El sector arrocero ha tenido dos fuertes amenazas: el tratado de libre comercio con Estados Unidos y el cambio climático. Estos factores han permitido enfocar esfuerzos en tres objetivos: competitividad, al obligar a los productores a mejorar su eficiencia y a la industria a elevar sus estándares en plantas de procesamiento; abastecimiento, proyectando el sector para sustituir las importaciones, y, por último, exportaciones, que se planean a mediano plazo teniendo en cuenta el gran potencial agrícola de Colombia y la capacidad para ser una de las despensas alimentarias del mundo. En 2016, el país fue el mayor productor de arroz de la Comunidad  Andina  y el segundo de Latinoamérica, con una cifra histórica de 570.802 hectáreas sembradas, aproximadamente. Y dadas las cifras que el gremio de los arroceros presenta, como que actualmente 21 millones de hectáreas en Colombia son aptas para el agro, y están en uso solo 7 millones, se abre la expectativa respecto a las posibilidades de crecimiento del sector, aumento en la producción y la siembra, y una probabilidad alta de alcanzar la meta de llegar a ser exportadores a mediano plazo, como ellos mismos lo plantean.

“Lo que se espera para el sector arrocero en el 2017 es una siembra bastante elevada, muy parecido al año anterior. Estamos pronosticando que las siembras serán muy altas”, asegura Roberto Botero, representante del movimiento nacional por la dignidad arrocera ante el consejo nacional del arroz.

Sin embargo, existen otras preocupaciones para las que se espera que en este año se brinden políticas que protejan a los productores nacionales, como el precio del arroz importado que cada vez es menor para ganar mercado y está afectando seriamente al sector, y el proyecto de Ley de Tierras en el que se debe evaluar, según los representantes del gremio, los proyectos productivos que acompañarán esta reforma.

NEGATIVO: Los americanos son capaces de vender a pérdida con tal de hacerse al mercado, por lo que debe existir una política clara del gobierno de protección a la producción nacional.
POSITIVO: Estrategias como la del programa de Adopción Masiva de Tecnología (AMTEC) ha logrado reducir en 50% la cantidad de semilla utilizada, el consumo de agua, la aplicación de fertilizantes y agroquímicos y la emisión de gases efecto invernadero.
CIFRA: Actualmente, el sector cuenta con 16.378 productores en 210 municipios del país.