La construcción de espacios industriales y bodegas, al igual que la de oficinas y centros comerciales, ha sido impulsada por la entrada de fondos de inversión inmobiliaria y otros mecanismos de inversión en finca raíz en el mercado colombiano desde hace algunos años.

Sin embargo, desde 2016 se ha presentado una caída del licenciamiento del área no habitacional. Por ejemplo, según el Dane, el total de áreas licenciadas para destinos no habitacionales entre febrero de  2016 y febrero de 2017 fue de 5’912.380 m2, una cifra realmente baja si se compara con los años inmediatamente anteriores que fueron de 6’169.007 m2 y 8’237.178 m2, respectivamente, lo que equivale a una reducción del 4,2%.

Al desagregar el segmento, es evidente que las edificaciones industriales, que incluyen fábricas, plantas, talleres, etc., han perdido dinamismo, mientras que las bodegas han aumentado relativamente el licenciamiento.

En el último año, a febrero de 2018, en aprobación de áreas para industria, la reducción fue de 24,6%; las licencias de construcción llegaron a 413.067 m2, mientras a febrero de 2017 llegaron a 547.475 m2. Respecto a áreas para bodegas, se aprobaron 890.605 m2 en el mismo periodo. Comparado con el año anterior, su crecimiento fue de 3,7%, dado que a febrero de 2017 el licenciamiento fue de 858.900.

De acuerdo con Camacol esto se debe a que el sector de plantas industriales o fábricas está estrechamente ligado a la actividad industrial, la cual presentó una desmejora en el último año. Por su parte, la ANDI, a pesar del deterioro de los indicadores del sector en el 2017, espera que para lo que resta del 2018 la industria regrese a terreno positivo y pase a crecer 1,0%, debido a la recuperación la economía.