De acuerdo con las cifras registradas por el DANE, en 2017 los almacenes de cadena e hipermercados tuvieron ventas por 52,4 billones de pesos, lo que representó un aumento del 4,2% con respecto a 2016.

Adicionalmente, estos establecimientos emplearon en promedio 180.259 personas durante el 2017 aumentando la empleabilidad en un 2,8%, dato que bajó si se tiene en cuenta que hace dos años ese porcentaje había sido de 4,2%.

Los grandes ganadores en este aumento de ventas fueron los almacenes de formato de bajo costo o ‘Hard Discount’ que lograron ingresos por 5,8 billones de pesos, un aumento del 82% frente al 2016. Por su parte, los formatos tradicionales, como los del Grupo Éxito, tuvieron una reducción del 3,4%.

Y es que, cada vez son más los colombianos que le creen al formato de bajo costo. De acuerdo con una encuesta realizada por Nielsen, el 49% de los compradores colombianos decidieron cambiar sus hábitos de compra a marcas más económicas y el 80% de los encuestados aseguró que busca economía en las cadenas de bajo costo.

Aprovechando el momento y la cercanía a los compradores, los formatos de bajo costo han anunciado inversiones más agresivas para 2018, y para el final del año esperan contar con unas 2.000 tiendas, un aumento de 470 con respecto a 2017.

De acuerdo con Nuno Aguiar, CEO de Jerónimo Martins en Colombia, operadores de las tiendas ARA, “estos cambios en el consumo han impulsado la participación de los discounters en el gasto del hogar, llegando este canal a una participación del 13%. La cantidad de hogares que compran en este tipo de tiendas de descuento en Colombia llega al 66% con visitas en promedio cada 12 días”.

Sin embargo, las marcas tradicionales no quieren quedarse atrás y para ello han trabajado en la diversificación de sus formatos. Es así como el Grupo Éxito le ha dado vida a sus centrales Surtimayoristas, en las que le ofrece la alternativa a los usuarios de hacer compras al por mayor con bajos precios.

“El ejercicio de construir una central de abastos de la esquina para estar cerca de los consumidores implica construir un portafolio de productos básicos que suplan las necesidades de la clientela y para ello vinculamos comercialmente a proveedores tanto de las marcas líderes que atienden cada una de esas categorías como industriales retadores para ofrecer productos de las mismas características, pero con precios diferentes”, afirma José Rafael Fernández, gerente de Surtimayorista.

En un mercado lleno de alternativas, los almacenes de cadena e hipermercados esperan mejores comportamientos para finales de 2018. De acuerdo con predicciones realizadas por Fenalco, los formatos de bajo costo podrían estar creciendo cerca del 4%.

NEGATIVO: Los almacenes tradicionales se han visto afectados con las cadenas de low cost y han disminuido sus ventas.

POSITIVO: La diversificación de los almacenes de cadena le ha permitido a los colombianos más alternativas para hacer sus compras.