El Ministerio de Salud reveló los protocolos de bioseguridad para el consumo de bebidas alcohólicas en restaurantes y bares.
El protocolo establece que los establecimientos que no cuenten con la infraestructura necesaria, no podrán habilitar el servicio.
Dentro de las medidas de adecuación se encuentra la instalación un punto de control en la entrada del establecimiento para hacer registro de ingreso de clientes, así como toma de temperatura, autodeclaración de estado de salud, verificación del uso correcto de tapabocas y la realización de la desinfección de manos.
Además es importante garantizar la circulación natural del aire para disminuir el riesgo de propagación, así como el distanciamiento físico de dos metros entre personas en las barras en caso de que aplique y entre mesas o grupos de personas.
En lo posible, se deberá habilitar una puerta de ingreso y otra de salida con el fin de controlar el flujo y circulación de personas. Igualmente, se prohíbe el uso de cualquier tipo de decoración para ocasiones especiales.
El personal debe contar con elementos de protección y cumplir con pausas activas para el lavado de manos o uso de desinfectante, en especial después de cualquier contacto con algún cliente o elemento.
Igualmente, se debe instar a los clientes a cumplir con esta medida de autocuidado, después de toser o estornudar, de haber tenido contacto con dinero y antes y después de comer.
Los establecimientos deben establecer un protocolo de desinfección y limpieza específico para las áreas de cocina y puntos de contacto, como la barra, manijas de puertas, caja, ascensores.
Asimismo, se deben hacer permanentes recolecciones de residuos sólidos y desinfecciones de las mesas y sillas cada vez que sean utilizadas.
El protocolo contempla la eliminación del uso de cartas o menús en físico, servir en platos o vasos individuales los productos que sean para compartir, así como informar a los clientes sobre la prohibición de compartir comidas, bebidas, tragos y cigarrillos.
Las botellas de licor deben ser desinfectadas antes de ser entregadas a los clientes y poner a disposición los elementos necesarios para su consumo individual.
Se prohíbe el baile en el interior del establecimiento y en las áreas que tenga habilitadas para prestar este servicio. Las pistas deberán ser utilizadas para la adecuación de mesas y debe haber un distanciamiento de 2 metros entre persona y persona en las barras y las mesas o grupos.
También se prohíbe el lanzamiento de papeletas, espuma, confeti, agua y otros elementos o sustancias que puedan convertirse en fuente de contagio y compartir elementos como los micrófonos.
La sugerencia son las mesas al aire libre, así como una estrategia de comunicación que permita a clientes y personal conocer las medidas de prevención y contar con carteles que contengas las medidas que deben ser acogidas.
En el protocolo también se contemplan medidas para el usuario, el personal que trabaja en el establecimiento, el manejo de situaciones de riesgo, elementos de protección personal y dotación, y la coordinación con las ARL.