Desde hace 18 años, un grupo de compañías y empresarios han puesto en sus agendas un tema que, a primera vista, podría resultarles ajeno: el juego.
En sus encuentros durante la junta directiva de la Corporación Juego y Niñez, los empresarios que hacen parte conversan sobre ludotecas, recreos y potencialidades que tiene el juego en el desarrollo de habilidades socioemocionales (empatía, solidaridad y creatividad). El objetivo: mejorar la educación.
“Existe un acuerdo fundamental alrededor de los temas de educación y bienestar desde la primera infancia. Es la palanca más potente que tenemos todos para acelerar el desarrollo y la calidad de vida”, explica Jorge Silva, gerente general de Microsoft México y miembro del Consejo de Fundadores de esta organización.
En palabras de Silva, el aporte que da el juego a la formación de los seres humanos es la principal motivación que ha llevado a los empresarios a ser parte de esta corporación creada hace 20 años.
“Se ha estudiado profundamente el juego y se ha demostrado el beneficio que tiene desde el aprendizaje mismo, y para la socialización, el bienestar y el fortalecimiento de las relaciones y la familia. De hecho, existen corrientes globales que apoyan lo que se ha llamado la gamificacion de la educación para revolucionar el proceso educativo, para mantener el interés de los estudiantes y para despertar la curiosidad y la motivación en los jóvenes”.
El programa bandera de la organización es Ludotecas NAVES de Infancia, que incluye las Ludotecas NAVES Itinerantes de Primera Infancia. En estos espacios, niños de zonas alejadas (veredas, corregimientos y resguardos indígenas) tienen la posibilidad de participar en procesos educativos a través de juegos espontáneos y dirigidos.
En el país existen 41 ludotecas de este programa y hoy varias de ellas son objeto de análisis. Desde hace dos años, la Universidad Nacional está realizando un estudio sobre su impacto, el cual estará listo en dos años más. Los hallazgos preliminares muestran que los niños que asisten a ellas desarrollan habilidades socioemocionales, competencias ciudadanas y creatividad.
Los investigadores de la Nacional concluyeron que las competencias se favorecen en la medida en que los niños estén más tiempo en estos espacios, razón por la cual recomendaron que asistan desde los 7 años a las ludotecas.
“El estudio revela que los niños en los escenarios tradicionales de formación, como la escuela, siguen curvas decrecientes del desarrollo de sus competencias, especialmente en la creatividad y en las competencias emocionales, pero los niños que asisten a ludotecas tienen curvas crecientes de estas”, señala Rita Flórez Romero, directora del Grupo de Investigación Cognición y Lenguaje en la Infancia de la Universidad Nacional, a cargo de la investigación. “El desarrollo de competencias emocionales como la empatía es importante en nuestro país, especialmente cuando necesitamos de estas competencias para seguir creciendo como una nación que comprende al otro y es capaz de perdonar y de resolver pacíficamente sus conflictos”.
El año pasado, 113.976 niños de manera directa e indirecta, de más de 600 municipios del país, se beneficiaron con las Ludotecas NAVES y con los diferentes proyectos de la corporación.
A partir de la experiencia adquirida en Ludotecas NAVES (programa que realiza en asocio con administraciones municipales y aportantes privados que las apadrinan), la Corporación Juego y Niñez brinda acompañamiento, formación y asesoría presencial para el diagnóstico, análisis y orientación de programas y proyectos de infancia en diferentes municipios acorde con las necesidades y problemáticas más relevantes de cada población, utilizando para ello el juego y la lúdica.
“Hemos ido estableciendo un proceso de sensibilización con los mandatarios locales, departamentales y las instituciones de nivel nacional para que comprendan y nos ayuden a promover el juego en el ámbito familiar y comunitario. Tenemos una metodología lúdica propia y alianzas estratégicas público-privadas que nos permiten contribuir con el desarrollo integral de la infancia”, explica Ruth Camelo, directora de la corporación.
Además, tiene un plan de formación en juego, infancia y desarrollo para madres comunitarias, docentes interesados en nuevas metodologías pedagógicas desde el juego, personas vinculadas a jardines infantiles, ONG, colegios, fundaciones, comedores comunitarios y profesionales del nivel técnico, tecnólogo o profesional de ciencias de la educación.
“En 2016 contribuimos en la cualificación de 2.443 docentes y 17.916 actores de infancia para asegurar y empoderar a las comunidades a través de nuestra metodología innovadora de juego sobre el valor que tiene la niñez”, señala Camelo.
“Con su trabajo, la corporación ha desarrollado un modelo de operación con alianzas estratégicas con el sector público y privado que ha demostrado con hechos que sí se puede”, señala el empresario de la publicidad Fernando Martelo, quien es socio fundador de la organización.
Entre los miembros de la corporación están: Almacenes Máximo y Pepe Ganga, Coca-Cola Servicios de Colombia, Coca-Cola Femsa, Fundación Femsa, Chevron Petroleum Company, Argos S.A, Institución Universitaria Politécnico Grancolombiano, Kellogg´s de Colombia, Nestlé de Colombia S.A, Petrobras International Brastero, Procter & Gamble Colombia Ltda, Microsoft Colombia, Autotécnica Colombiana S.A, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, el Ministerio de Vivienda, la Secretaría de Educación de la Alcaldía Mayor de Bogotá D.C, la Presidencia de la Republica de Colombia y la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI).
“Promovemos un modelo de educación que favorece las habilidades emocionales y sociales que hoy, más que nunca, requerimos. Nuestros procesos aprovechan la movilidad del cerebro que da la lúdica para promover competencias ciudadanas y desarrollar la creatividad que permite alcanzar el éxito. El juego, aun cuando a veces no se crea, es el lenguaje ideal para generar relaciones convivientes en la familia”, concluye Camelo.