Publicado: mayo 4, 2020, 4:17 pm
Una de las propuestas que se hizo en los últimos días pide que se plantee la posibilidad de una ley seca en el país en el próximo mes mientras se reactivan los sectores económicos para evitar aglomeraciones de trabajadores.
Sin embargo, un estudio de Anif determinó que las consecuencias podrían ser catastróficas para el comercio de licores y cervezas que podrían llegar a tener pérdidas entre los 0.7 y 1.4 billones de pesos en solo un mes de suspensión de las ventas y con solo un 10% de los establecimientos comerciales operando actualmente.
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Por otra parte, el estudio aseguró que de existir la prohibición se dejarían de recaudar entre $216.000 millones y $431.000 millones de impuestos para los departamentos del país, indispensables en estos momentos para la atención de la contingencia y que servirían para adquirir aproximadamente 1.2 millones de pruebas avanzadas de diagnóstico o 6.000 ventiladores para la atención de pacientes graves.
En el mismo estudio, ANIF mostró que según la Gran Encuesta Integrada de Hogares, la industria y comercialización de licores genera alrededor de 120.000 empleos con remuneración, de los cuales 85.000 son asalariados y 35.000 son trabajadores por cuenta propia. Estos últimos serían los más afectados ante una medida de Ley Seca, que acabaría con cerca de 33.000 mil empleos, lo que se traduce en una pérdida mensual de ingreso para los hogares de cerca de $30.000 millones.
Otro efecto negativo que traería este tipo de propuestas es el incremento del mercado ilegal de licores -bebidas de contrabando o adulteradas-, que representa entre 12% y 29% del total del mercado en el país, y que, bajo un escenario de implementación de la Ley Seca, llegaría al menos al 40%.
Por ello la propuesta que hace Anif y el sector es a que el país implemente políticas de consumo responsable y que los pocos establecimientos comerciales que siguen abiertos tengan en cuenta estas medidas para evitar el fuerte impacto que tendría la cancelación total de ventas.
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