En el ‘Estudio Global sobre Compras, Actividad Bancaria y Pagos Móviles’ de Nielsen se afirma que gracias a la conectividad que generan los pagos y dispositivos móviles, se ha conseguido una inclusión financiera de 2 billones de consumidores no bancarizados en todo mundo.
Según el estudio, en promedio el 90% de latinoamericanos posee un dispositivo móvil con acceso a Internet. De ese total, el 49% es millennial y revisa sus estados de cuenta bancarios, el 47% paga sus facturas en línea y el 40% transfiere dinero entre cuentas bancarias a través de un dispositivo móvil.
Además, a finales del año pasado en Colombia el monto de operaciones por celular fue de más de $11 billones. Las entidades financieras aumentaron 67% las transacciones a través de celular, al pasar de 197 millones de operaciones en 2016 a más de 330 millones en el 2017. Con estas cifras, las operaciones que se han realizado por telefonía móvil ya alcanzan 6% del total de las transacciones de las entidades.
La generación millennial lidera el mercado actual, es parte activa de la revolución de los pagos e influye en el desarrollo de las tecnologías emergentes, pues ellos representan distintos desafíos a los que los pagos móviles pueden ser la solución. A los millenials no les gusta perder el tiempo, es la generación de los viajes y las experiencias, por lo que el uso de la plata en efectivo no es una opción primordial.