«¡Corriente y comida!», gritaban en las calles los pobladores de varias localidades de la provincia de Santiago de Cuba, en el extremo oriental del país, en la noche del miércoles como forma de protesta por los prolongados cortes de electricidad y la grave escasez … de suministros básicos para la subsistencia.
En vídeos difundidos por el periodista Yosmany Mayeta Labrada, se escuchan los reclamos de los santiagueros, quienes aprovecharon la oscuridad de la noche para evitar la identificación por parte de las autoridades, así como la represión. Según Mayeta Labrada, sus fuentes le reportaron cortes de internet y militarización en varias zonas de la ciudad.
«Llegan patrullas a Micro 9, donde hay madres, niños y vecinos reunidos protestando a esta hora», escribió el reportero en sus redes sociales.
Durante la madrugada del jueves, testigos presenciaron un despliegue de fuerzas represivas, incluyendo boinas negras (Brigada Especial del Ministerio del Interior) y agentes vestidos de civil, en diferentes puntos de la ciudad.
Simultáneamente, en Bayamo, ciudad principal de la provincia de Granma, otro grupo de cubanos salió a protestar en el reparto Jabaquito, según confirmó el periodista José Raúl Gallego. Se reportó que patrullas policiales acudieron a la zona para dispersar a los manifestantes.
«El régimen ha activado el ciberejército para publicar fotos de Bayamo mostrando tranquilidad, una estrategia recurrente cuando intentan ocultar protestas», escribió Gallego en su perfil de Facebook.
Por su parte, Mayeta Labrada afirmó: «Esta es una noche tensa para los comunistas, porque los santiagueros y los bayameses han demostrado que la chispa sigue encendida».
En Marzo de 2024, los pobladores de Bayamo y Santiago de Cuba salieron igualmente a las calles a protestar. Un año más tarde, siguen padeciendo los mismos problemas, sin soluciones ni esperanza de mejoría.
«Cuando tenga petróleo»
Horas antes del estallido, funcionarios del Ministerio de Energía y Minas (MINEM) y de la Unión Eléctrica (UNE) comparecieron en la televisión nacional para, mediante tecnicismos, intentar justificar la crisis energética. En una edición especial del oficialista programa Mesa Redonda, reconocieron que el sistema eléctrico nacional atraviesa una situación «grave» y prometieron mejoras en los apagones para los próximos meses.
El viceministro del MINEM, Argelio Jesús Abad Vigoa, culpó al «criminal bloqueo norteamericano contra Cuba» por los apagones.
El director de la UNE, Alfredo López Valdés, refirió saber que a las personas se le estaban echando a perder los alimentos pero cerró su intervención con el habitual discurso triunfalista, llamando a resistir y confiar en las autoridades: «La batalla por la energía apenas comienza».
Las intervenciones, lejos de disipar dudas y mostrar resultados, ha aumentado la indignación popular.
En la noche del 17 de mayo se reportaron protestas en la provincia de Pinar del Río, en el extremo occidental de la Isla. Los residentes del reparto Hermanos Cruz, salieron a las calles y luego las autoridades del Partido Comunista de Cuba (PCC) de la provincia intentaron ofrecer explicaciones en el lugar.
En un audio divulgado por el periodista José Raúl Gallego, se escucha a la primera secretaria del PCC en la provincia, Yamilé Ramos Cordero, intentando aplacar la protesta. La funcionaria argumentó que Pinar del Río no es la provincia más afectada, y que «ese ‘galardón’ se lo rotan todos los territorios».
«Pinal de Río hoy puede ser la más afectada. Mañana es Granma, pasado es Holguín, después es Sancti Spíritus. Es como es», explicó. Asimismo, reconoció que hay circuitos con apagones de hasta 36 horas.
Problema sin solución
Ante la pregunta de una vecina sobre cuándo habría solución, hasta cuándo tendrían que esperar, Ramos respondió: «Ahora mismo a que el país tenga petróleo». A lo que se escucha ripostar a otra mujer: «Nunca va a tener solución».
En los últimos días, se han reportado cortes de electricidad en casi la mitad del territorio nacional, sobre todo en horarios pico (tarde-noche).
Entre octubre de 2024 y marzo de 2025, ocurrieron cuatro colapsos energéticos en la Isla que dejaron el país casi completamente a oscuras por entre tres y cinco días. No obstante, los apagones son diarios, en provincias del interior del país, las interrupciones alcanzan o incluso superan las 20 horas diarias, mientras que en La Habana los cortes programados se sitúan entre cuatro y seis horas.
Estas condiciones afectan la vida cotidiana, incluyendo servicios básicos como el suministro de agua, la distribución de gas licuado y las actividades+ económicas.