Revista Gerente - Colombia
Registro  /  Login

Portal de Negocios en Colombia

NEGOCIOS

TODO COMO SERVICIO

UNA ALTERNATIVA DE LAS EMPRESAS PARA AHORRAR EN SUS ÁREAS DE TECNOLOGÍA El mercado mundial del modelo Todo como servicio está creciendo actualmente a …

Los Gerentes de Impacto del 2024

TECNOLOGÍA

Un arquitecto analiza la ciudad del futuro que está construyendo Arabia Saudí: «Es muy experimental»

26/05/2025 a las 18:02h.

En el competitivo mundo de la planificación urbana, donde las ciudades luchan por adaptarse al crecimiento demográfico, la sostenibilidad y la tecnología, pocos proyectos pueden rivalizar con la magnitud, ambición y controversia de ‘The Line’, la ciudad futurista que Arabia Saudí está construyendo en pleno desierto. Concebida por el príncipe heredero Mohammed bin Salman como el corazón del megaproyecto NEOM, ‘The Line’ se plantea como una ciudad lineal de 170 kilómetros de largo, 500 metros de altura y apenas 200 metros de ancho, formada por dos colosales muros paralelos que se extienden a lo largo del Mar Rojo. Desde su presentación en 2021, ha captado la atención del mundo no solo por su escala, sino también por sus promesas: cero coches, cero emisiones y acceso a todos los servicios básicos en menos de cinco minutos a pie. Pero, ¿es viable construir algo así en el desierto? Para responder a esta pregunta, el arquitecto Nacho Tellado, conocido por su análisis matemático en jugadas polémicas del fútbol, fue invitado a ‘The Wild Project’, el programa de Jordi Wild, donde compartió su punto de vista profesional sobre la megaestructura.
«Yo quiero saber tu opinión a nivel de arquitecto de ‘The Line’, en Arabia Saudí», le planteó Jordi. A lo que el arquitecto respondió: «Es una ciudad lineal literalmente, son dos grandes paredes, ahí se configuran todas las viviendas. En el centro hay cosas comunes: jardines, etcétera». A simple vista, puede parecer una estructura compacta e irrealizable, pero el arquitecto quiso matizarlo: «Es verdad que tiene más espacio de lo que parece desde lo alto, porque claro, tú desde una vista de helicóptero parece que aquello es súper estrecho, pero no, luego estás allí y tiene bastante ancho».

Uno de los elementos más polémicos del proyecto es su ubicación en mitad del desierto saudí. Sin embargo, el experto advirtió sobre las consecuencias naturales de construir en ese entorno: «Yo lo que pienso es que esa ciudad, al final, ¿sabes cómo van a acabar estos muros? Van a acabar repletos de arena». Y lejos de verlo como un problema, lo valoró positivamente: «Eso es bueno en el fondo porque eso aísla. Al final configuras una cueva».

«Tú date cuenta que en el desierto parece que no, pero los montículos de arena es una burrada lo que cambian». La acumulación de arena, según el arquitecto, puede ser un recurso natural que se sume a la eficiencia térmica del diseño: «Yo creo que por puros fenómenos de la naturaleza, lo normal es que en las paredes se vaya asentando la arena y eso te aísla al fin y al cabo». «Sí es verdad que estos muros son gigantes, con lo cual yo entiendo que estarán muy bien aislados. Tendrán yo creo que una cámara de aire gigante porque al final eso hace de muy buen colchón térmico», añade.

Wangiri: la estafa silenciosa que empieza con una simple llamada perdida

26/05/2025 a las 17:10h.

Si un usuario recibe una llamada perdida en su móvil, lo habitual es que intente devolverla, incluso si no reconoce el número. Sin embargo, esta acción puede implicar un riesgo, especialmente cuando la llamada proviene del extranjero. En estos casos, es posible que se trate de una estafa conocida como Wangiri.
Este fraude, cuyo nombre proviene del término japonés ‘wankiri’ (que significa algo así como «una llamada y corte»), se basa precisamente en ese patrón: una llamada muy breve, que cuelga antes de que el destinatario pueda contestar. Los ciberdelincuentes utilizan sistemas automatizados para realizar miles de estas llamadas desde números internacionales, con el único objetivo de dejar una llamada perdida registrada en el teléfono de la víctima.

La intención es que la persona devuelva la llamada por curiosidad o preocupación. Pero al hacerlo, puede incurrir en elevados cargos en su factura, ya que los números utilizados suelen pertenecer a líneas internacionales o de tarificación especial.
Según datos de Telefónica, algunos de los prefijos más habituales en este tipo de estafa son: Albania (+355), Bosnia (+387), Costa de Marfil (+225), Estonia (+372), Ghana (+233), India (+91), Mali (+223), Marruecos (+212), Nigeria (+234), Papúa Nueva Guinea (+675), Túnez (+216), Samoa (+685), Sierra Leona (+231), Sri Lanka (+94), Uganda (+256) y República Centroafricana (+236).

La IA puede ayudar a detectar la depresión y el riesgo de suicidio

26/05/2025

Actualizado a las 13:10h.

Abrirse con ChatGPT puede ser muy sencillo para una persona. Desde hace tiempo, muchos usuarios recurren a la máquina parlante de OpenAI, o a otras de su clase que andan rondando por la red, para compartir sus problemas cotidianos o, simplemente, encontrar algo de desahogo. Ahora, un reciente estudio elaborado por investigadores de Corea del Sur apunta que el empleo de chatbots de inteligencia artificial puede ser útil para identificar síntomas de depresión y riesgo de suicidio en pacientes.
La investigación, publicada recientemente en la revista científica JAMA Network Open y dirigida por la doctora Silvia Kyungjin Lho, examinó el desempeño de diferentes sistemas de IA al analizar respuestas a un clásico test psicológico conocido como prueba de frases incompletas (STC, por sus siglas en inglés).

Dicha prueba, que invita a los pacientes a completar frases como «Yo soy…» o «Mi futuro será…», ha sido utilizada durante décadas para encontrar problemas de salud mental. La idea detrás del estudio era sencilla: si una persona refleja emociones negativas en sus respuestas, como desesperanza o autocrítica, ¿puede un modelo de IA identificarlo como una señal de alarma?
Para sacar conclusiones al respecto, el equipo analizó los datos de 1.064 pacientes psiquiátricos de entre 18 y 39 años que fueron atendidos en el Hospital Boramae de Seúl. Todos ellos habían completado el test STC. Tras borrar cualquier rastro de datos personales, introdujeron las respuestas escritas -más de 52.000 frases en total- en modelos como GPT 4, uno de los que mueve a ChatGPT, o al Gemini de Google.

El sueño imposible de la Cúpula Dorada antimisiles de Donald Trump

Imagine un escudo invisible capaz de detener, en cuestión de segundos, cualquier amenaza balística que se acerque al territorio que protege. Un sistema de defensa omnipresente, con sensores desplegados en la tierra, el mar, el aire y el espacio, capaz de detectar un misil hipersónico … en pleno vuelo –incluso si viene desde fuera del planeta– y destruirlo como quien mata un mosquito de un manotazo. Imagine un país inmune al chantaje militar. Un país blindado contra el miedo y protegido por la más ambiciosa red de defensa jamás soñada. Eso es, precisamente, lo que Donald Trump quiere convertir en realidad para Estados Unidos. Pero del ‘querer’ al ‘poder’, el trecho puede ser demasiado grande. Abismal.
Después de meses hablando sobre el tema, y de firmar una orden ejecutiva al respecto, el presidente estadounidense anunció a inicios de semana el plan de creación de un sistema de defensa denominado como Golden Dome (Cúpula Dorada, en castellano). Una ambiciosa red de detección de misiles de todo tipo capaz de cubrir los casi 10 millones de kilómetros cuadrados que tiene la superficie de Estados Unidos. La iniciativa bebe sin remilgos del proyecto ‘Guerra de las Galaxias’ de la administración Reagan, que perseguía lo mismo y acabó en fracaso en la década de los ochenta. Pero Trump confía en triunfar en el empeño.
«Una vez completamente construido, el Golden Dome será capaz de interceptar misiles incluso si se lanzan desde otras partes del mundo, e incluso si se lanzan desde el espacio, y tendremos el mejor sistema jamás construido», afirmó el presidente durante la presentación del proyecto.
La Casa Blanca ha establecido un presupuesto de 175.000 millones de dólares y un plazo de tres años para que la cúpula esté operativa. Sin embargo, la inmensa mayoría de analistas y expertos en defensa son escépticos con el resultado esperable; más con el dinero y el tiempo disponible. En el mejor de los casos, califican el plan de «hiperbólico». Los más, directamente de «imposible». «Es difícil predecir qué surgirá exactamente de esta iniciativa ni cuándo. Lo que está claro es que por más cientos de miles de millones que se gasten en programas exóticos, no es realista creer que un sistema eficaz de defensa contra misiles será técnicamente factible en un futuro próximo», explica a ABC Daryl G. Kimball, director de la Arms Control Association, organización no partidista con sede en Washington D.C. dedicada a promover la comprensión pública y el apoyo a políticas de control de armas.

Más caro, más difícil

Efectivamente, para poder operar y cubrir a Estados Unidos de cualquier amenaza balística que se aproxime a su territorio, será necesario desarrollar dispositivos y tecnología que, por el momento, ni existen ni tienen fabricante asignado; que es lo que pasa con los miles de satélites de detección e intercepción de misiles que Golden Dome requiere para ser efectivo. Este aparataje espacial, que no tiene equivalente en el mundo, encontraría apoyo en tierra, mar y aire por tecnología ya existente. El Pentágono baraja el empleo de cazas F-35, interceptores de misiles terrestres THAAD o cruceros de la Armada equipados con la tecnología Aegis, pensada para la defensa aérea y con capacidad antimisiles.
El resultado sería un enjambre de armamento perfectamente ubicado sobre el terreno e interconectado que, casi seguro, tendrá un coste más elevado del que tiene proyectado el gobierno norteamericano. Una reciente revisión de la Oficina de Presupuesto del Congreso estima que solo el despliegue y la puesta en funcionamiento de los satélites espaciales podría suponer un gasto de hasta 542.000 millones de dólares durante las próximas dos décadas.

SpaceX, Anduril y Palantir, las empresas favoritas para crear la Cúpula Dorada de Trump

La creación del sistema antimisiles estadounidense Cúpula Dorada será dirigida por el general Michael Guetlein, subjefe de Operaciones Espaciales de la Fuerza Espacial de Estados Unidos; y para llevarlo a cabo tendrá que recurrir, sí o sí, a una amplia gama de empresas y … contratistas militares. Entre ellas se espera que figure la SpaceX de Elon Musk, que sería clave en el desarrollo del sistema de satélites necesario para el funcionamiento del proyecto.
De acuerdo con ‘Reuters’, el pasado abril representantes de la compañía aeroespacial, una de las más grandes que existen, se reunieron con el Pentágono para presentar un plan para fabricar componentes clave del sistema. Y no sería la primera vez que el sudafricano se lleva una buena tajada de dinero público, pero ni de lejos. Sus empresas llevan años figurando entre las principales beneficiadas por los proyectos del Gobierno norteamericano. En total, se calcula que han recibido 38.000 millones de dólares en concepto de préstamos gubernamentales, créditos fiscales y contratos federales varios. Además de con el Golden Dome, SpaceX también podría ser una de las firmas escogidas para llevar a cabo el plan de Washington de llevar el internet de banda ancha a las zonas rurales del país, y que cuenta con un presupuesto de 42.000 millones.
En principio, la firma de Elon Musk no sería la encargada de incorporar armamento en los satelites de la cúpula antimisiles; esa tarea, posiblemente, recaería en otras dos grandes compañías que también asistieron al encuentro: Palantir y Anduril. Estas empresas, que toman sus nombres directamente de ‘El Señor de los Anillos’ de Tolkien, son dos de las niñas más bonitas y mimadas del Pentágono.
La primera, cocreada por el exejecutivo de PayPal Peter Thiel, se dedica a desarrollar plataformas de software que permiten integrar, visualizar y analizar grandes cantidades de datos con fines militares. Su tecnología podría ser clave para ayudar al Golden Dome a detectar amenazas y a coordinar la actividad de los distintos componentes del sistema defensivo. Mientras tanto, Anduril se dedica, entre otras cosas, al desarrollo de armamento autónomo para el Ejército de Estados Unidos. Suyo es, por ejemplo, el avión de combate Fury, que es capaz de volar sin piloto y actualmente se encuentra en desarrollo. También fabrica misiles, como los Roadrunner-M. Previsiblemente, sería una de las firmas encargadas de incorporar armamento en los satélites defensivos de la cúpula.

INTERNACIONAL

El partido opositor Vente Venezuela denuncia el «secuestro» de una de sus dirigentes un día después de las elecciones

27/05/2025

Actualizado a las 08:41h.

El partido opositor Vente Venezuela ha denunciado este lunes el «secuestro» de la activista y dirigente de la formación Catalina Ramos, tan solo un día después de las elecciones regionales y legislativas celebradas en el país, en un suceso que ha achacado a las autoridades venezolanas, recoge la agencia Europa Press.
«Catalina Ramos, coordinadora nacional de Asociaciones Ciudadanas de Vente Venezuela y expresidenta de la asociación de egresados de la Universidad Simón Bolívar, fue secuestrada este lunes, 26 de mayo, por esbirros del régimen en Caracas«, ha anunciado en su cuenta de la red social X.

El partido liderado por María Corina Machado ha asegurado que «su familia desconoce su paradero». «Exigimos información de dónde está Catalina Ramos y su libertad inmediata», ha agregado, destacando de ella sus «profundas convicciones» y su «fiel» defensa de los derechos civiles.

Por su parte, la líder opositora ha asegurado que «no descansaremos hasta lograr su libertad y la de todos los venezolanos», después de denunciar «un acto de una crueldad infinita que evidencia la desesperación de la tiranía».

Estalla el primer gran choque entre Trump y Putin por Ucrania

Después de una invasión no provocada de un país vecino, después de más de tres años de guerra cruenta, después de decenas de miles de muertos en los frentes de Ucrania, Donald Trump ha cambiado el tono sobre Vladímir Putin. «Está absolutamente loco», dijo … este fin de semana sobre el presidente de Rusia en su red social, después del último bombardeo masivo en Kiev y otras ciudades de Ucrania, tras otra ronda de muertos.
«Está matando a gente, no sé qué diablos le ha pasado a Putin», dijo unas horas antes a los reporteros antes de subirse al Air Force One. «Le conozco desde hace mucho tiempo, siempre me he llevado bien con él. Pero está lanzando cohetes a las ciudades y matando gente. Eso no me gusta nada», añadió.
El presidente de EE.UU. debe saber que nada de eso es nuevo. Lo que sí puede ser más reciente es la frustración cada vez más insoportable para Trump con el devenir de la guerra en Ucrania y su intermediación para llegar a un acuerdo de paz. En campaña electoral, repitió su promesa de acabar con el conflicto «en 24 horas» en cuanto pusiera el pie en la Casa Blanca. Sin embargo, desde que juró el cargo de presidente a finales de enero, a quien ha presionado, humillado y extraído concesiones es a Volodímir Zelenski, el presidente de Ucrania. El palo para Zelenski ha sido zanahoria para Putin, a quien no ha dejado de prometer una gran relación económica con EE.UU. si la guerra acaba.

Nada de eso está teniendo efecto, pese a las continuas expresiones de optimismo por parte de Trump de que Putin quiere la paz y que el acuerdo está cerca. Los ucranianos no han dejado de acusar al presidente ruso de torpedear y alargar las negociaciones para ganar tiempo y seguir machacando a Ucrania en el plano militar, para reforzar su posición para cualquier hipotético acuerdo futuro.
Volvió a ocurrir en la madrugada del lunes, en la tercera noche consecutiva con bombardeos masivos rusos en Ucrania. El número de aparatos lanzados por las fuerzas de Moscú sigue siendo récord. Hasta 355 vehículos aéreos no tripulados y señuelos que tratan de saturar las defensas del país invadido y que han dejado al menos 13 muertos en todo el país, además de decenas de heridos.
Los esfuerzos de paz de Ucrania y los socios occidentales nunca levantaron grandes expectativas entre los ciudadanos que desconfían fieramente de las intenciones de Rusia. Y los últimos bombardeos masivos en los que se lanzaron casi 1.000 drones les han dado la razón. Y podría tratarse sólo del primer capítulo de una gran campaña aérea contra Ucrania que coincida con su ofensiva terrestre rusa de este verano. Zelenski volvió a exigir sanciones contundentes contra Rusia que tengan un impacto real contra su enemigo. Con los ataques de los últimos días, «Putin demuestra cuánto desprecia al mundo, ese mundo que dedica más esfuerzos al ‘diálogo’ con él que a ejercer presión real», criticó, informa Miriam González desde Kiev.

Negociar con el Kremlin

Ese es un paso que Trump, por el momento, ha rehusado dar. En los cuatro meses que lleva como presidente, ha amagado en varias ocasiones con agravar las sanciones contra Rusia, lo que algunos consideran como la única forma de llevar de verdad a Putin a la mesa de negociación. Pero sus amenazas han quedado siempre vacías. «Veremos lo que vamos a hacer», se ha limitado a decir ahora después de cambiar el tono sobre Putin.
Algunos confían en que el nuevo cambio de tono provoque ahora una posición de mayor fuerza de Trump frente a Putin. «El presidente Trump ha reconocido que Putin lo había engañado cuando le dijo que estaba dispuesto a negociar la paz», interpretó el presidente de Francia, Emmanuel Macron, en medio de un nuevo impulso de varios líderes europeos por reforzar su respuesta ante Moscú.
«Sería bueno y oportuno que el presidente Trump tradujese su cólera en actos. Sería bueno, oportuno y urgente que Trump tome buena nota de las mentiras de Putin», añadió Macron en una parada en su gira por el sureste asiático, informa Juan Pedro Quiñonero desde París.
Macron hacía estas declaraciones días después de que Trump apostara por dar un paso al costado en los esfuerzos de los europeos por presionar a Rusia para que acepte un alto el fuego, después de que las últimas conversaciones no hayan logrado avances significativos.

«Esta no es mi guerra»

Las invectivas contra Putin por parte de Trump quedaron compensadas con otras dedicadas a Zelenski, que son menos novedosas. «Zelenski no hace ningún favor a su país con la forma en la que habla», escribió en el mismo mensaje de su red social. «Todo lo que sale de su boca causa problemas, no me gusta y debe parar». Y volvió a lavarse las manos ante la evidencia de que, pese a las promesas fantasiosas de campaña, la guerra en Ucrania es un problema complejo. «Esta es la guerra de Zelenski, de Putin y de Biden, no de Trump», escribió. «Yo solo trato de apagar incendios grandes y feos».
Desde Moscú, el Kremlin trató de no estropear la luna de miel entre Trump y Putin desde la llegada del multimillonario neoyorquino a la Casa Blanca. El portavoz del presidente ruso, Dmitri Peskov, defendió sobre los ataques a Ucrania que Putin «toma decisiones necesarias para garantizar la seguridad de Rusia» y los últimos bombardeos son, recalcó, de «represalia» como respuesta a los ataques ucranianos.
«Los líderes extranjeros fueron testigos de los intentos de Kiev de atacar territorio ruso antes del 9 de mayo, y estos intentos continúan y nos vemos obligados a actuar (…) por supuesto, con medidas de represalia, ya que golpean objetivos civiles», manifestó el portavoz de la Presidencia rusa. «Estamos en un momento crucial que provoca sobrecarga emocional a todos», añadió Peskov refiriéndose a la reacción indignada de Trump ante los ataques rusos.
Pero el portavoz del Kremlin subrayó que «estamos profundamente agradecidos a los estadounidenses y al presidente Trump personalmente por su ayuda para organizar e iniciar este proceso de negociaciones» de cara a un cada vez más dudoso acuerdo de paz con Ucrania. Según sus palabras, «los trabajos sobre el memorándum previo a un acuerdo de paz continúan y pronto será enviado a Ucrania» si bien admitió que todavía no hay fecha ni lugar para el próximo encuentro de negociadores rusos y ucranianos.

EE.UU. y la UE retoman el diálogo comercial tras la 'tregua' de Trump y Von der Leyen

La primera consecuencia de la llamada telefónica del domingo por la tarde de la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, con el norteamericano Donald Trump ha sido una nueva conversación telefónica ayer tarde entre el comisario europeo de Comercio, Maros Sefcovic, y … su homólogo norteamericano Howard Lutnick. Trump y Von der Leyen acordaron que las negociaciones para un acuerdo comercial se gestionarían por la vía rápida, pero da la impresión de que los dos hablan de cosas diferentes: la europea quiere un acuerdo que satisfaga a las dos partes y Trump solo piensa en su propia visión unilateral.
Por ahora, lo único sólido es que Trump aceptó una nueva prórroga hasta el 9 de julio. Eso significa que la Unión Europea tendrá que soportar el mismo arancel del 10% que otros países, pero sabiendo que aumentará al 50% si no se llega a un acuerdo dentro del plazo establecido por Trump.
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, está intentando aprovechar sus relaciones especiales con la Administración norteamericana para tratar de concertar una especie de mediación, aprovechando que va a haber reuniones preparatorias para la cumbre del G-7, pero por ahora la Comisión lleva las cosas por su propio camino. De hecho, los portavoces europeos admiten que a la hora de decidir si llamaba a Trump el domingo, Von der Leyen no consultó con ningún Gobierno y la política que mantiene ahora el Ejecutivo comunitario es que dará información «cuando se pueda».

Sin más llamadas previstas

No están previstas nuevas conversaciones telefónicas con Trump y mucho menos una reunión en persona entre ambos, teniendo en cuenta que Von der Leyen ha dicho que no tendría interés si no hay una algo concreta que discutir.
El concepto repetido ahora es que «la UE y EE.UU. comparten la relación comercial más estrecha y trascendental del mundo» y que «Europa está lista para avanzar en las conversaciones con rapidez y decisión», tal como publicó Von der Leyen en la noche del domingo.
Pero por ahora lo único que se sabe es que la primera ronda de propuestas que había enviado Bruselas fueron rechazadas la semana pasada y que si se compara con otros procesos negociadores complejos conocidos en la UE, estaríamos aún en las negociaciones sobre las negociaciones, muy lejos de las cuestiones esenciales.

Dan Poraz : «España debería presionar a Hamás para el fin de la guerra en Gaza, no a Israel»

Varios agentes de la Policía Nacional y un registro minucioso de las cámaras, el ordenador, el cinturón y hasta el termo del té dan la bienvenida a la Embajada de Israel en Madrid. El motivo está claro y se ve nada más pasar la … puerta blindada: junto a la bandera con la estrella de David y la de España, dos velas iluminan el retrato de Yaron Lischinsky y Sarah Milgrim, la pareja de funcionarios de la legación israelí en Washington asesinados la semana pasada al grito de «Palestina libre». Tras la cumbre organizada por el Gobierno español en Madrid este domingo para poner fin a la guerra de Gaza y aislar internacionalmente aún más a Israel, su encargado de Negocios, Dan Poraz, que hace de embajador en funciones, atiende a ABC.
—¿Viven Israel y España el peor momento de sus relaciones diplomáticas? En su opinión, ¿cuál es el motivo de esta grave crisis?
—Las relaciones entre España e Israel no están en el mejor momento, pero nuestra esperanza es que mejoren. El Gobierno español no entiende profundamente los retos y los desafíos a los que debe enfrentarse Israel. Por eso, creo que el Gobierno hace declaraciones y adopta posiciones que están alejadas de otros países en Europa. En la Unión Europea hay muchas posiciones, y hay otros gobiernos que entienden mejor nuestra situación.

—¿Pero es el peor momento de las relaciones bilaterales?
Llevo aquí más de tres años y tengo mi perspectiva personal. Puede ser que estemos en el peor momento. Pero el mensaje que quiero transmitir es que espero que mejoren las relaciones.
—¿Cómo cree usted que se puede resolver esta situación?
—Tenemos que poner el foco en la situación en nuestro país. Cuando terminemos con esta guerra, ojalá que sea lo antes posible, estoy seguro de que las relaciones entre España e Israel mejorarán. Es muy claro que toda esta crisis se debe a la guerra. Tenemos muchas razones para terminar esta guerra, esta situación tan terrible que estamos viviendo, y una de ellas es mejorar la relaciones con España. Pero hay mucha gente en España, y especialmente aquí en Madrid, que nos transmite mensajes de apoyo y solidaridad. Hay gente que, si no tiene posiciones críticas desde la guerra, entiende nuestros desafíos.
—Dice usted que Israel quiere acabar la guerra lo antes posible. ¿Qué hace falta para acabar la guerra?
—Es muy simple, la verdad: liberar a nuestros rehenes y poner fin al dominio de Hamás en Gaza. La guerra no puede terminar sin estas dos cosas. Esta guerra empezó por el ataque del 7 de octubre de 2023. La guerra empezó por el ataque de Hamás. Si no hubiera habido ataque, no habría guerra. La continuación de la guerra es también culpa de Hamás. Si Hamás libera a nuestros rehenes, ya que todavía tiene a 58, la guerra puede terminar mañana por la mañana. El modo de terminar la guerra es liberar a nuestros rehenes, que se rinda Hamás y que no exista el día después de la guerra.
—¿Cómo se interpreta desde Israel el liderazgo que está tomando España para detener la guerra en Gaza, ampliar el reconocimiento del Estado palestino e incluso imponer sanciones a Netanyahu, como se vio ayer en la reunión de una veintena de países en Madrid?
—Lo interpretamos como que España no entiende la realidad y pone su presión sobre Israel, cada vez más fuerte, en lugar de hacerlo sobre Hamás. La clave para poner fin a esta guerra es Hamás. Como he dicho, si Hamás libera a los rehenes y se rinde, la guerra puede terminar mañana por la mañana. La presión del Gobierno español debería sobre Hamás, no sobre Israel.
—Tras el endurecimiento de la postura de la UE pidiendo revisar el Acuerdo de Asociación, ¿no teme Israel quedarse solo en el mundo, sin apoyos diplomáticos?
—No todos los países tienen la misma posición en la UE. Mientras continúen la guerra y el sufrimiento de la población, muchos países quieren que termine. Israel, también. Necesitamos ayuda de nuestros amigos, de la UE, de EE.UU., o de cualquier otro lugar, para poner fin al sufrimiento, para poner fin a la guerra. Pero, como he dicho antes, solo hay una manera de hacerlo: liberar a los rehenes y poner fin al dominio de Hamás en Gaza.
—¿Teme Israel que España promueva sanciones contra su primer ministro, Benjamin Netanyahu?
—El ministro de Exteriores español, José Manuel Albares, habló de sanciones individuales, pero no mencionó a Netanyahu. No creo que el Gobierno de España esté hablando de imponer sanciones a cualquier funcionario israelí.

Dan Poraz, ante el retrato iluminado con velas de los dos funcionarios de la Embajada israelí en Washington asesinados la semana pasada

JOSÉ RAMÓN LADRA

—¿Cuál es su respuesta a la acusación del ministro de Exteriores español, José Manuel Albares, quien define la situación en Gaza como «inhumana e insostenible»?
—Esa es la posición española y usa esas palabras. Sin duda, hay mucho sufrimiento, como en todas las guerras. Una guerra es algo horrible y la gente muere y sufre. Nadie quiere esta guerra, es importante decirlo. Escuché muy atentamente al ministro Albares este fin de semana y habló de terminar la guerra, pero no mencionó a Hamás ni a los rehenes. No mencionar estas dos cosas son palabras vacías, ya que la guerra empezó por Hamás, por su ataque sorpresa. Si Hamás no nos hubiera atacado, no habría guerra. Y la guerra continúa solo por Hamás. Si Hamás libera a los rehenes y se rinde, la guerra puede terminar mañana por la mañana. Nuestros objetivos son los mismos. El Gobierno español quiere poner fin a la guerra, y nosotros también. Queremos lo mismo, pero la gran diferencia es cómo hacerlo.
—¿Cómo responde a las acusaciones de genocidio y de usar el hambre como arma de guerra contra los palestinos?
—Eso es una mentira. No utilizamos el hambre como arma de guerra. Durante los dos meses de alto el fuego, la ayuda humanitaria entró en Gaza sin ninguna limitación. Entraron miles de camiones con suministros, ayuda, comida, con todo… Tuvimos negociaciones con Hamás para liberar a nuestros rehenes y continuar el alto el fuego. Pero, cuando Hamás rechazó todas las propuestas de EE.UU., Israel no tenía más opción que presionar a Hamás militarmente para lograr un alto el fuego y una liberación de los rehenes. Durante esos dos meses, como he dicho, la ayuda humanitaria entró sin limitaciones y hubo suficiente. Ahora, Israel ha empezado de nuevo con la ayuda humanitaria porque es una necesidad. Empieza con un mecanismo nuevo para distribuir la ayuda humanitaria.
—Antes del bloqueo entraban entre 500 y 600 camiones de ayuda humanitaria en Gaza. ¿Cuándo se volverá a alcanzar esa cifra?
—Tenemos el objetivo de ampliar la ayuda humanitaria porque no queremos que la situación en Gaza sea una catástrofe. Israel está estableciendo con EE.UU. un mecanismo de distribución de ayuda humanitaria. Pero el problema es que el reparto de ayuda durante los meses anteriores ha servido para reforzar a Hamás, que la robaba y vendía a la población civil. Con el dinero, reforzaba su capacidad militar. El momento más rico de Hamás ha sido durante estos dos meses de la ayuda humanitaria. El problema es encontrar la manera de distribuir la ayuda humanitaria a la población que necesita sin que llegue a Hamás.
—¿Tiene pruebas de eso?
—Hay muchos vídeos de robos de camiones y sabemos que Hamás se la vendido a su propia gente. Y también sabemos que algunas personas que no eran de Hamás también intentaban hacerse con la ayuda humanitaria y eran castigados con violencia.
—¿Sigue recibiendo armas Hamás?
—No, ahora no porque Israel controla las fronteras. Pero Hamás gobierna Gaza desde 2007 y, durante estos 18 años, se ha transformado en una potencia militar muy significativa. El ataque del 7 de octubre no fue un atentado terrorista, sino una masacre provocada por un ejército. Miles de gazatíes armados entraron en Israel como si fueran un ejército. Hamás ha construido esa capacidad militar durante 18 años y todavía tiene muchas armas. Esta mañana, por ejemplo, lanzaron tres cohetes desde Gaza. Por cierto, no lo he visto en la prensa española. Esto es un hecho. Todavía tienen cohetes, tienen armas. Tenemos que desmilitarizar Gaza.
—El terrorismo mata de forma indiscriminada. Cuando Israel bombardea Gaza, ¿qué proceso de selección hace?
—Israel solo ataca a terroristas de Hamás, pero esta guerra no tiene precedentes. Estamos luchando contra una organización terrorista que está escondida entre la población civil. El interés de Israel es minimizar el daño entre la población civil, pero el objetivo de Hamás es justamente lo contrario: maximizarlo. Hamás sabe que es muy difícil lograr victorias militares contra Israel porque son muy débiles, pero hay otras formas que pueden causar daños a Israel, como perjudicar su imagen internacional. Por eso utiliza a su propia población civil como escudos humanos. Israel nunca marca a los civiles ni sus infraestructuras como objetivo militar. Es verdad que hay mucho sufrimiento y hay muchos muertos civiles, muchos heridos, pero la culpa es al 100% de Hamás.

«Según nuestra Inteligencia, 20.000 terroristas han muerto en esta guerra»

—Pero ha habido ataques contra objetivos civiles, como ambulancias.
—Sabemos desde hace mucho tiempo que Hamás ha usado ambulancias y camiones de ayuda humanitaria para sus operaciones militares. En caso de error, el Ejército israelí puede hacer investigaciones internas. Es una guerra y hay errores trágicos. Pero nunca es el objetivo.
—En ese sentido, ¿está Hamás ganando la guerra de la imagen contra Israel?
—En este sentido, Hamás sí tiene muchas victorias, totalmente.
—¿Qué puede hacer Israel para contrarrestar esas victorias de imagen de una organización terrorista?
—Lo único que podemos hacer es luchar contra las mentiras y transmitir la verdad a los medios de comunicación y a nuestros homólogos en todo el mundo. La única fuente de Gaza que distribuye la información sobre los muertos y heridos es Hamás. El Ministerio de Sanidad de Gaza es un nombre muy blanqueado y está controlado por Hamás. Para mí, es muy curioso que la gente en España piense que en esta guerra solo están muriendo mujeres, niños, periodistas y médicos. Es como decir que no hay jóvenes armados en Gaza. Hemos visto que, el 7 de octubre de 2023, miles de hombres jóvenes armados se infiltraron en Israel. ¿Por qué es difícil creer que hay muchos hombres todavía luchando en Gaza contra Israel? Muchos de ellos han muerto en la guerra. Los números que Hamás usa, y los medios de comunicación y políticos españoles repiten, hablan de más de 50.000 civiles muertos. No hay lógica en creer los números de Hamás.
—¿Qué cifras baraja Israel?
—No tenemos cifras exactas pero, según nuestra Inteligencia, 20.000 terroristas han muerto en esta guerra. Eso es algo que tenemos que decirle al Gobierno y a los medios de comunicación en España.
—Pero no creen a Israel…
—Sí creen a Israel, pero luego hacen entrevistas y declaraciones y hablan de 50.000 civiles muertos cuando saben que no es verdad.
—Usted cree que no hay 50.000 muertos en Gaza.
—No sabemos cuántos hay, pero al menos 20.000 terroristas de Hamás han sido abatidos. Y otra cosa que sabemos con certeza es que Hamás quiere dañar la imagen de Israel y no tiene ningún problema en fabricar cifras y manipular imágenes. Por ejemplo, sobre la hambruna hemos visto muchas imágenes que son falsas. Es muy fácil enseñarlas. He visto una foto que se hizo viral de una niña muy delgada con síntomas de hambre, pero esta imagen ya había sido publicada en Marruecos en 2019. Hay tantas noticias y fotos y cifras falsas… Por ejemplo, el aviso de la ONU de que 14.000 niños iban a morir en 48 horas si no entraba la ayuda humanitaria. La ONU ya ha reconocido que la información era falsa y ya han pasado esas 48 horas.
– ¿Por qué no pueden entrar los periodistas extranjeros en Gaza? ¿Cuándo podrán hacerlo?
– La razón es por seguridad. Toda la Franja es una zona de combate y queremos evitar que los periodistas resulten heridos o muertos. El Ejército de Israel sí permite en algunas ocasiones la entrada de periodistas, pero no es habitual por seguridad. La única fuente de información constante es Hamás y es un dilema, la verdad, si tenemos que permitir la entrada de periodistas al precio de correr un peligro.
—¿Qué impacto tiene, en ambos sentidos, la intención del Gobierno español de prohibir las importaciones armamentísticas y de tecnología militar procedentes de Israel, como pistolas de la Guardia Civil, munición y radios del Ejército?
—El impacto en las empresas españolas va a ser marginal. Lo más importante es que va a dañar la seguridad en España porque la Guardia Civil necesita sus pistolas. Esta decisión va dañar a España más que a Israel. No quiero hablar de material específico, pero hay más y armamento más sofisticado. Hay material del Ejército. Con las amenazas que hay en el mundo hoy, es un error porque es momento de cooperar y trabajar juntos, para compartir no solo material, sino también información en la lucha contra el terrorismo. España ha sufrido mucho terrorismo, islámico y de otro tipo, e Israel tiene mucha capacidad en la lucha antiterrorista. Israel estaba muy interesado en compartir inteligencia. Ahora, es evidente que España no quiere recibir nada de Israel.
—¿Y qué impacto puede tener el embargo de armas a Israel que propone España?
—A nivel de declaración, es muy malo, porque España debe presionar a Hamás, no a Israel. En el aspecto práctico, tenemos otras fuentes de armas que no vienen de España y son más significativas para nosotros.
—¿Qué lectura hace de la polémica de Eurovisión: el aviso en TVE de que no cabe el silencio sobre Gaza y luego el masivo voto popular de España a favor de la cantante israelí?
—Está muy claro que la sociedad española ha pensado que la canción israelí era muy buena y emotiva y, por ese motivo, le ha dado doce puntos. Estamos muy contentos con eso, porque es una prueba de que la población española no quiere mezclar la política con algo que no lo es: un concurso de canciones.
—¿Fue también una manera de protestar de la sociedad española contra el Gobierno de Pedro Sánchez?
—Creo que fue una manera de protestar contra Televisión Española. La decisión de poner en pantalla un mensaje político fue una vergüenza. La cantante israelí es una superviviente de la matanza del 7 de octubre de 2023. Estaba en el festival Nova y tuvo que esconderse durante más de diez horas bajo los cadáveres de sus amigos. Es una vergüenza poner mensajes políticos tan, no sé la palabra, asquerosos enfrente de esa chica joven, una superviviente de la masacre, y utilizar recursos estatales para empujar por una posición antiisraelí. Por eso, creo que muchísima gente se enfadó y muchos me lo han dicho.
—Tras el atentado de la semana pasada en Washington que costó la vida a dos funcionarios de la Embajada israelí, por el que le damos las condolencias, ¿teme usted un auge del antisemitismo también en España?
—Sí, totalmente. En noviembre de 2023, la sinagoga de Melilla fue atacada por manifestantes violentos y algunos de los judíos que estaban allí fueron amenazadas, con peligro para sus vidas. Esta pregunta hay que hacérsela a la comunidad judía aquí en España. Yo puedo decir que ellos sienten una ola de antisemitismo en España, que es la mayor desde los años 40 del último siglo. El año pasado, la sinagoga de Madrid también fue vandalizada con pintadas de ‘Palestina libre’ e individuos judíos recibieron en sus buzones papeles con esvásticas. La respuesta es sí, hay una ola de antisemitismo y estamos muy preocupados. Desde el 7 de octubre, el antisemitismo está creciendo mucho en todo el mundo. Es muy fácil explicarlo: Israel está sufriendo una demonización y deslegitimación agresiva en todo el mundo, incluso en España. Cuando se escucha ‘Estado genocida, Estado genocida’ todos los días, desde los medios de comunicación, los funcionarios y políticos, terminará con un ataque violento.
—¿Qué medidas están tomando ustedes al respecto?
—Estamos hablando constantemente con las comunidades judías en España que están viviendo las consecuencias de estos incidentes de odio. Nos tomamos muy en serio nuestra seguridad y la de las comunidades judías y hablamos para ello con las autoridades españolas. Para la próxima semana, el Ministerio de Exteriores israelí ha convocado en Jerusalén una cumbre contra el antisemitismo con ministros de muchos países para trabajar juntos contra este problema. Esto no es un problema israelí ni judío, es un problema mundial y tenemos que hacer todo lo posible para combatirlo.

«La Administración de EE.UU. sabe muy bien que su mejor aliado en Oriente Próximo es Israel»

—¿Asistirá el ministro de Exteriores español, José Manuel Albares?
—Ha sido invitado, pero ha respondido que no puede ir por motivos de agenda.
—España e Israel establecieron relaciones diplomáticas en 1986 y, cinco años después, Madrid acogió la cumbre de paz que sentó la base de los Acuerdos de Oslo. ¿Es posible que algo así vuelva a ocurrir?
—El único mediador viable es EE.UU. Todo el mundo ha visto que el presidente Trump ha visitado Oriente Próximo. EE.UU. es el único mediador que puede avanzar, ojalá, hacia un acuerdo de paz. Estuvimos a punto de llegar a un acuerdo con el país más importante y mayor de la región, Arabia Saudí, y el ataque del 7 de octubre de Hamás tenía como objetivo arruinarlo. Espero que podamos avanzar de nuevo, probablemente tras el fin de la guerra, para normalizar nuestras relaciones con este país.
—¿No teme que Trump pierda la paciencia con Israel y con Netanyahu, ahora que ha sido atendido muy generosamente en los países árabes que ha visitado, donde ha firmado acuerdos comerciales multimillonarios y hasta le han regalado un avión? ¿No teme que esto debilite la alianza de EE.UU. con Israel?
—La Administración de EE.UU. sabe muy bien que su mejor aliado en Oriente Próximo es Israel y que esta alianza se basa en valores compartidos e intereses comunes.

Merz permite a Ucrania utilizar armas alemanas contra territorio ruso

Hasta ahora, a Ucrania no se le ha permitido usar sus armas suministradas por Occidente en territorio ruso. Solo se le permitían los ataques contra las fuerzas armadas en los territorios ucranianos ocupados. A partir de ahora, sin embargo, Occidente está levantando esta restricción de … alcance de las armas que envía a Kiev. En el contexto de los infructuosos esfuerzos de paz y los continuos ataques rusos contra ciudades ucranianas, el canciller alemán Friedrich Merz ha subrayado la continuidad del apoyo militar a Ucrania y ha anunciado que el Ejército ucraniano ganará en adelante capacidad ofensiva. «Ya no hay restricciones de alcance para las armas que han sido entregadas a Ucrania, ni por parte de los británicos, ni de los franceses, ni por nosotros, ni por los estadounidenses», ha dicho durante su participación en la conferencia digital WDR Europaforum 2025.
La primera consecuencia de este cambio de postura podría ser la entrega a Ucrania por parte de Alemania de los misiles de largo alcance Taurus, que llegan hasta a 500 kilómetros de distancia desde el punto de lanzamiento y que Zelenski lleva tres años pidiendo infructuosamente. Merz ha decretado el secreto respecto a la entrega de armas a Ucrania, para crear, ha dicho, «ambigüedad estratégica», por lo que no es posible saber si los Taurus van ya rumbo a Ucrania.
Sí es público que Gran Bretaña y Francia han suministrado a Kiev misiles de crucero Storm Shadow/Scalp. Merz ha dejado claro en su discurso que Ucrania ahora también puede defenderse, «por ejemplo, atacando posiciones militares en Rusia». «No había podido hacerlo hasta hace algún tiempo y no lo había hecho con «muy pocas excepciones», se ha referido sin citar expresamente el incidente a que, en noviembre, hubo informes iniciales de que Ucrania había disparado misiles ATACMS de largo alcance de fabricación estadounidense y misiles de crucero británicos Storm Shadow contra objetivos militares en Rusia. Rusia está atacando despiadadamente objetivos civiles y bombardeando ciudades, ha señalado Merz. «Ucrania no está haciendo eso y debería seguir siendo así. Pero un país que solo puede oponerse a un agresor en su propio territorio no se está defendiendo lo suficiente», ha concluido.

Merz también ha advertido que hay que estar preparado para una guerra más larga, incluso si todavía se está dispuesto a hablar con Rusia. «El presidente ruso, Vladímir Putin, obviamente entiende las ofertas de conversaciones como debilidad», ha explicado Merz, refiriéndose a los esfuerzos de Occidente en las últimas semanas, «nadie puede acusarnos seriamente de no haber agotado todos los medios diplomáticos que existen». El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, también parece estar «cada vez más desilusionado con Putin» tras los masivos ataques rusos contra Ucrania, ha añadido el canciller alemán. En este sentido, espera que «Estados Unidos se mantenga a bordo». «Me sorprendió que él se sorprendiera», ha agregado sobre las últimas declaraciones de Donald Trump. Sigue esperando que Estados Unidos mantenga su apoyo a Ucrania, después de varias conversaciones telefónicas con él.
Merz no se ha referido, sin embargo, al motivo por el que Alemania se había negado hasta ahora a permitir a Ucrania ataques en territorio ruso con sus armas. El Kremlin ha hecho saber en reiteradas ocasiones que uno de esos ataques contra objetivos situados en su territorio, con armas entregadas al Ejército ucraniano por países miembros de la OTAN, será considerado por Rusia como causa de guerra contra la Alianza. El temor a convertirse en «parte» de la contienda bélica había motivado hasta ahora la negativa del excanciller Olaf Scholz a entregar los Taurus.

VIDA GERENTE

Especiales Gerente