¿50 grados en Córdoba? El motivo por el que los termómetros callejeros marcan temperaturas tan altas
Suele ser la fotografía del verano en Córdoba: los termómetros a 50 grados. O más. Nada acapara más la atención en los meses estivales que el …
Suele ser la fotografía del verano en Córdoba: los termómetros a 50 grados. O más. Nada acapara más la atención en los meses estivales que el …
La fuente de la noticia es https://www.abc.es/internacional/pedro-rodriguez-abuso-poder-politico-dejado-tener-consecuencias-20250611164741-nt.html de lejos No hay que engañarse. En el núcleo de esta conspiración contra América está el cuestionamiento …
12/06/2025
Actualizado a las 07:32h.
El Parlamento israelí ha rechazado este jueves en primera lectura la solicitud de la oposición para presentar una moción de censura contra el Gobierno de Israel, gracias a un acuerdo entre fuerzas ultraortodoxas y la formación del primer ministro del país, Benjamin Netanyahu, el Likud, sobre el reclutamiento de haredíes para engrosar las filas del Ejército.
La iniciativa para disolver el Parlamento de Israel (Knesset) ha sido tumbado con 61 votos negativos frente a 53, después de que la mayoría de diputados ultraortodoxos decidieran no apoyarla.
El fracaso de la propuesta llega después de que el Ejecutivo israelí haya alcanzado un acuerdo con formaciones ultraortodoxas, en su mayoría opuestas a la incorporación de sus comunidades al servicio militar israelí.
Nuevo proyecto de ley sobre el reclutamiento
Así lo ha anunciado el diputado del Likud y presidente de la comisión de exteriores del Parlamento israelí, Yuli Edelstein, en su cuenta de la red social, donde ha señalado que, tras «largos debates, hemos llegado a un acuerdo sobre los principios en los que se basará el proyecto de ley sobre el reclutamiento», si bien no ha aportado detalles al respecto.
El Govern podría aprobar a finales de este mes de junio o a principios de julio un plan de choque para atender a adolescentes …
De los 251 que capturó en su ataque relámpago contra Israel en octubre de 2023, el grupo radical palestino Hamás mantiene aún 24 rehenes con vida, según informa la Prensa hebrea citando fuentes de la Inteligencia. ‘The Times of Israel’ estima que los islamistas de … Gaza conservan además a otros 36 rehenes ya muertos. Sus restos son reclamados por Tel Aviv para que sus familias puedan darles un entierro digno.
El acuerdo de tregua virtualmente en vigor establece que en una segunda fase los radicales palestinos deberían liberar a los vivos y entregar a los muertos, pero todo se ha complicado por la disputa sobre saber qué es antes, el huevo o la gallina. Hamás exige que Israel retire primero sus tropas de la Franja. Israel demanda que Hamás libere primero a los rehenes. Desde hace semanas ninguna de las dos partes cede.
Aparentemente, el primer ministro Netanyahu quiere aprovechar este ‘impasse’ para terminar con los núcleos de resistencia de Hamás, y encontrar a los rehenes -vivos o muertos-, pero la tarea no es tan fácil. Quedan aún centenares de kilómetros de túneles por examinar, y los militantes palestinos son fanáticos: prefieren morir con las armas antes que rendirse.
Los 24 rehenes que, supuestamente, siguen con vida son todos varones: 22 son israelíes, hay un nepalés y un tailandés. El grupo comprende varios soldados del ejército, además de guardias de seguridad del festival de música que fue asaltado por los milicianos islamistas. Algunos son jóvenes que participaban en aquella fiesta, y otros son varones que trataron de resistir el ataque en algunos establecimientos familiares.
Hamás tiene otros 35 rehenes que Israel ha confirmado que están muertos. En la tercera fase del acuerdo de tregua que se negocia deberían ser entregados a las autoridades hebreas para llevar a cabo sus funerales. En la primera fase de lo pactado Hamás entregó 33 rehenes: mujeres, niños y hombres; ocho de ellos fueron entregados ya cadáveres.
El tiempo puede jugar en favor del Ejército israelí, que continúa sus operaciones a sangre y fuego en la Franja para acabar con Hamás y encontrar a los rehenes. Pero también desgasta a la coalición israelí de conservadores y partidos religiosos. El clamor popular, no solo el promovido por los familiares de los rehenes, exige que cese la guerra de Gaza en primer lugar para recuperar a los secuestrados, sin parar mientes en qué ocurrirá en ese pequeño territorio una vez que se retiren las tropas.
Para echar más leña al fuego, la Prensa israelí destaca unas polémicas declaraciones del embajador de Trump en Israel, Mike Huckabee, en las que el diplomático afirma que en las presentes circunstancias Washington no cree viable un Estado palestino vecino al de Israel. El representante norteamericano sugiere que sea otro Estado árabe -¿Jordania, Egipto, Siria?- el que, por razones humanitarias, ceda territorio a los palestinos para crear su entidad nacional. Una utopía -o distopía, según se mire- que daría un vuelco a la historia de la región en busca de paz desde el fin de la Segunda Guerra mundial.
Con la confirmación de su condena a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos, Cristina Fernández de Kirchner se convierte en la primera expresidenta argentina en ser sentenciada en instancia definitiva por corrupción. El resultado debe tener consecuencias más profundas: … una desmoralización del peronismo y de la izquierda en Argentina, así como el fin del kirchnerismo como principal corriente ideológica dentro del peronismo.
Este fallo representa no solo el cierre de una larga etapa judicial, sino también el posible punto final de un ciclo político que dominó el país durante más de dos décadas.
«El kirchnerismo no tiene futuro, es una etapa del peronismo. El kirchnerismo está agotado; la cuestión es si el peronismo logra renovarse», afirma el politólogo Andrés Malamud. A su juicio, es poco probable que una eventual martirización de la exmandataria, como la que potenció el regreso de Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil, pueda surtir efecto en Argentina: «Lula dejó la presidencia con 80% de imagen positiva; CFK tuvo que esconderse como vice de Alberto porque tiene 65% de imagen negativa».
La sentencia de la Corte Suprema, que transforma la causa conocida como ‘Vialidad’ en cosa juzgada, sella definitivamente una era marcada por una combinación de políticas clientelistas, uso masivo de subsidios, emisión desenfrenada de moneda -causando más inflación-, fuerte retórica nacionalista y denuncias persistentes de corrupción. Las principales acusaciones contra Cristina incluyen enriquecimiento ilícito, desvío de fondos públicos en obras viales y manipulación del aparato estatal para beneficiar a aliados políticos y empresarios próximos.
Durante sus años en el poder, Cristina Kirchner consolidó una red de apoyos basada en la distribución de recursos públicos, desde subsidios al transporte y la energía hasta programas sociales orientados a sectores vulnerables. Esta estructura clientelista le permitió conservar poder político incluso en períodos de alta conflictividad y generó una creciente dependencia del Estado en amplios sectores de la población. Al mismo tiempo, la figura de CFK polarizó intensamente a la sociedad argentina, provocando adhesiones apasionadas pero también un fuerte rechazo por parte de la clase media urbana y de sectores de la centro-derecha, de la derecha e independientes.
Un síntoma claro del desgaste de ese modelo se manifestó en el creciente repudio a los piquetes y protestas callejeras que marcaron la era kirchnerista. Lo que comenzó como un instrumento de presión legítimo fue tornándose cada vez más impopular, generando irritación incluso en sectores tradicionalmente afines al peronismo. Las manifestaciones frecuentes, los bloqueos de rutas y los cortes urbanos pasaron a ser vistos por buena parte de la ciudadanía como una forma de extorsión, más que como una herramienta democrática.
Pese a la magnitud de la decisión judicial, Cristina Kirchner ha dado señales de que no piensa ceder el control simbólico del peronismo. Desde la sede del Partido Justicialista (PJ), llamó a una movilización y advirtió que «esto termina en una gran crisis». Sin embargo, en el interior del movimiento sobrevuelan dudas profundas sobre su continuidad real como figura central.
El recuerdo del ocaso político de Carlos Menem tras sus propias condenas resuena con fuerza.
Herederos
El panorama de posibles herederos dentro del kirchnerismo no ofrece demasiadas certezas. Axel Kicillof, gobernador de Buenos Aires, no ha logrado construir una proyección nacional sólida. Sergio Massa, tras su fallido paso por el Ministerio de Economía y una inflación que alcanzó niveles históricos, quedó políticamente desmoralizado. Otros cuadros de La Cámpora, como Wado de Pedro, Mariano Recalde e incluso Máximo Kirchner, enfrentan un fuerte rechazo por parte del electorado, que los percibe como figuras ineficaces y excesivamente ideologizadas.
La conducción del PJ también está fragmentada. Los sindicatos muestran divisiones internas, mientras que los gobernadores del interior observan de lejos y esperan la aparición de un nuevo liderazgo más competitivo. Kicillof es el que más chances tiene, porque sigue en un puesto-clave [es el gobernador de la Provincia de Buenos Aires] y se posiciona como posible referente opositor al modelo de Javier Milei, impulsado por intendentes bonaerenses que buscan distanciarse del kirchnerismo. Su verdadera fuerza política se medirá en Septiembre en las elecciones en la Provincia.
Pero, todavía sin una figura de reemplazo clara y con un aparato debilitado más allá del conurbano bonaerense, el kirchnerismo se encamina a una retracción irreversible. La era de Cristina Kirchner parece haber llegado a su fin.
12/06/2025 a las 04:44h.
Los telómeros, esas estructuras protectoras de los genes situadas en los extremos de los cromosomas considerados un marcador biológico de envejecimiento, podría determinar nuestro riesgo de ictus, demencia y depresión en la vejez.
Un estudio publicado en la revista científica ‘Neurology’ ha descubierto que las personas un longitud corta de los telómeros leucocitarios, tienen más probabilidades de sufrir estas enfermedades a medida que envejecen.
Sin embargo, el hallazgo más esperanzador es que este riesgo no se aprecia en quienes llevan un estilo de vida saludable.
Este equipo del Hospital General Brigham de Massachusetts (EE.UU.) analizó la relación entre la longitud de los telómeros, que disminuye con la edad o la exposición a entornos insalubre, y el riesgo de enfermedades cerebrales relacionadas con la edad.
La fuente de la noticia es https://www.abc.es/internacional/detenido-polonia-hombre-acusado-espiar-rusia-20250611163114-nt.html Las actividadesse habrían producido entre finales de febrero de 2024 y abril de 2025. De ser hallado …
La fuente de la noticia es https://www.abc.es/internacional/estonia-condena-seis-anos-carcel-traicion-periodista-20250611163155-nt.html Svetlana Burceva trabajaba con desde 2017 con el grupo Rossiya Segodnya, afín al Gobierno ruso, y mantenía …
La imposición de sanciones personales por parte del Reino Unido y otros gobiernos occidentales contra dos ministros israelíes considerados figuras clave del ala ultranacionalista ha provocado una reacción diplomática severa por parte de Estados Unidos, que calificó la medida de contraproducente, desestabilizadora y potencialmente … perjudicial para los esfuerzos en curso dirigidos a alcanzar un acuerdo de alto el fuego en la Franja de Gaza. La controversia, que refleja una divergencia de enfoques entre aliados tradicionales, ha abierto una brecha explícita entre Washington y Londres en un momento particularmente delicado del conflicto en Oriente Próximo.
Y es que este martes, el Gobierno británico, en coordinación con Canadá, Australia, Nueva Zelanda y Noruega, anunció sanciones personales contra el ministro israelí de Finanzas, Bezalel Smotrich, y el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, por lo que describió como «retórica incendiaria y respaldo a actos de violencia por parte de colonos» en Cisjordania. Estas sanciones, según explicó el ministerio de Asuntos Exteriores británico, se inscriben dentro del régimen de sanciones Magnitsky y consisten en la congelación de activos bajo jurisdicción británica, la prohibición de entrada al país y la imposibilidad de realizar transacciones financieras o comerciales con entidades del Reino Unido.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, reaccionó con contundencia horas después de conocerse la decisión, en un comunicado en el que instó directamente al Gobierno británico a revocar las sanciones. Según sus palabras, «estas medidas no apoyan los objetivos compartidos de alcanzar un alto el fuego sostenible, garantizar la liberación de todos los rehenes y sentar las bases para una paz duradera en la región». Rubio subrayó además que sancionar a miembros del Gobierno israelí en plena guerra «corre el riesgo de socavar la unidad de propósito entre aliados democráticos frente a organizaciones terroristas como Hamás».
«Hombro con hombro con Israel»
En términos aún más explícitos, el diplomático estadounidense añadió que «es fundamental que los gobiernos amigos de Israel no adopten medidas unilaterales que debiliten su posición de defensa, especialmente cuando el país enfrenta amenazas existenciales». A través de su cuenta oficial en la red social X, Rubio publicó también que «Estados Unidos está hombro con hombro con Israel».
Fuentes del Departamento de Estado, citadas por ‘The Times’ el mismo día del anuncio, afirmaron que no fueron informadas previamente de la decisión británica, y que se trató de un movimiento «mal calibrado», que no fue coordinado a través de los canales diplomáticos habituales. Este detalle, de confirmarse, explicaría en parte la dureza del tono empleado por Washington, cuya política exterior ha oscilado en los últimos meses entre el respaldo explícito al gobierno de Benjamin Netanyahu y los intentos de contener la expansión del conflicto a través de mediaciones indirectas con actores regionales como Egipto, Qatar y Jordania.
La respuesta israelí, por su parte, no se hizo esperar. El primer ministro Netanyahu agradeció públicamente a Estados Unidos su «firme apoyo moral», y denunció lo que calificó como «una iniciativa política profundamente injusta, que premia al terrorismo y castiga a quienes lo combaten». En el mismo sentido, el ministro de Exteriores de Israel, Israel Katz, acusó al Reino Unido de ceder ante «una campaña de presión política instigada por oenegés hostiles al Estado de Israel».
Responsabilidad de Gobierno
En Londres, el ministro de Exteriores David Lammy defendió la legalidad y necesidad de las sanciones, argumentando que Smotrich y Ben-Gvir han realizado declaraciones «sistemáticas y documentadas» incitando a la violencia contra palestinos, y que estas actitudes han agravado la ya delicada situación humanitaria y de seguridad en los territorios ocupados. En particular, Lammy afirmó que ambos ministros «han legitimado actos de violencia cometidos por colonos israelíes contra civiles palestinos», y sostuvo que la comunidad internacional tiene la responsabilidad de «reaccionar ante estas conductas cuando provienen de figuras con responsabilidad de gobierno».
La documentación que sustenta la decisión británica incluye, según recoge la prensa local, múltiples intervenciones públicas de Ben-Gvir en las que insta a utilizar la fuerza contra la población palestina, así como la defensa de operaciones punitivas colectivas en Gaza. En cuanto a Smotrich, se le atribuye haber promovido la cancelación de transferencias económicas esenciales para el funcionamiento de la Autoridad Palestina, con el argumento de que esos fondos podrían estar siendo redirigidos al apoyo de familias de combatientes de Hamás.
Desde el punto de vista jurídico, las sanciones se aplican a título individual y no institucional, y según fuentes de Exteriores, «no constituyen un juicio sobre la legitimidad del gobierno israelí en su conjunto, sino sobre la conducta de dos de sus miembros». No obstante, el simbolismo político del gesto ha sido ampliamente interpretado como una señal de endurecimiento de la postura europea frente al actual gabinete de Netanyahu, en especial a su sector más extremista, representado por los dos sancionados.