Stephen Hawking lo predijo: «Cada aspecto de nuestras vidas será transformado por la Inteligencia Artificial. Ese podría ser el evento más grande en la historia de nuestra civilización». Todavía el mundo no ha llegado completamente a ese momento, pero es cuestión de tiempo.
Un estudio sobre el futuro del mundo mediado por la IA realizado por Accenture revela que esta tecnología podría llegar a duplicar las tasas anuales de crecimiento económico en 2035, cambiando la naturaleza del trabajo y estableciendo una nueva relación entre el hombre y la máquina. Se prevé que el impacto de la IA en los negocios aumentará la productividad del trabajo hasta en un 40% y permitirá a las personas hacer un uso más eficiente de su tiempo.
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Es definitivamente una nueva era. Y así como transformará por completo los procesos de producción, de comercialización, de marketing y de servicio a los clientes (los chatbots son solo el comienzo), también cambiará la manera en que se lideran los equipos de trabajo y se toman las decisiones en las organizaciones.
SAS comparte el listado de las 5 principales habilidades que deberán incorporar los líderes para orientar a los equipos de trabajo, a las empresas y a los países en la era de la analítica y la IA:
- Pensamiento prospectivo
La era de la analítica y la inteligencia artificial es la respuesta a un mundo que cambia cada vez más rápido y que vive en constante evolución. Frases como “así lo hemos hecho toda la vida y ha funcionado bien” o “la experiencia nos ha demostrado que…” ya no tienen tanta cabida entre los líderes. “Las llamadas ciencias de datos, entre las que están la analítica y la inteligencia artificial utilizan la data histórica como referencia para predecir escenarios y tomar las mejores decisiones. Los líderes en la era de la inteligencia artificial no viven revisando el pasado sino aprovechando los datos para tomar decisiones inteligentes previendo el futuro”, explica José Mutis O, country manager de SAS para Colombia y Ecuador.
- Orientación a la innovación
Son muchos los líderes que viven orientados por los resultados. Eso funciona y es importante, pero implica muchos riegos (se puede lograr el éxito o fracasar en el intento). En la era de la analítica y la inteligencia artificial todo va más rápido que en todas las eras predecesoras (por ejemplo, el ciclo útil y el promedio de recambio de un teléfono apenas es de 12 meses) por lo que estar orientado a la innovación es la mejor forma de adaptarse a esa velocidad y mantener la vanguardia en el mercado.
El liderazgo debe ser colectivo y comunicativo
- Gestión inteligente de riesgos
La pandemia ha demostrado uan vez más que no todo se puede planear o prever, que los cambios pueden suceder en cualquier momento y que lo hay que saber hacer es adaptarse y salir fortalecidos de ellos. “La inteligencia artificial permite identificar y gestionar los riesgos en una mejor forma. Los líderes de la nueva era deben saber plantear modelos de riesgo basados en los datos, estadísticas, variables y correlaciones, no en la intuición. Deben saber hacer pruebas de estrés (testing) a diferentes situaciones y saber moverse de manera inteligente y segura aún en medio de escenarios de incertidumbre”, declara Mutis.
- Directores de datos
Si algo identifica a la era de la analítica y la inteligencia artificial es la gran cantidad de datos que se crean, circulan y se tienen al alcance cada día (se estima que diariamente se crean 2,5 quintillones de bytes de datos nuevos en el mundo y que este índice aumentará exponencialmente cuando haya más dispoitivos conectados mediante el Internet de las Cosas). Las máquinas, el software y diferentes aplicaciones ayudarán a organizar y visualizar esos datos en cuestión de segundos, incluso aportarán insights al analizarlos, pero son los líderes finalmente los que deben estar preparados y ser cada vez más ágiles para convertir esos insights en mayor inteligencia para la toma de decisiones.
- Líderes con humanidad
Es cierto que se estará liderando procesos en los que cada vez intervienen más las máquinas, el software o los dispositivos, pero a la par estarán los humanos. “El liderazgo con humanidad lleva a conocer siempre las situaciones por las que puede estar pasando una persona y poder analizar e incluso anticipar qué consecuencias o impacto pueden tener esas situaciones en el comportamiento, el rendimiento o las reacciones que se puedan tener. La inteligencia artificial no va a reemplazar a los humanos sino que los va a desplazar a otro tipo de acciones incluso más estratégicas e importantes. Ese componente humano no puede ser perdido de vista nunca por un líder”, puntualiza Mutis.