El optimismo está creciendo entre las pequeñas y medianas empresas en Latinoamérica, según indican los resultados de la cuarta encuesta anual Visión Pymes 2018, realizada por Brother International Corporation. De los 801 ejecutivos encuestados en Costa Rica, Panamá, Colombia, y Ecuador, el 88% cree que el 2018 será un mejor año para su negocio en comparación al 2017, incluyendo el 50% de los encuestados que esperan que 2018 sea “mucho mejor”. Si bien el optimismo empresarial ha sido alto en la encuesta anual años anteriores, los niveles de optimismo reportados en el 2018 fueron los más altos en los cuatro países.
Descubrir que los propietarios y empresarios de pequeñas y medianas empresas son optimistas no debería ser una sorpresa. Según investigaciones, muchos emprendedores y dueños de pequeñas empresas son optimistas por naturaleza y creen en sus posibilidades de triunfar a pesar de la cantidad de desafíos que enfrentan y las probabilidades realistas de mantener el éxito a largo plazo. (Lea también: Retos del gobierno en el desarrollo de las pymes)
El Dr. Utpal Dholakia, profesor de Marketing de George R. Brown en la Rice University en Texas, señala un estudio donde se revela que un tercio de los propietarios analizados creía que su empresa no tenía posibilidades de fracasar y más del 80% creía que sus negocios tenían un 70% o más de posibilidades de supervivencia.
Según la encuesta de Brother, lo que está impulsando el optimismo en América Latina este año es una combinación de factores del mundo real y también de la confianza y determinación de los empresarios. Por un lado, la perspectiva general sobre la economía fue en su mayoría positiva con 74% de los encuestados esperando que la economía general de su país mejore en 2018.
Cuando se solicitó a los participantes explicar las razones de su optimismo, los líderes empresariales señalaron los posibles cambios en la dirección política y la disminución de las regulaciones comerciales como algunos de sus motivos. Por otro lado, muchos de los encuestados indicaron que su optimismo se basaba en su propia perspectiva y confianza para poder realizar cambios, independientemente de los factores externos. Uno de los encuestados indicó que , “las empresas deben depender de sus propios esfuerzos e inversiones utilizando sus propios recursos, indistintamente a las decisiones tomadas por el gobierno”.
Mientras que algunas personas pueden mirar al emprendedor como demasiado optimista y piensan que no son realistas acerca de sus probabilidades de éxito, hay varias formas concretas en que el optimismo realmente ayuda a los gerentes y dueños de negocios a crear su propio éxito. De acuerdo con el Dr. Dholakia, tener una visión optimista en realidad ayuda a estas personas a superar muchos obstáculos para llegar al éxito e innovar. Aquí se presentan algunas razones de cómo los ayuda:
El optimismo incentiva la creatividad – Los empresarios que prevén un futuro más positivo pueden idear soluciones nuevas e innovadoras para productos y servicios sin verse limitados o atascados por las dificultades de las condiciones actuales. Investigaciones muestran que los optimistas tienden a imaginar y pensar de forma creativa acerca de hacia dónde se dirige el mundo en 10 o 20 años y pueden trazar un camino para innovar en sus negocios.
El optimismo produce acción – A los emprendedores y empresarios se les pide que tomen decisiones difíciles y que tomen riesgos todos los días. Los optimistas tienen una tendencia a actuar y tomar las decisiones necesarias para crear el futuro que imaginan para ellos y sus organizaciones. Por ejemplo, cuando sus negocios se encuentran en una encrucijada o punto decisivo, en lugar de quedar paralizados por el miedo o la incertidumbre, los optimistas tienden a tomar decisiones más rápidas sobre cuestiones importantes, como realizar inversiones o cambios en su modelo de negocio y continúan avanzando.
Los optimistas son persistentes y se recuperan del fracaso –Cuando se enfrentan a dificultades o fallan, que es común al iniciar una nueva empresa, tienden a ser más resilientes y persistentes para seguir avanzando. Usualmente cambian la página y siguen luchando por alcanzar el éxito. Casi todos los emprendedores e innovadores más famosos del mundo fallaron antes de convertirse en personajes exitosos. Lo que les ayudó a alcanzar ese nivel de éxito fue su persistencia y su capacidad de aprender de los errores y comenzar de nuevo.
Sin embargo, solo ser optimista no resolverá todos los problemas. Los gerentes deben basar sus decisiones y planificaciones en las condiciones y hechos del mundo real. No obstante, los emprendedores y los propietarios de pequeñas y medianas empresas pueden apoyarse en su perspectiva optimista e infundirla en sus lugares de trabajo y procesos con una perspectiva centrada en el futuro. Si aprovechan esta ola de optimismo, pueden seguir innovando y creciendo.