Publicado: diciembre 11, 2025, 5:45 pm
La fuente de la noticia es https://www.abc.es/internacional/qatar-turquia-fuerzan-retraso-entrada-vigor-plan-20251211130818-nt.html
No habrá regalo de Navidad para Trump en Gaza, como tampoco parece que será el caso para los otros dos frentes donde busca la paz: Venezuela y Ucrania. De todos ellos, el que parecía más cercano parecía hasta hoy el de Oriente Próximo, tras el … acuerdo de alto el fuego logrado el pasado mes de octubre. La primera fase está ya virtualmente resuelta con el regreso a Israel de todos los restos de rehenes judíos (a falta de uno).
La fase que debería ponerse en marcha antes de finales de año es una de las cruciales: instalación de un gobierno tecnocrático (un Gabinete de Paz), acompañado por una fuerza multinacional con mandato de la ONU. Una vez que esos militares y policías, a las órdenes del gabinete interino, se hagan con el control de la Franja, el Ejército israelí deberá retirarse del todo a las fronteras anteriores a octubre de 2023.
Donald Trump acaba de decir que la ‘segunda fase’ tendrá que esperar a comienzos de año, es decir, enero de 2026 como muy pronto. Hay debate en torno a quién encabezará el equipo político/tecnócrata. Está claro que el jefe será el propio Trump, quien delegará en dos o tres personas de su confianza.
Hasta ahora parecía claro que el primer responsable sería el ex primer ministro británico Tony Blair, admirado por todos por su labor mediadora desde que dejó el poder en 2007. Curiosamente ese año también anunció su conversión al catolicismo, y esa circunstancia agrada muy poco a los países árabes, que piden a Trump que elija a otra persona. En el equipo de Gaza estarían también el yerno de Trump, Jared Kushnner, y su enviado especial a la región, Steve Witkoff.
Más compleja es aún la dimensión militar de la ‘segunda fase’ para Gaza. La llamada Fuerza Internacional de Estabilización debe tener como cometido la seguridad de la población de la Franja, y eso pasa ineludiblemente por el desarme de Hamás, el movimiento radical palestino que aún mantiene milicianos y arsenal en el dédalo de túneles subterráneos de Gaza.
¿Quién pondrá el cascabel al gato? Ninguno de los países suministradores de tropas –deben ser musulmanes según lo estipulado– a los que la Administración Trump se dirige parece dispuesto a enfrentarse a Hamás en su terreno, para forzarles a entregar las armas. Azerbaiyán ha dicho que no, Turquía podría estar dispuesto a hacerlo pero Israel le veta por su afinidad con Hamás, Egipto se mantiene a la espera.
Por su parte Qatar, el riquísimo y pequeño emirato que quiere jugar un papel protagonista en el conflicto, se ha puesto del lado de Hamás en la disputa por la futura fuerza multinacional. En un encuentro celebrado en Doha el fin de semana pasado, el primer ministro catarí, Mohamed al Thani, dijo que la tregua es «de cartón piedra» porque el ejército israelí todavía ocupa parte del enclave. Además señaló que no puede forzarse a Hamás a entregar las armas hasta que no empiece a discutirse ni más ni menos que la negociación de un futuro Estado palestino.
Como fuego de cobertura, la influyente cadena árabe catarí Al Yasira ha entrevistado al que se muestra como líder de Hamás, Jaled Mashaal, quien una vez más subrayó que no habrá rendición ni entrega de armas en Gaza «hasta que no se instale un Gobierno palestino legítimo».
