En el caso de Coopidrogas, Mauricio Quintero ha logrado que los dueños sean los mismos clientes, que conocen de primera mano sus necesidades y participan dentro del proceso de diseño de estrategias para satisfacerlas y alcanzar los objetivos.

Además, asegura que el reto está en llevar al pequeño comerciante a un escenario de negocios en el que permanezca, obtenga un beneficio justo y crezca, pues las grandes cadenas tienen amplios recursos que desplazan al pequeño empresario y le van dejando una limitada participación.