Aunque la gran mayoría de los estudiantes colombianos han regresado a sus aulas, la desconcentración, los bajos resultados académicos, la ansiedad y la depresión, reinan en los entornos académicos, como secuelas de la descompensación que dejó en los jóvenes el encierro y el solitario estudio desde casa durante la pandemia.
Según la investigación realizada por la fonoaudióloga Gloria Isabel Bermúdez, magíster en Discapacidad e Inclusión Social de la Universidad Nacional de Colombia, para finales del 2021, el 98 % de los estudiantes universitarios se sentían afectados física y mentalmente por la pandemia, mostrando síntomas como tristeza, ansiedad, dificultad para concentrarse, depresión, alteraciones del sueño, mayor irritabilidad, sensación de soledad y estrés constante.
Así mismo, en cuanto a los más jóvenes, el Instituto Colombiano de Neurociencias de Colombia, tras una encuesta a 651 hogares, encontró que el 88% de los niños tiene alguna afectación en la salud mental y el comportamiento, y el 42% ha visto afectadas sus habilidades académicas en post pandemia.
En este panorama, recuperar la salud mental y mejorar el rendimiento académico de los jóvenes es un verdadero reto para las instituciones educativas que hoy echan mano de todas las estrategias posibles, incluida la tecnología para la educación o EdTech, tendencia que hoy resulta muy útil a la hora de facilitar la readaptación post pandemia de los jóvenes al entorno educativo.
John Baker, Presidente y CEO de D2L, empresa dedicada a desarrollar e implementar herramientas tecnológicas para la educación, y cuyas soluciones se usan hoy en más de 40 países en 6 continentes, “conocer en detalle el rendimiento académico de un estudiante es fundamental a la hora de ayudarle a desarrollarse intelectualmente, pero conocer además sus fortalezas, sus debilidades, sus habilidades y sus expectativas, nos ayuda a individualizar la experiencia y potencializar sus capacidades propias”.
Con esta dinámica de usar las nuevas tecnologías para enseñar, pero a la vez revisar los procesos de enseñanza y aprendizaje “a la medida”, la EdTech, que ya venía siendo parte fundamental de la enseñanza virtual, predominante durante la pandemia, presenta muchas otras ventajas que hay que destacar.
Según el CEO de D2L, “uno de nuestros principales casos de éxito ha sido la implementación que hicimos con el Proyecto Robb Nash, en los Estados Unidos, una organización que parte de experiencias musicales para combatir temas relacionados con la salud mental como la depresión, la ansiedad, las autolesiones, las adicciones, el acoso escolar y el suicidio. Para ellos desarrollamos un programa interactivo en línea, que a través de historias de la vida real y de la música llevan un mensaje positivo de apoyo social y emocional para sus participantes”.
Este es solo un ejemplo de las capacidades de esta tecnología, basada en innovaciones de software, hardware y procesos encaminados a promover la educación para ofrecer flexibilidad y accesibilidad a los recursos educativos al ritmo de cada individuo y en el momento más adecuado para cada quien.
Otra de sus ventajas es el acceso a la interactividad porque lejos de las clases magistrales de la tiza y el tablero, los estudiantes tienen la posibilidad de aprender por medio de la experiencia a través de herramientas como el video interactivo y la tecnología de inmersión virtual 3D y 4D.
Pero más allá de ofrecer nuevas formas de enseñar para los docentes, y de aprender para los estudiantes, una de las grandes ventajas de la EdTech es definitivamente es el acercamiento y la familiarización a muchas herramientas tecnológicas que en el futuro harán de sus usuarios, profesionales mejor calificados y mejor preparados para el trabajo colaborativo.
Colombia, ya en el camino del EdTech, conozca los detalles
Con el retorno a la presencialidad, las estrategias EdTech refuerzan procesos educativos y ayudan a la reconexión de los jóvenes, aburridos de estudiar solos en casa durante la pandemia.