Colombia ha venido invirtiendo cerca de un punto del PIB por año en su infraestructura de transporte durante la última década. La inversiónprivada en estos proyectos pasó de $2,6 billones en 2011 a $5,1 billones en 2016y para 2017 cerrará con una cifra mayor a los $7 billones.
Es normal que la capacidad de consumo se vea afectada cuando se tienen deudas por todos los frentes. Claro, las prácticas financieras de la mayoría de los colombianos no son las mejores, y esto se debe en gran medida a la educación financiera que ha estado ausente por muchos años en el país.
La cifra de acceso a créditos y de endeudamiento sigue en crecimiento, por ejemplo, en el tercer trimestre de 2017, el número de consumidores que tuvo acceso a una tarjeta de crédito, estuvo cerca de 7,6 millones, esto es 6.8% más que en el tercer trimestre de 2016, según el último reporte de TransUnion «Industry Insights».
Además, la deuda promedio en crédito como una hipoteca, préstamo de vehículo o de libranza por consumidor ha venido aumentando durante los últimos dos años, alcanzando los 32.7 millones de pesos colombianos.
“Durante los últimos dos años, la deuda promedio del consumidor se ha incrementado a tasas cada vez mayores. Así mismo, las tasas de morosidad han aumentado, esto último haciéndose más evidente en los consumidores de alto riesgo”, afirma Virginia Olivella, Gerente Sénior de Investigaciones económicas de TransUnion Colombia & Latinoamérica.
Los otorgantes de crédito siempre están tratando de encontrar el equilibrio correcto entre cómo extender el crédito a tantos consumidores como sea posible, manteniendo los niveles de riesgo de una forma prudente. No obstante, “el segmento de alto riesgo merece un seguimiento de cerca, ya que estos son los consumidores con más probabilidades de tener problemas para administrar su crédito si experimentan un desafío financiero”, añade.
Empresas en países como Estados Unidos ya han propuesto que para sus procesos de reclutamiento y selección se tome en cuenta el ‘score’ de crédito (puntaje que calcula el riesgo de crédito) ya que, además de brindar información relacionada con el compromiso de pago de un individuo, sirve como herramienta para conocer mejor su personalidad.
En Colombia este método no ha sido implementado (afortunadamente), dada la precaria cultura financiera. Sin embargo, si usted es de los que cuenta con deudas impagables hay algunas alternativas que puede considerar: refinanciar o reparar su deuda.
Antes de hacerlo, tenga en cuenta que solo vale la pena refinanciar sus deudas si realmente logra ahorrar dinero y para considerar esta opción existen tres factores determinantes: monto del préstamo, tasa de interés y plazo restante.
La refinanciación es el reemplazo de una deuda existente por otra obligación financiera. Las ventajas de este modelo dependen de las condiciones de la nueva deuda. Otra opción es la reparación de la deuda, que se puede asignar a un tercero. Existen empresas que se encargan de esta labor en Colombia y dentro de las ventajas que tiene está la asesoría en temas legales y financieros. Además, los expertos de estas compañías diseñan los planes de acuerdo con los ingresos y capacidad de ahorro.
Plan de acción
Los colombianos están acostumbrados a endeudarse para adquirir cualquier bien, pero en las buenas prácticas financieras el ahorro y la inversión son las claves para tener una cartera al día y con rendimientos. “Resuelve Tu Deuda”, ofrece algunas recomendaciones:
- Uso de las tarjetas. Deje de usar las tarjetas en su totalidad para evitar que la deuda crezca.
- Presupuesto. Genere un presupuesto en el que registre todos sus ingresos y egresos. Los gastos fijos como vivienda, salud, educación y transporte no deben exceder el 70% de su salario, el 30% restante debe enfocarlo al pago de deuda. Recorte los rubros innecesarios como entretenimiento y ponga en pausa su ahorro para que pueda aumentar la cantidad mensual destinada al pago de deuda.
- Liquidar. Enfóquese en liquidar la deuda de menor cuantía para poder sacarla del mapa y continuar con la segunda, siga este proceso hasta que termine con todas sus deudas.
- Evaluar. Si ya está destinando más del 30% de sus ingresos al pago de deuda se encuentra en una situación de sobreendeudamiento. Si definitivamente siente que se encuentra en una situación muy complicada, acérquese con un experto que lo ayude con el proceso de liquidación.