El candidato habla de los posibles cambios que haría en caso de ser presidente y de las principales necesidades que tiene el país.
Para nadie es un secreto que la economía tuvo una fuerte desaceleración en 2017. ¿Qué propone para que el país retorne a tasas de crecimiento del 4%?
Tenemos que generar condiciones propicias que favorezcan la inversión privada, el emprendimiento y la formalización. Si queremos que la economía vuelva a tener un crecimiento sostenido del 5% anual, se requiere generar confianza en el país y un ambiente amigable a la inversión. Nuestra propuesta es una Colombia en la que hacer empresa y ser formal tenga sentido.
Una de sus principales banderas ha sido la infraestructura. ¿Qué siente que es lo más urgente para hacer y seguir avanzando?
El país requiere con urgencia construir o mejorar las carreteras, vías y autopistas, así como los aeropuertos, puertos o centros de logística que pongan fin a tantos y tantos años de atrasos. Por eso, pondremos en marcha el Programa de Concesiones 5G que tiene como principal objetivo completar los corredores logísticos y está compuesto por 33 corredores estratégicos, por valor de 34 billones de pesos y beneficiaría a las regiones Andina, Caribe, Eje Cafetero, Orinoquía y Pacífica. Haremos inversiones en la construcción, mejoramiento y mantenimiento de corredores regionales de integración, que complementen las intervenciones en la Red Básica y que sirvan de bisagra con la red terciaria municipal.
Muchos dicen que el campo está olvidado en Colombia. ¿Qué propone para recuperarlo?
Presentaremos un proyecto de ley que incluya un programa de ingreso rural por objetivos para motivar la productividad, por tonelada o cabeza producida o por faenada, además ofreceremos incentivos fiscales y financieros para el uso del riego.También apoyaremos a los productores en almacenamiento y comercialización de sus productos y daremos incentivos tributarios para la producción local y de exportación.
Además, incluiremos en la Ley de Tierras el fomento rural y el modelo agroempresarial de gran escala, articulando al pequeño, mediano y gran productor, pero también vamos a promover el modelo de arriendo de la tierra para pequeños productores y garantizaremos la seguridad jurídica en la tenencia de la tierra para proyectos productivos, cuya duración sea mayor a 15 años.
La gente está cansada de la corrupción. ¿Cómo acabar con este flagelo?
Reforzaremos la justicia para hacerla más eficiente y accesible, pero también para darle un papel protagónico en la lucha contra la corrupción. Juzgaremos ejemplarmente la criminalidad organizada, así como los delitos que afectan cotidianamente a nuestros compatriotas. No menos importante, dentro de estos objetivos y como punta de lanza para hacer más eficiente el control fiscal en la lucha contra la corrupción, queremos crear un sistema central e integrado sobre la materia, eliminando las contralorías regionales y ahorrando así 50 mil millones de pesos anuales al país.
Una justicia rápida y confiable es un instrumento indispensable dentro de un Estado moderno a la hora de garantizar los derechos de los ciudadanos y de asegurar la resolución idónea, integral y definitiva de todos los conflictos, sin importar su cuantía o motivación. Un buen sistema aumenta los niveles de transparencia y de competitividad económica.
Finalmente, uno de los sectores que mayor atención merece es el de la educación, ¿Cómo brindarles garantías a los estudiantes del país?
Para las ofertas educativas debemos tener en cuenta el desarrollo regional y el sector empresarial, por lo que construiremos currículos más pertinentes que ayuden a desarrollar las competencias requeridas para el empleo, el emprendimiento y el crecimiento empresarial. Mi compromiso es trabajar sin descanso durante mi gobierno para garantizar el derecho a una educación de calidad, que garantice el acceso con inclusión, la permanencia y el éxito en todos los niveles de la educación y formación.