Trump promete «represalias importantes» por la muerte de tres estadounidenses en un ataque de Daesh en Siria

Dos soldados y un traductor estadounidenses han muerto este sábado en un ataque en Siria de Daesh contra una patrulla conjunta del ejército de EE.UU. y de fuerzas de seguridad del Gobierno sirio. Otros tres soldados estadounidenses y dos agentes sirios han resultado heridos … en el ataque, ocurrido en la histórica ciudad de Palmira.
El Pentágono ha confirmado el ataque en un mensaje en redes sociales de su portavoz, Sean Parnell, que ha detallado que la misión en la que estaban involucrados los estadounidenses era de «antiterrorismo en la región».
El ejército de EE.UU. ha explicado que el ataque fue realizado por un «atacante en solitario», que perpetró una «emboscada» contra esa patrulla. Y el secretario de Defensa, Pete Hegseth, ha añadido después que el responsable murió después en la respuesta de «fuerzas asociadas», en referencia a efectivos de las fuerzas del Gobierno de Siria.

Las víctimas fueron evacuadas por helicóptero y trasladadas a la base militar estadounidense de Al Tanf, unos 125 kilómetros al sur de Palmira.
EE.UU. mantiene una presencia militar en Siria desde 2015, cuando se involucró con los grupos militares kurdos del norte del país para tratar de expulsar del control de esas regiones a Daesh, que había ocupado parte de Siria y de Irak.
Después de derrocar a Daesh de cualquier apariencia de control del poder, EE.UU. ha mantenido parte de su despliegue para controlar a los grupúsculos activos que quedan de los terroristas islámicos.
El ataque ocurre en un momento en el que el Gobierno de Donald Trump ha establecido lazos de cercanía con la Siria de Ahmed al Sharaa, el insurgente islámico que logró echar del poder al dictador Bashar al Asad hace un año y que es el presidente interino del país.
Trump llegó incluso a invitar a Al Sharaa, que fue un líder de Al-Qaeda en la región, a la Casa Blanca y busca que su Gobierno sea un pilar de estabilidad y de lucha contra el terrorismo en la región.
El ataque en Palmira -una ciudad en la lista del patrimonio mundial de la UNESCO por sus famosas ruinas romanas- es el primero en el que fallecen estadounidenses desde la llegada al poder de Al Sharaa y evidencia que esa estabilidad está lejos de conseguirse en Siria.
Donald Trump ha detallado en un mensaje en su red social que los tres soldados heridos evolucionan bien, ha asegurado que fue un ataque «contra Siria y EE.UU.» y ha dejado claro que Al Sharaa «está extremadamente enfadado y conmocionado por el ataque».
«Habrá una represalia importante», ha anunciado Trump, en referencia a posibles operaciones militares de respuesta contra Daesh en la región.