Aunque hasta los ex ministros de Hacienda coinciden en que sacar adelante una reforma tributaria estructural es una casi misión imposible en Colombia, el Gobierno se jugará la carta por lograrlo en 2021, o al menos por corregir los problemas que, a juicio de los expertos, tiene el estatuto tributario actual.
Y es que mientras en los países desarrollados de la OCDE (club selecto al que pertenecemos) el 73,5% del recaudo proviene de las personas naturales, en Colombia las empresas aportan el 79,9% y los trabajadores solo el 20,1%, una cifra inferior al promedio de Latinoamérica (39,3%) y al de los países emergentes (45,1%).
Pero además, de cada $100 de recaudo potencial del IVA, en Colombia solo se recaudan $39, por cuenta de la gran cantidad de bienes exentos y excluidos que pagan una menor tarifa o que sencillamente no están gravados.
A ello hay que sumar que los pensionados no pagan renta, la base para pagar dicho impuesto es “demasiado alta” y el sistema no tiene en cuenta la “capacidad contributiva” de las personas.
Con el fin de reformar el estatuto tributario el Ministerio de Hacienda, la DIAN y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), instalaron ayer la Comisión de Expertos en Beneficios Tributarios, que se encargará de estudiar durante los próximos 9 meses los tratamientos excepcionales vigentes.
Siga en vivo la rueda de prensa sobre la instalación de la Comisión de Expertos en Beneficios Tributarios https://t.co/cHDeoyUB0n
— MinHacienda (@MinHacienda) August 18, 2020
Aunque el Gobierno prevé un rebote de la economía en “V” en 2021, esto es, con una recesión del 5,5% este año y un crecimiento del 6,6%, en 2021, el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, ha dicho que no hay margen para aumentar el gasto y que la deuda pública como porcentaje del PIB llegará al 65,6%.
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Según el Marco Fiscal de Mediano Plazo, después de cerrar 2019 con un déficit del 2,5%, el Gobierno Nacional Central tendrá un faltante de recursos del 8,2% del PIB en 2020, aunque después disminuiría al 5,1% del PIB en 2021.
Cada punto del PIB equivale a unos $10 billones. En plata blanca, eso quiere decir que el Gobierno tendrá que lograr la aprobación en el Congreso de una reforma tributaria que le permita aumentar el recaudo en unos $20 billones (2 puntos del PIB) para comenzar a equilibrar las cuentas y no dejarle el “chicharrón” al próximo presidente.
Dicha cifra ($20 billones) equivale a 3 veces el tamaño de las últimas reformas tributarias, lo cual hará difícil su aprobación en 2021, seguramente en el primer semestre, dado que en 2022 habrá elecciones legislativas y presidenciales.
“Hay personas naturales que pueden ganar lo mismo, pero una persona natural puede tener hijos, dependientes, muchos gastos y hacer inversión social y la otra no, y por tanto, la otra tendrá mayor capacidad contributiva», señaló el director de la DIAN, José Andrés Romero.
La Comisión operará hasta mediados de 2021 y entregará los documentos preliminares a partir de febrero.
Las cinco mesas de trabajo serán sobre los siguientes temas: impuesto de renta corporativo, impuesto de renta a personas naturales y dividendos, impuesto al valor agregado (IVA), comercio exterior, ingresos no constitutivos de renta e incentivos para el campo.
El Gobierno espera que tanto los borradores como el informe final de la Comisión sean insumos para llevar a cabo la reforma fiscal que el país requiere, tal como se señaló en el Marco Fiscal de Mediano Plazo de 2020.