Publicado: diciembre 19, 2017, 2:32 pm
Las organizaciones en el mundo están avanzando hacia un concepto integral de movilidad que trasciende el uso de dispositivos y su conexión. En el escenario actual la creación de estrategias de movilidad, integradas y cohesivas, está impulsando el desarrollo del trabajo virtual.
La tecnología es un asunto de primer nivel de importancia para las organizaciones y en ese marco la estrategia móvil se encuentra en un punto de inflexión. Según el estudio “Construyendo el lugar de trabajo virtual. Qué viene después en la revolución móvil”, desarrollado este año por Oxford Economics para Citrix, si bien la mayoría de las empresas han invertido en dispositivos móviles, aún no han cambiado significativamente sus estrategias en torno al uso de los mismos.
Y es que el uso de los dispositivos móviles para soportar las nuevas formas de trabajar requiere más que la conectividad. Este análisis nos plantea que el trabajo virtual comienza con la movilidad, pero no termina allí. Si bien casi un tercio (29 %) de las empresas encuestadas no ha realizado ningún cambio significativo en relación con los dispositivos móviles, y el 39 % está utilizando los dispositivos móviles para aumentar la productividad de sus procesos existentes, todas ellas tienen previsto implementar estrategias de transformación en torno a dispositivos móviles durante los próximos tres años.
Las organizaciones han llegado a esta conclusión, porque su competitividad no está dada tan solo por la adopción de las últimas tecnologías, si no por el desarrollo de las políticas de trabajo que les permiten sacar el mejor provecho de esas tecnologías. De una forma simple podemos decir, que de nada sirve otorgar a un colaborador el último dispositivo móvil, si la organización no está en capacidad de entregarle la información y las aplicaciones de negocio que requiere para ser productivo.
Los empleados necesitan entornos de trabajo virtuales que les permitan maximizar la productividad, las organizaciones deben extender el alcance de TI más allá de los límites tradicionales y garantizar, tanto la seguridad de los datos como la propiedad intelectual.
Las empresas encuestadas manifestaron que durante los próximos tres años esperan aumentar su enfoque en estrategias específicas para respaldar el trabajo virtual, entre los países que participaron por parte de América Latina, la tendencia de inversión para el desarrollo del trabajo virtual es mayor que en los de otros continentes. Esto sucede porque las empresas están poniendo el foco en la inversión de nuevas tecnologías que les permitan responder a las demandas de un mercado cada vez más hiperconectado.
Las soluciones de nube y virtualización son la clave para sacar provecho de ese entorno a nivel de negocio, son las tecnologías que permiten a las personas ser productivas, pues les otorgan la posibilidad de darle un uso verdadero a sus dispositivos móviles, a través de un acceso seguro a la información que requieren para desarrollar su trabajo.
Los ejecutivos encuestados son conscientes de la conexión que existe entre el rendimiento de su negocio y la seguridad informática, sin embargo, algunos (más de dos tercios) afirmaron no contar con las estrategias necesarias para capitalizar esa oportunidad. Es evidente que para una gran mayoría este punto no está del todo resuelto y por lo tanto su exposición al riesgo es permanente.
Podemos concluir que la seguridad del espacio de trabajo virtual está más avanzada de lo que la mayoría de las empresas y los usuarios perciben. Si se implementan correctamente, los espacios de trabajo virtual no aumentan el riesgo de afectar la seguridad de una organización. No obstante, la mayoría de las empresas no cuenta con las prácticas de seguridad necesarias para aprovechar al máximo la movilidad y mitigar los riesgos.
Sin dudas, las nuevas modalidades de trabajo que propone la virtualidad y las tecnologías móviles vienen mostrando un impacto creciente que se va haciendo más evidente en el futuro cercano. Las empresas deben considerar plantearse como una prioridad la necesidad de invertir en tecnologías de próxima generación e incluirlas en sus futuros planes estratégicos, si buscan lograr mayores niveles de competitividad y sacar un verdadero provecho de lo que en realidad significa la movilidad empresarial.
Por: Juan Pablo Villegas, Gerente General Citrix Colombia
