SINNETIC lanzó recientemente el informe Colombia PESTEL 2022, analizando cómo los factores políticos, económicos, sociales, tecnológicos, ecológicos y legales son percibidos por el consumidor afectando su dinámica de relacionamiento con marcas y servicios.
Gabriel Contreras, CEO de SINNETIC, señala que “es de esperar que las personas adapten sus prácticas de consumo y ahorro, a partir de los retos económicos que afronta el país: inflación, devaluación del peso vs. el dólar y escasez de diferentes productos, así como materias primas y esto fue lo que reflejamos en el estudio”.
Incremento de precios
Durante el primer semestre de 2022 la principal preocupación para el 73% consultados es el incremento de precios de bienes de consumo y alimentos impactando, esta preocupación es 5% más alta que el año anterior para la misma fecha. En el mismo sentido, al 69% le preocupan los precios de servicios públicos.
Adaptación del comportamiento de compra
El 73% de los consultados reporta haber implementado algún tipo de cambio o ajuste reciente en su plan de gastos para adaptarse a esta dinámica de precios altos y costo de vida.
- Las promociones, el año anterior pesaron 66% siendo la estrategia de primera mano para adaptarse a precios altos, este año pesa el 47% indicando que este instrumento parece venir perdiendo potencia para mantener cautivas las audiencias de compradores para diferentes productos y servicios.
- Cambio a marcas más económicas y cambio de canales de compra migrando a aquellos con mejores precios también parecen ser estrategias poco implementadas hasta ahora.
Por su parte, crecen de forma significativa vs. años anteriores, algunas estrategias de ahorro tales como:
- Restricción en la contratación de servicios domésticos: empleadas del servicio, empleadas ‘por horas’ etc.
- Restricción en la contratación de servicios de cuidado personal: manicura, pedicura, masajes.
- Menos compra de ‘corrientazo’ o almuerzo corriente en calle.
- Restricción en la contratación de servicios de cuidado a otras personas, sean niños o adultos.
Estas herramientas de balanceo de presupuesto no solo son las más implementadas este año, sino que afectan potencialmente a mujeres ya que son, en mayor medida, quienes prestan estos servicios.