Publicado: septiembre 25, 2021, 12:14 pm
Por Gonzalo Gómez Betancourt**
Es muy importante para los emprendimientos innovadores con crecimiento potencial y disrupción del mercado, ser proactivos en su gobierno corporativo, asegurar una junta directiva ha sido clave antes de iniciar los periodos de crecimiento y quiebre de la curva de inflexión de la escalabilidad del negocio.
Muchas personas me han pedido que escriba sobre el gobierno corporativo que deben tener los emprendimientos, especialmente los innovadores, debido a que este tema no es para muchos de estos fundadores un tema urgente; de hecho, se tiene la percepción, tal vez errada, de que al tener una junta directiva formal las empresas pierden agilidad en la toma de decisiones.
El crecimiento de estos emprendimientos innovadores puede ocurrir muy rápidamente, y el control, procesos y procedimientos pueden ser necesarios en las primeras etapas de la firma; más aún si tenemos en cuenta que no todos los fundadores tienen la experiencia, el conocimiento y las habilidades para enfrentar el escalamiento de sus negocios. El crecimiento necesita siempre de capital adicional y la necesidad de atraer inversionistas que son más exigentes en cuanto al gobierno corporativo. Las prácticas de gobierno deben estar en línea con las expectativas de estos inversionistas a través del ciclo de vida de la compañía, y alinear estos aspectos suele ser un reto mayor para estas compañías que deben tener un modelo de negocio que se desarrolle rápido y adecuadamente. Es muy importante identificar que prácticas se deben incorporar en el momento adecuado sin crear juntas directivas que sean o muy débiles, o que ejerzan un control asfixiante para el momento en que está la empresa.
El emprendimiento innovador, se ha caracterizado por tener tres fases fundamentales en su gobierno corporativo:
- La fase semilla: En este momento la empresa es muy pequeña con ingresos de ventas incipientes, poco personal, capital proveniente del fundador o de la familia, puede estar entre 0 y 3 años de creación del negocio, la primera necesidad del fundador es entender las bases y empezar a hacer las pruebas de las hipótesis de su modelo de negocio para adaptarse rápidamente. Aquí lo que usualmente les ha funcionado a los emprendedores es tener un comité gerencial interno entre 3 a 5 personas, a los que muchos le han llamado una pre-Junta. En ese momento se van aprendiendo temas esenciales del gobierno corporativo, por ejemplo, qué temas se deben llevar al comité, cada cuánto se reúnen, si se necesita consejo de algún asesor externo, la asignación de recursos y responsabilidades, etc.
- La fase temprana: En ese momento la empresa tiene unos ingresos modestos pero crecientes, tienen unos cuantos empleados adicionales, el negocio lleva entre 3 y 8 años de constituido, se hizo una primera ronda para inversionistas con amigos y familiares, que le apuestan principalmente al emprendedor y su equipo, con cierto escepticismo del modelo de negocio pero basados en los resultados de la fase semilla. Aquí, la responsabilidad del fundador aumenta y empieza a generarse lo que se denomina un Consejo Asesor que suele estar conformado por 3 a 5 personas, con el fundador a la cabeza, el inversionista principal y algún amigo empresario de mucho respeto para todos los demás. Adicionalmente, en esta fase se aprenden otros aspectos fundamentales del gobierno, como la información relevante para hacer seguimiento, la coordinación del Consejo con la Administración sobre la separación de temas operativos versus temas estratégicos, obviamente aún es el fundador que lleva los temas de consulta, para que lo ayuden a pensar en cómo escalar su empresa, se inicia con alguna especie de comité de auditoría para responder bien a los inversionistas.
- La fase del Crecimiento: La empresa ha superado con creces su punto de equilibrio, el número de empleados también se ha triplicado, lleva ya más de ocho años en el mercado, se inició una segunda ronda de inversionistas más sofisticados con experiencia en este tipo de negocios, que hace que los fundadores se diluyan, y se establece una Junta Directiva formal con más relevancia en temas estratégicos, que incluyen el crecimiento y nuevas necesidades de inversión, se consideran potenciales alianzas, los temas de remuneración, la retención de personal clave y crítico, la planeación financiera, y la manera de fondear las operaciones. Aquí es cuando el gobierno corporativo representado en una Junta formal toma más relevancia a partir de las habilidades y competencias de sus integrantes, y la formalización de temas de seguimiento y control se hacen importantes, mediante la constitución del Comité de Auditoría y el Comité de Compensaciones, además de Asambleas de Accionistas periódicas, que establecen algún comité como el de nominación y supervisión.
Existen nueve principios de gobierno corporativo claves para todas estas fases iniciales: 1) Las compañías innovadoras requieren de unos miembros de Consejo o de Junta comprometidos con el trabajo; 2) Los miembros de Junta deben entender que el gobierno corporativo en las primeras fases, es diferente al de las compañías ya maduras; 3) Las expectativas que existen entre los fundadores, inversionistas y miembros de Consejo o Junta Directiva deben ser claras desde el principio, para evitar dificultades; 4) Tener comités de Consejo o de Junta muy temprano no es muy recomendable, pero pensar en los más relevantes a futuro si lo es, al igual que en su funcionamiento; 5) Un tema clave es tener las personas con la experiencia relevante para la escalabilidad del negocio y el relacionamiento con inversionistas; 6) Los miembros del Consejo o de la Junta deben ser apasionados con la generación de valor, por supuesto basados en unos principios y valores que vienen de los fundadores de la empresa; 7) El rol del Consejo o la Junta además de pensar en lo estratégico, deben empujar la obtención de resultados; 8) El Consejo o Junta, debe tener un plan maestro concreto sobre la evolución del modelo de negocio y las estructuras de responsabilidades a implementar; 9) Se debe ir incluyendo personas independientes en los órgano de gobierno en la medida que van pasando por cada fase, para evitar que sean Juntas de Socios, que aunque pudieran estar alineados en sacar el negocios adelante se pueden presentar conflictos de intereses, que deben ser resueltos por los demás.
Como conclusión general, los emprendedores innovadores, desde el punto de vista de gobierno corporativo, solo deben hacer lo correcto desde el comienzo, en vez de esperar. Algunas veces los emprendedores, tienden a pensar que tener el gobierno corporativo adecuado es muy costoso, y que toma mucho tiempo, pero creo que vale la pena dejar muchos de estos mitos porque ha sido un hecho que se genera un valor invaluable en la consecución del plan acción.
**Ph.D.- CEO Legacy and Management Consulting Group.
