Vivimos bajo un modelo de constante competitividad en el mercado laboral, esto se refleja en las altas tasas de desempleo de los países y la gran cantidad de profesionales calificados que no ha logrado posicionarse. Según un estudio de Glassdoor, cada oferta laboral para un cargo ejecutivo tendrá como respuesta un mínimo de 250 candidatos, pero tan solo 4 a 6 personas serán llamadas a la entrevista y únicamente una de ellas obtendrá el empleo.
“Cuando un candidato llega a la entrevista en un proceso de selección, esto significa que ha logrado atravesar los primeros filtros, en los cuales se tienen en cuenta factores como la experiencia y el nivel de educación. Después de esto, el candidato entra en un campo en donde su personalidad y la capacidad de comunicación y seguridad harán la diferencia a la hora de obtener el empleo o no”, dice Luis Hurtado, Section Manager de Hays.
La entrevista es el momento decisivo para conseguir un empleo. La multinacional experta en reclutamiento especializado identificó los seis principales errores que se cometen en una entrevista. Estos son sus hallazgos:
- No estar bien preparado: En las entrevistas de trabajo no solo se deben demostrar las cualidades personales y laborales, también se debe tener un conocimiento profundo sobre la empresa a la que se está presentado. Saber su modelo de operación, leer sobre la industria y sus competidores y conocer cuáles serán las responsabilidades dentro del cargo al que se está postulando se convierte en una ventaja competitiva para el candidato.
- Las primeras impresiones realmente cuentan: Los candidatos sólo tienen una oportunidad para mostrar lo mejor de sí. Por lo tanto, cada cosa por más pequeña que parezca va a contar. Es importante fijarse en detalles como estar vestido de una manera formal, sobria y corporativa.
- No excederse al contar los aspectos personales: Es importante tener en cuenta que las entrevistas de trabajo son espacios que deben girar en torno a lo profesional, a las experiencias, los logros, las ambiciones y proyectos laborales. Los candidatos muchas veces pierden el enfoque de la entrevista y dedican mucho tiempo a la parte personal.
- Hablar en primera persona: Aunque se debe hablar sobre los logros personales que se han alcanzado en la vida profesional, hay que tener cuidado de no hablar constantemente en términos de ‘Yo he logrado’, ‘Yo he alcanzado’, es preferible hablar de los logros en equipo, ‘Con mi equipo hemos logrado’. Esto es especialmente importante para los profesionales que han tenido experiencia manejando un equipo de trabajo.
- Logros intangibles: En el momento de la entrevista es indispensable evidenciar los logros de forma tangible, preferiblemente numérica. Si se está aplicando a una posición de alta gerencia, el candidato debe, preferiblemente, hablar en términos de logros aterrizados a los alcances en porcentajes y resultados cuantitativos.
- No resaltar sus habilidades blandas: En la actualidad los empleadores están buscando una serie de cualidades específicas en sus empleados, algunas de estas son: la interlocución con alta gerencia, el buen trabajo en equipo y el nivel de inglés. Por lo tanto, es importante resaltar este tipo de habilidades y ser sincero en cuanto a las capacidades.