Lo que parecía una película de ficción es nuestra realidad y cotidianidad ahora; el ecommerce, la compra y venta en línea de bienes y servicios, es casi que una forma habitual de comerciar y hacer negocios en la sociedad actual.
Sin embargo, comprar un carro o una casa, y adquirir cierto tipo de bienes y servicios, sigue teniendo barreras varias a través de las plataformas digitales. Esto, muchas veces, debido a la cantidad de papeles, de formularios, de documentos que se requieren para poder validar que el comprador es quien dice ser y así construir la confianza necesaria entre el vendedor y quien compra.
Este tipo de procedimientos comerciales suelen ser muy engorrosos para los clientes, pues significa enfrentarse a formularios interminables que pueden, incluso, repetirse en diferentes instancias del proceso de compra. Cerca del 50 % de las personas abandonan un proceso de compra por incomodidades relacionadas con un formulario o el proceso de pago según un estudio del Instituto Baymard y de estas la mitad no se sienten seguras en el proceso.
“Esta realidad de obstáculos y pasos sin fin no es ajeno para nadie, y es casi imposible encontrar hoy que se logre la construcción de confianza en línea y con fluidez de una forma que sea inteligente, rápida y segura, comenta Julián Mora, CEO de anteia, una startup que lidera la innovación en Identidad Digital en el país.
La identidad digital es el primer eslabón de una cadena de procesos en línea que acercan a las empresas y a sus mercados, y a la vez se convierte en la primera línea de defensa y ciberseguridad de los sistemas empresariales que viven y crecen cada vez más en internet y en la nube.
“Para empresas y personas, la identidad digital es el puente que les brinda velocidad, seguridad y confianza para su interacción. Sin embargo, para que esto pueda suceder, las empresas requieren de una serie de herramientas que les permitan realizar la verificación de esta identidad de forma multifactorial: cuantos más factores en menos tiempo, más seguro el proceso para todos. Y para el negocio, también se hace cada vez más importante que la data que compone esta identidad pueda usarse de forma más inteligente para todo proceso con sus clientes”, explica Mora, de anteia.
Cambiando la forma de vender y comprar
Aquí es ilustrativo pensar en un caso para dimensionar lo que se puede hacer con la Identidad Digital Avanzada, por ejemplo, en la venta y compra de un carro a través de un sitio en internet.
A través del sitio web de un concesionario de vehículos y su plataforma de compras es perfectamente posible ver los distintos modelos disponibles, y a través de una buena interfaz todo lo estético y funcional no mecánico, y si el sitio cuenta con un servicio de peritaje, tendrá un informe del estado mecánico del carro con detalle.
Además de toda esta información, si el carro es usado, el concesionario previamente ha requerido una serie de documentos y la verificación de la autenticidad del anterior propietario y del estado legal del carro. Para esto las improntas, RUNT, paz y salvo de Tránsito, lo cual se podría tener parcialmente en línea y almacenar, aunque hasta hoy no es fácil lograrlo.
Ahora, al momento de realizar la cita con un potencial comprador, el concesionario quiere cerciorarse de quién es antes de enviar el vehículo a su domicilio para una prueba, así que requiere datos como identificación legal, pase de conducción, dirección de residencia, certificación bancaria y laboral, y el número celular y correo electrónico.
La verificación de esta documentación, data e Identidad de quien le vendió o le va a comprar el carro es indispensable para que todo el proceso de compra o venta del carro pueda ser realmente en línea, rápido y seguro. Pero esto tampoco está disponible hoy en esos sitios.
Y es ahí donde una Identidad Digital Avanzada, como la ha concebido anteia, es la tecnología clave para cambiar el futuro y lograr todo esto en el presente.
A partir de la construcción de la Identidad Digital del propietario del carro usado y del próximo comprador, se obtiene una data clave para la seguridad de todo el proceso que a su vez se va a cruzar con la información del vehículo almacenada en decenas de bases de datos.
Sobre la persona se establecen múltiples factores de verificación sobre su identidad, y se le habilita una plataforma para que cargue sus documentos requeridos para asociarlos a la venta o compra, se verifica su autenticidad con video computing y múltiples frames, se coteja con bases de datos legales, judiciales, comerciales y bancarias y se asegura así su identidad, pero también la veracidad de toda su información y luego se almacena para llenar de forma inteligente y automatizada formularios y contratos para cerrar la venta.
Finalmente, se habilita la firma electrónica para toda la documentación, legal y válida, y se pueden realizar y aceptar pagos biométricos. Así es la Identidad Digital Avanzada.
“Sin duda esta innovación, será la clave que muchas empresas han estado esperando para ver rápidamente el impacto de la inteligencia artificial y el machine learning en las ventas de sus negocios sin mayores complejidades ni desarrollos en sus infraestructuras tecnológicas. Es un cambio de velocidad y seguridad en sus negocios”, afirma Julián de anteia.