Publicado: junio 16, 2020, 4:54 pm
La primera quincena de junio tuvo una reacción negativa para el mercado automotor en Colombia: según información de matrículas suministrada por el Registro Único Nacional de Transito (RUNT), se matricularon 4.708 vehículos y 16.088 motocicletas nuevas, con decrecimientos del 36,6% y 25% respectivamente frente al mismo periodo del año anterior.
Este comportamiento, fue analizado entre la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi) y la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco), en un reporte que indicó que comparó estas cifras con la venta de vehículos nuevos durante mayo.
Según cifras de la Asociación Colombiana de la Movilidad Sostenible (Andemos), la venta de vehículos nuevos cayó 37,5 %, mientras que la de motos descendió 65,2 %.
EN MAYO TAMBIÉN CAYÓ EL MERCADO
Es de recordar que, según Fenalco, durante el pasado mes de mayo, las ventas del sector automotriz se redujeron en un 60,7%, mes en el cual se matricularon 8.920 vehículos y 17.580 motocicletas nuevas.
A pesar de la baja, Eduardo Visbal, vicepresidente de Comercio Exterior y Vehículos de Fenalco, resaltó que el sector automotor se está reactivando gradualmente.
“De los 260 organismos de tránsito estimados que hay en el país, el 75% están operando gracias al inicio del registro de matrículas y traspasos de manera online mediante la plataforma virtual del RUNT», aseguró.
En una línea similar se ubicó Juliana Rico, directora ejecutiva de la Cámara Automotriz de la ANDI, al precisar que «esto demuestra que este es un sector que se adapta a los cambios en pro de salvaguardar su industria y los empleos que genera”.
Según la última encuesta de opinión realizada por Andemos entre marcas y concesionarios en todo el, se estima que en el 2020 el mercado total de vehículos estará en 165 mil unidades, es decir 100 mil unidades por debajo de las cifras del 2019.
En una crisis sin precedentes, el Coronavirus entró a destruir las cadenas de valor en todos los sectores, causando enormes problemas de liquidez en las empresas y países”, afirmó el presidente ejecutivo de la Andemos, Oliverio García Basurto en una misiva enviada por el gremio al presidente Iván Duque.
INCENTIVOS VS. OBSOLESCENCIA
Este ejecutivo es consciente de que, en Colombia, los programas de incentivos fiscales a la compra de vehículos cero y bajas emisiones, así como el programa de modernización del parque de camiones pesados “han demostrado ser muy eficientes toda vez que han tenido un desempeño extraordinario en el 2019 y aún el 2020, siendo los únicos segmentos que a pesar de la pandemia, en mayo registraron variaciones positivas frente al mismo mes del año pasado, del 48,5% y 47,5%.”
De hecho, un estudio realizado por Fedesarrollo en 2014 reveló que el sector automotor genera un impacto de 52,3 billones de pesos al año en valores agregados encadenados cuando se suman la industria, el comercio y las actividades complementarias relacionadas con el sector como son consumo de combustibles, autopartes, mantenimiento, seguros, peajes, oficinas de tránsito, centros de diagnóstico y aportes al estado en impuestos, entre otros
Este dato lo contrasta García Basurto para indicar que de los 6 millones de vehículos automotores que circularon en Colombia en 2018, el 84% corresponden al servicio particular. “Es un segmento compuesto por automóviles, camperos y camionetas donde el 57%, es decir 2,8 millones de vehículos, superan los 10 años”.
Es precisamente en este punto, donde Andemos recalca que la obsolescencia del parque automotor genera “altas ineficiencias en la economía como la degradación de la calidad del aire urbano”.
Según el DNP, en 2010 el gasto social derivado de la degradación de la calidad del aire urbano en Colombia era de 5,7 billones de pesos y en el 2015 ya alcanzaba un costo de 15,4 billones de pesos, representado alrededor de 70 millones de casos de enfermedades respiratorias y más de 10.500 muertes.
Para el ejecutivo, este gasto social debe ser evitado a toda costa mediante la implementación de buenas prácticas, con las que se mejore la rotación del parque automotor con programas efectivos de desintegración de vehículos obsoletos, medidas tributarias y mejores políticas a la restricción vehicular.
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