El programa de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) realiza cada tres años un examen mundial de las habilidades de los estudiantes de 15 años en lectura, matemáticas y ciencias.
Y según los resultados de las pruebas realizadas en 2018, dadas a conocer este martes, los estudiantes de los dos municipios (Pekín y Shangái) y dos provincias (Jiangsu y Zhejiang) de China lograron mejores resultados que los de Singapur en las tres asignaturas.
El tercer puesto tanto en lectura como matemáticas y ciencias fue para Macao, una región especial administrativa de China, confirmando así el predominio educativo asiático.
El país no asiático mejor posicionado fue la pequeña Estonia, cuarta global en lectura y ciencias y octava en matemáticas, en lo que también fue superada por Hong Kong, Taiwán, Japón y Corea del Sur.
En el continente americano, por su parte, los mejores resultados fueron para Canadá, que ocupó el séptimo puesto global en lectura, el octavo en ciencias y el número 12 en matemáticas.
Unos 600.000 estudiantes de 79 países participaron en las pruebas.
América Latina
Chile fue el país latinoamericano con mejores resultados en lectura, ocupando el puesto 43 a nivel global, seguido de Uruguay y Costa Rica.
Pero todos los países latinoamericanos evaluados obtuvieron una clasificación inferior a la del promedio de países de la OCDE, el denominado «club de los países más ricos del mundo» al que pertenecen Chile y México.
Lo mismo ocurrió en ciencias, en las que Chile volvió a encabezar la cohorte latinoamericana con el puesto 45 a nivel global, siempre seguido de Uruguay.
El tercer latinoamericano en esta asignatura, sin embargo, fue México (57 global), con Costa Rica ocupando el puesto 60.
Uruguay fue por su parte el mejor país latinoamericano en matemáticas, ocupando el puesto 58 entre todos los 79 países evaluados.
En esta asignatura los estudiantes charrúas obtuvieron un punto más que sus pares chilenos (puesto 59 global), con los mexicanos un poco más atrás (puesto 61).
Una vez más, todos los países latinoamericanos registraron puntajes inferiores al promedio de países de la OCDE.
Problemas de lectura
En su edición 2018, las pruebas PISA se concentraron especialmente en la evaluación de las capacidades de lectura.
Y según la OCDE, los resultados sugieren que uno de cada cuatro estudiantes de los 36 países miembros de la organización no pueden completar las tareas más básicas de lectura, un problema que es todavía mayor en el llamado mundo en desarrollo.
Además el porcentaje de estudiantes con bajo desempeño también aumentó en comparación con 2009, el último año en que PISA se enfocó en Lectura.
Y, según la organización, los problemas de comprensión lectora podrían limitar las oportunidades de las nuevas generaciones «en un mundo digital cada vez más volátil».
«Sin la educación adecuada, los jóvenes languidecerán al margen de la sociedad, incapaces de enfrentar los desafíos del futuro mundo del trabajo, y la desigualdad continuará aumentando», advirtió sin embargo el Secretario General de la OCDE, Ángel Gurría, al presentar el informe.