Publicado: noviembre 10, 2025, 1:45 pm
La fuente de la noticia es https://www.abc.es/internacional/trump-indulta-forma-preventiva-giuliani-personas-vinculadas-20251110190918-nt.html
Donald Trump ha dado el perdón presidencial de forma preventiva a 77 personas vinculadas con la campaña para dar la vuelta a los resultados electorales de la elección de 2020, la que el multimillonario neoyorquino perdió frente a Joe Biden. Entre los … indultados está Rudy Giuliani, el exalcalde de Nueva York convertido en aliado férreo de Trump, que lideró aquellos esfuerzos; el que fuera el jefe de Gabinete de Trump en la recta final de su primer mandato, Mark Meadows, y decenas de personajes –algunos estrambóticos–, que ganaron protagonismo en aquellas semanas por defender con vehemencia que le habían robado la reelección al entonces presidente, como los abogados Sidney Powell y John Eastman.
Es un gesto eminentemente simbólico por parte de Trump: ninguno de los incluidos en la lista de perdonados se enfrenta a cargos en la jurisdicción federal, que es donde el indulto del presidente tiene efecto. Pero incide en la política de recompensa y represalia que Trump ha aplicado desde su regreso a la Casa Blanca: nada más jurar su cargo el pasado enero, firmó el perdón de las cerca de 1.500 personas que fueron procesadas o condenadas por el asalto trágico y bochornoso del 6 de enero, perpetrado por una turba de sus seguidores; y ha puesto a trabajar a la fiscalía para castigar a rivales políticos, como el director del FBI, James Comey; o la fiscal general de Nueva York, Letitia James.
Giuliani fue la principal figura de esos esfuerzos por cambiar el resultado de las urnas. Nada más determinarse la derrota, Trump clamó haber sufrido un «fraude masivo» –del que ni los tribunales ni las propias autoridades de su Departamento de Justicia encontraron evidencias– al que se sumaron figuras, como el exalcalde de Nueva York, en busca de relevancia o del favor del multimillonario neoyorquino.
La implicación de Giuliani en aquella campaña le valió la inhabilitación para la práctica de la abogacía en su estado –Nueva York– en 2024 porque, según el juez, «atacó sin fundamento al sistema electoral del país y deterioró su integridad».
En busca de más de 11.000 votos en Georgia
Giuliani también fue declarado culpable por difamar a dos trabajadoras electorales de Georgia, uno de los estados más disputados en aquella elección, donde Trump exigía a las autoridades republicanas locales que «encontraran» los poco más de 11.000 votos que necesitaba para ganar en ese estado. Giuliani se declaró en bancarrota para no pagar la indemnización a las víctimas, que recibieron amenazas de muerte por parte de seguidores de Trump.
Giuliani está pendiente de cargos en la jurisdicción estatal de Arizona, otro de esos estados decisivos, en los que también están acusadas otras figuras de esa campaña, como Eastman y Meadows. Se les acusa de interferencia electoral por presiones a las autoridades locales para que dieran a Trump como ganador.
«Estos grandes estadounidenses fueron perseguidos por la Administración Biden y sufrieron un infierno por contestar una elección, que es el pilar de la democracia», reaccionó en un comunicado la portavoz de Trump, Karoline Leavitt, «El presidente Trump está poniendo fin a las tácticas comunistas del Régimen Biden para siempre».
