Colombia concluyó el ciclo de evaluación de las calificadoras de riesgo con un balance positivo, aunque con contrastes entre lo que dice Moody’s vs la decisión de Fitch.
En lo corrido de 2019, cuatro agencias calificadoras: Moody’s (23 de mayo), Fitch Ratings (23 de mayo), Rating & Investment (22 de mayo), y DBRS (12 de abril) ratificaron la calificación de la deuda a largo plazo en moneda extranjera del país en BBB, un escalón por encima del grado de inversión.
Moody´s cambió la perspectiva de calificación de negativa a estable; R&I y DBRS mantuvieron la perspectiva de la calificación en Estable, pero Fitch la revisó de estable a negativa.
Al explicar su decisión, Moody’s citó dos argumentos: en primer lugar, la recuperación de la actividad económica y los esfuerzos del gobierno para garantizar la consolidación de las cuentas fiscales en el mediano plazo. Un segundo elemento fue el comparativo del país frente a sus pares, pues el escenario global muestra que su crecimiento está más alineado con la calificación de Baa2 y superior a Baa3 (equivalente a BBB-).
“En términos generales, la decisión de Moody’s resultó sorpresiva, sobre todo después del crecimiento económico del primer trimestre (2.8% anual) que acentuó la incertidumbre frente al ritmo de recuperación”, según un análisis del Banco de Bogotá.
Por su parte, la decisión de Fitch contrastó con lo anterior, aunque reafirmó la calificación en BBB. Su decisión de revisar la perspectiva de estable a negativa se basó en tres argumentos:
1) los riesgos para la consolidación fiscal y posterior descenso del nivel de deuda pública; 2) el debilitamiento en la credibilidad de la política fiscal; y 3) aumento del riesgo de desequilibrios externos.
“El mensaje que nos dejan hoy los pronunciamientos es claro: Colombia continúa siendo un país con grado de inversión. Sin embargo, para nosotros la perspectiva negativa (de Fitch) se encuentra mucho más alineada con los riesgos que percibimos para la economía y el sector fiscal desde 2020 hacia adelante”, dijo un análisis de Bancolombia.
Reacciona el gobierno
“Los mercados financieros internacionales tienen confianza en la economía colombiana que ya empieza a mostrar resultados de recuperación”, explicó el Ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, al señalar el compromiso del Gobierno para adelantar las políticas que permitan reactivar el crecimiento económico, reducir el déficit fiscal, estabilizar la deuda pública y mantener un ambiente propicio para la inversión.
Según el funcionario, Colombia se destaca hoy como el país con grado de inversión que más creció (2,8%) en América Latina en el primer trimestre del año, superando a las economías de Chile (1,6%), México (1,3%) y Perú (2,3%), de acuerdo con la última información disponible.
“Adicionalmente, en materia fiscal, por primera vez el Gobierno nacional tiene una meta de déficit fiscal (2,4% del PIB) inferior al techo establecido por la regla fiscal (2,7% del PIB). Este resultado generará el primer superávit primario en siete años (0,6% del PIB), el más alto desde 2008, y contribuirá a estabilizar la trayectoria de la deuda pública”.
A juicio de Carrasquilla, las medidas implementadas por el Gobierno en materia fiscal han sido efectivas en lo corrido del año. “El recaudo tributario creció 8,8% a abril, cumpliendo 100% la meta de la Dian. La política de ajuste en el gasto público se ha materializado en un congelamiento y subejecución de $10 billones (1.0% del PIB). La posición de liquidez del Gobierno es sólida, con $29 billones en depósitos en el Banco de la República”.
Por otra parte, gracias a la acumulación de reservas internacionales del Banco de la República, estas alcanzan hoy más de US$51.000 millones que, sumadas a la Línea de Crédito Flexible con el Fondo Monetario Internacional de US$11.400 millones, permiten mitigar posibles choques externos.