizado por Oxford Economics evidencia como en países como Estados Unidos el porcentaje de nuevas empresas registradas (emprendimientos) por personas mayores de 55 años es del 23% y para las personas entre los 20 y los 34 años es del 26%. Es decir, tan sólo tres puntos porcentuales de diferencia existen entre los emprendedores jóvenes y los mayores. Este es un ejemplo de la cantidad de oportunidades de negocio y económicas que están surgiendo en torno al proceso de envejecimiento de la población y que comúnmente se conoce como Economía Plateada.
Mientras para algunos emprender es el resultado natural tras muchos años de trabajo, para otros pensionarse y luego emprender resulta en una alternativa interesante para generar ingresos económicos adicionales. Y no solamente cada vez son más las personas mayores que deciden emprender, sino que lo están haciendo de manera exitosa.
Diversos estudios demuestran que este tipo de negocios son más sostenibles en el tiempo en los mayores de 60 años que en las personas jóvenes. En países como Inglaterra, el 70% de los negocios que inician personas de más de 50 años sobreviven más de cinco años, a diferencia de aquellos que inician los jóvenes, cuya sobrevivencia en el mismo lapso de tiempo es apenas del 28%. Esto se podría explicar por su alta experiencia (principal valor agregado frente a los jóvenes), sus conocimientos y sólidas redes de contactos que les permiten tomar mejores decisiones y cometer menos errores.
“Para muchas personas mayores, tener una vida productiva y activa es un factor fundamental para garantizar un mayor bienestar y autonomía” afirma Juan Pablo Alzate, líder del área de Generación de Ingresos de la Fundación Saldarriaga Concha, una de las instituciones participantes que desde el Modelo de Cuidado con Enfoque en Envejecimiento Activo busca impulsar el emprendimiento y apoyar proyectos productivos para que esta población pueda mejorar sus ingresos y hacer un mejor uso de su tiempo libre. Este modelo además aborda otros temas relacionados con la parte emocional y la salud mental de las personas mayores, lo cual los ayuda a sentirse activos, productivos y mentalmente estimulados.
Tomates “MADUROS”: caso de éxito implementado desde el Modelo de Cuidado
Una de las estrategias que contempló el programa “Me cuido activo Manizales” consistió en la instalación de un invernadero de 500 Mt2 en un hogar de personas mayores ubicado en las afueras de la ciudad, aprovechando un terrero disponible y las condiciones climáticas de la zona. La idea era aprovechar también la experticia de varios de los adultos mayores que habitaban el hogar, ya que muchos fueron campesinos en algún momento de sus vidas. El modelo fue diseñado para que la producción obtenida durante el primer ciclo de cosecha, la cual fue de 4.4 toneladas de tomate, fuera comercializada en diferentes tiendas y supermercados de la ciudad. El resultado de este primer ejercicio le generó al proyecto ingresos por $4.500.000 pesos. Con estos recursos fue posible establecer de un nuevo ciclo de producción, asumir los costos asociados al mantenimiento del invernadero y adicionalmente, fue posible financiar la compra de colchonetas nuevas, que contribuirán al mejoramiento de la calidad de vida de los adultos que habitan en el hogar.
Gracias al apoyo de la Fundación Saldarriaga Concha y la Fundación Luker este hogar de personas mayores, ubicado en la vereda la Aurora, tendrá un proyecto productivo sostenible que le permitirá a partir de ahora, generar ingresos entre los 4 y los 6 millones trimestrales para financiar actividades que beneficien los cerca de 100 adultos mayores que allí habitan, tener los recursos necesarios para cubrir los gastos asociados al mantenimiento del cultivo de tomate en el futuro y complementariamente, fomentar que muchos de estos adultos mayores puedan hacer uso un productivo y activo de su tiempo.
Nunca es tarde para Emprender
Según los datos preliminares del Censo 2018, Manizales es una de las ciudades que presenta el mayor índice del envejecimiento del país. Por cada 100 personas menores de 15 años, Manizales tiene más de 90 personas mayores de 59 años, mientras que este mismo indicador a nivel nacional es de 60 personas mayores por cada 100 menores de 15. Esto implica que la ciudad debe adecuar su oferta de bienes y servicios para atender las necesidades de sus viejos. Uno de ellos es por ejemplo los servicios de acompañamiento y financiamiento a pequeños empresarios mayores. Esta es otra de las esferas que el Modelo de Cuidado de la Fundación Saldarriaga Concha está trabajando en la ciudad de Manizales. En el marco del proyecto se identificó un grupo de personas mayores que tenía ideas de negocio o que ya había puesto en marcha algún emprendimiento. En alianza con varias organizaciones locales, este grupo de emprendedores recibirá apoyo en la constitución de sus planes de negocio o en el fortalecimiento de sus unidades productivas. Este acompañamiento incluirá el acceso a fuentes de financiación, una de las principales barreras que enfrentan aquellas personas mayores de 60 años que quieran iniciar una actividad económica si se tiene en cuenta que la mayoría de las instituciones financieras en el país no ofrece ningún producto para que los adultos mayores creen sus propios negocios.