El coronavirus avanza de manera implacable sin distinguir lugares o estratos socioeconómicos. Frente a la preocupación colectiva de contagio, las personas de diferentes nacionalidades compran tapabocas de todo tipo para cubrirse y más ante el miedo que existen muchos portadores que no desarrollan síntomas pero pueden contagiar.
Carl Bergstrom, biólogo evolutivo de la Universidad de Washington dedicado al estudio de nuevas enfermedades infecciosas, dijo a AP que cubrirse la boca y la nariz no protege, pero si alguien porta la enfermedad sí se podrían reducir las transmisiones.
Recientemente la Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió un comunicado para informar que las personas que no tienen los síntomas respiratorios «no requieren una máscara médica, ya que no hay evidencia disponible sobre su utilidad para proteger a personas no enfermas».
De acuerdo con el organismo internacional, los estudios realizados hasta la fecha apuntan a que coronavirus se transmite únicamente por contacto con las gotitas respiratorias proyectadas por una persona contagiada, las que se producen al estornudar o toser, descartando que haya evidencia de que el virus se transmita por el aire.
Según el organismo internacional, la mejor medida de prevención es la buena higiene en las manos a través de un adecuado lavado y uso constante de gel antibacterial.
La gente se pregunta si estas sorprendentes declaraciones son verdad o es un intento por frenar la compra indiscriminada de tapabocas alrededor de todo el mundo que ha provocado escasez, situación que pone en riesgo principalmente a profesionales de la salud y otros trabajadores relacionados con temas sanitarios.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos no recomiendan tampoco el uso de máscaras faciales en público para prevenir infecciones, menciona el TIME. La Dra. Nancy Messonnier, directora del Centro Nacional de Inmunización y Enfermedades Respiratorias, reitera que las mejores medidas preventivas incluyen lavarse las manos y cubrirse al toser.
Epidemiólogos como Alexander Torres, de la Secretaría de Salud de Santander, explicó a la Vanguardia que «la población general que no está enferma, no debe utilizar tapabocas. En lugar de convertirse en un factor protector para evitar la enfermedad, se puede convertir en un factor de riesgo, pues si todo el tiempo me estoy tocando la cara con las manos, para acomodarme el tapabocas, aumento las posibilidades de adquirir una enfermedad respiratoria y contagiar a otros”
Además, el Instituto Nacional de Salud dice que deben usar el tapabocas solo aquellos que tienen alguna sintomatología respiratoria (tos, resfriado o secreción) para evitar propagar virus respiratorios que hagan más vulnerables a la población al contagio del Covid-19.