La UE «salva las apariencias» con el préstamo a Ucrania
Con el acuerdo de última hora para garantizar la financiación de Ucrania a través de un crédito conjunto, la Unión Europea ha logrado salvar su reputación, pero de nuevo a base de mostrar sus profundas debilidades.La fórmula acordada no incluye el uso directo … de los fondos rusos congelados por las sanciones como proponía la mayoría. Al final los líderes optaron por un préstamo de 90.000 millones de euros que se recaudará mediante deuda común, pero a través del mecanismo de cooperación reforzada de 24 Estados miembros.
Esta fórmula se utiliza cuando hay países que no desean sumarse a determinada decisión, como Hungría, la República Checa y Eslovaquia, pero se necesita utilizar las instituciones comunitarias.
Aunque se especifica que la opción de utilizar los activos rusos sigue abierta para contentar al canciller alemán Friedrich Merz, en realidad el papel del vencedor se le puede atribuir al primer ministro húngaro, Viktor Orbán, quien ha logrado proteger en lo posible el dinero de Putin. Además, el mandatario no tendrá que contribuir a la financiación de Ucrania.
Bélgica ha logrado salvar los muebles y preservar su reputación de país europeísta y aliado de Ucrania, sin ceder a las presiones que le pedían que desbloquease esos fondos a pesar de los riesgos jurídicos. El primer ministro belga, Bart de Wever, había señalado al término de la reunión que si el Consejo Europeo no hubiera llegado a un acuerdo «habría sido un desastre estratégico».
Alerta de colapsar
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, que participó en parte de la reunión del Consejo Europeo, recordó a los líderes europeos que Ucrania corría el riesgo de colapsar económicamente en tres meses, por falta de la ayuda financiera.
Ucrania estima que necesitará 134.000 millones de euros en los próximos dos años (2026 y 2027), de los cuales la Unión Europea se ha comprometido a cubrir cerca de dos tercios. Ese dinero no solo lo necesita para seguir combatiendo, sino sobre todo para mantener abierta la posibilidad de una negociación de paz medianamente digna.
«Hemos pasado de centrarnos en salvar a Ucrania a preocuparnos por salvar las apariencias»
Friedrich Merz
Canciller Alemán
Un diplomático europeo utilizó un tono pesimista para referirse al acuerdo final: «Hemos pasado de centrarnos en salvar a Ucrania a preocuparnos por salvar las apariencias». Merz intentó explicar a la salida de la reunión que según la fórmula pactada, Ucrania solo tendría que reembolsar el préstamo, si en el futuro Rusia abona las reparaciones por los daños causados por su invasión a Ucrania.
El canciller alemán añadió que la UE se reserva el derecho a utilizar los activos rusos inmovilizados para reembolsar el crédito europeo si Rusia no paga esa compensación, enfatizando que «es una señal clara» enviada desde Bruselas al presidente ruso, Vladímir Putin.
Las palabras del primer ministro polaco, Donald Tusk, quien había advertido de que «es una elección muy simple: o dinero hoy o sangre mañana», flotaron sobre la reunión. Una que duró casi 16 horas en la que los líderes estuvieron buscando una solución a sus discrepancias sin provocar una ruptura total con los tres gobiernos (Budapest, Praga y Bratislava) que mantienen una posición más próxima a Moscú. Tusk es uno de los líderes europeos que más ha presionado para que se usen los fondos rusos.
Los observadores esperan conocer ahora las reacciones de Rusia y, sobre todo, de Estados Unidos, que por un lado está interesado en obtener una parte de esos fondos rusos congelados y por la otra considera que la UE no es capaz de defenderse a sí misma, ni en términos diplomáticos.
También, la decisión tomada este jueves de aplazar hasta el mes de enero la firma del acuerdo comercial con Mercosur representa otra oportunidad perdida para enviar un mensaje de firmeza a Washington.

