Hay una idea que se repite sin fundamento sobre el hecho de que las mujeres son rechazadas en eventuales contrataciones porque resultan más caras debido a que se deben contratar reemplazos mientras están en licencia, dice Fabián Ignacio Hernández, miembro del comité jurÃdico de Acrip Bogotá, las principales razones son:
1) Se debe cubrir la licencia de maternidad y el salario de la persona que la reemplace.
2) Durante el perÃodo de embarazo surgen continuas incapacidades y visitas médicas.
3) Se incurre en gastos adicionales al tener que capacitar en la labor a quien viene a realizar el reemplazo.
La realidad detectada por el Observatorio de la Universidad del Rosario indica que estas situaciones no constituyen una verdad absoluta.
En primer lugar, la licencia de maternidad no la paga el empleador, este es apenas un intermediario, pues el dinero proviene del sistema de salud y debe ser recobrado. (Lea: ¿Hay discriminación laboral en Colombia relacionada a la maternidad?)
En segundo lugar, en más del 80% de los casos indagados, los empleadores no reemplazan a las mujeres en licencia sino que redistribuyen las funciones entre los otros empleados, luego la contratación de reemplazos no es una constante que afecte la empleabilidad y de la misma manera, no habrÃa un gasto notorio en supuestas capacitaciones de nuevo personal.
Como tercer punto se observa que el promedio nacional de citas médicas por concepto de embarazo está por el orden de cuatro durante los nueve meses de gestación.
Finalmente y no menos importante, hay que resaltar que el desempleo de los hombres alcanzó el 8,4% en marzo mientras que el desempleo en las mujeres alcanzó el 14%, pero que en los «nuevos» desempleados que ingresan al mercado laboral en 2019 (personas jóvenes) se encuentra que es mayor el desempleo masculino, luego no puede atribuirse a la licencia de maternidad como un hecho exclusivo el que «las mujeres no consigan empleo» sino que existen múltiples factores, como la «masculinización» o feminización» cultural de los trabajos (conductores de buses y camiones siguen siendo un 95% masculinos), enfermerÃa sigue siendo mayoritariamente femenina, etc.