La criptomoneda se comercializaba por unos 6.214 dólares, según la cotización de Bitstamp. El avance de unos 500 euros lo aleja de su mínimo anual registrado el domingo, de 5.825,10 dólares, el peor nivel desde el mínimo anual anterior, de 5.920,72 dólares en febrero. Monedas rivales como el ripple, el ethereum y el litecoin también siguen con esta tónica
Año tras año, el Bitcoin y las criptomonedas fueron ganando espacio en los mercados internacionales. En 2011 alcanzaba apenas los 2.500 dólares, luego fue creciendo rápidamente hasta alcanzar los 20.000 dólares por unidad.
Países como China, Nigeria y Colombia, ocupaban los tres primeros lugares en transacciones de la moneda virtual que, este fin de semana, mostró su caída más baja en lo que va corrido en el año y da cuenta de una posible crisis de las transacciones que se realizan con esta divisa.
A pesar de que en Colombia el Banco de la República advirtió que el Bitcoin no estaba regulado y que no garantizaba seguridad en las transacciones, miles de usuarios colombianos utilizan la moneda para la realización de compras y ventas en la red. El porcentaje de transacciones ha crecido un 3% en los últimos meses de 2017.
Pero se trata de un mercado volátil; de acuerdo con los expertos financieros del mundo, millones de personas se hicieron millonarios gracias al uso de las criptomonedas pero también millones quedaron prácticamente en la quiebra.
El no ser un mercado racional y mantener variaciones constantes convierten al Bitcoin en el protagonista de un escenario de constantes variaciones lo que pone en riesgo a los inversionistas y es esto lo que se está viviendo hoy en día con el desplome de la divisa virtual.
Por otra parte, los ataques virtuales han puesto en evidencia el riesgo que generan las transacciones virtuales y aunque los expertos aseguran que es una cadena de bloques difícilmente falsificables, los ataques cibernéticos demuestran lo contrario y afectan el precio de la divisa.
Sin embargo, no es lo único que ha afectado el precio de las Bitcoin, las regulaciones políticas de cada país con respecto al uso de las monedas virtuales también tienen influencia en los precios. En el caso venezolano, por ejemplo, el control está creciendo rápidamente ya que, al tener serios problemas económicos, muchos han migrado las transacciones con dólares a la era virtual. El aumento se ve en casi un 40% con respecto a otros países de la región.