Publicado: octubre 18, 2025, 3:15 pm
La fuente de la noticia es https://www.abc.es/tecnologia/generacion-alfa-crece-ojos-youtube-charlando-chatgpt-20251016175007-nt.html
Celia cumplió 7 años la semana pasada, pero es capaz de manejar la tableta con la misma habilidad que sus padres. O puede que más. Pasa de una aplicación a otra en cuestión de segundos y desliza los dedos a toda velocidad por la pantalla … mientras intenta superar un videojuego que se juega al ritmo de la música que suena. Su madre, Ester, la observa desde la alfombra del salón en la que está sentada. Tiene 36 años, y cuando rondaba la edad de su hija lo más parecido a un iPad que había en su casa era una pesada tele de tubo. Corría 1996; en España solo había unos 350.000 usuarios anuales de internet, la primera PlayStation apenas llevaba unos meses ocupando los estantes del Alcampo y el ‘Hostal Royal Manzanares’, de Lina Morgan, reinaba las noches de los jueves con un 46,1% de share.
Ahora Ester y Celia comparten el mismo espacio, pero no la misma mirada. Lo que para la primera fue una lluvia de revoluciones tecnológicas agolpadas a lo largo de tres décadas, para la segunda es, simplemente, la normalidad.
«¿Por qué ahora tenemos teles normales y corrientes con internet y aplicaciones y vosotros no las teníais?», pregunta la niña. «Porque las tecnologías han cambiado, y lo normal para nosotros era que en las teles solo se pudiesen ver seis o siete canales», responde la madre; mientras Celia, con los ojos bien abiertos, parece intentar visualizar una realidad que, aunque parezca mentira, queda ya bastante lejana.
La niña forma parte de la generación alfa, la de los nacidos a partir de 2010, hijos de esos milenials que, en la adolescencia, vieron cómo los plúmbeos Nokia 3210 eran desterrados por los inteligentes iPhone; y cómo las redes sociales, con Tuenti y Facebook a la cabeza en España, empezaban a cambiar la forma en la que nos relacionamos. Celia, en cambio, solo conoce un mundo hiperconectado en el que parece que cualquier pregunta o solicitud puede tener respuesta de forma inmediata. Ya no hace falta escribir cartas, porque en el móvil está instalado el WhatsApp.
De la Game Boy a la Switch
«Estamos hablando sobre una generación sobre la que aún existen muchas dudas. No se ha publicado demasiada literatura y estudios al respecto y todavía son muy pequeños», explica a ABC Iñaki Ortega, director general de la agencia Llorente y Cuenca en Madrid, profesor en UNIR y autor de libros centrados en el análisis de los milenials y los zeta, que son los que nacieron entre 1996 y 2010. En el futuro espera dedicarle otro a los alfa; por lo pronto, señala que se trata de una generación que destaca, especialmente por la necesidad de la inmediatez. De la celeridad.
«Se les llama mucho la generación ‘touch’, por haber crecido con las pantallas táctiles. Tienen una relación muy directa con la tecnología: todo lo que desean lo esperan conseguir al instante, porque están acostumbrados a que internet funcione así«, apunta el experto.
Y es posible que sea así, o al menos esa es la sensación que a uno se le queda después de charlar un rato con Lucas, que es el hermano de Celia y tiene 10 años. Mientras habla, el niño sostiene en la mano su Nintendo Switch, que le encanta, pero si tiene que elegir en qué jugar a videojuegos, él lo deja claro: «Con lo que más me gusta jugar es con la tableta». Y es lógico: en la tableta puede saltar de un juego a otro o de un vídeo a una canción sin esperas. En la consola, salvo que el título esté descargado, aún hay que levantarse, coger el cartucho e insertarlo.
La adolescencia
de los millenials y los alfa
MILLENIALS
En 2002, cuando los Millennials
entraban en la adolescencia, solo
el 17 % de los hogares españoles
contaba con acceso a Internet.
Para ello, se recurría al
ordenador.
En 2025, la cifra ha crecido hasta
el 96,8 %, y el 98 % de los menores
navega habitualmente por la red.
El dispositivo favorito para
ello es el ‘smartphone’.
Los Millennials recibieron sus
primeros teléfonos móviles entre
los 12 y 17 años. Destacaban marcas
icónicas como Nokia, Motorola
o Siemens.
Ahora, la edad media para recibir
un smartphone se sitúa en torno a
los 10 años, y las marcas más populares
son iPhone y Samsung.
De Tuenti a TikTok
Durante su adolescencia, los
Millennials socializaban a través de
herramientas como el chat de Terra o
el Messenger, que llegó a alcanzar
los 13 millones de usuarios en España.
El panorama cambió en 2008 con
la consolidación de la primera gran red
social española: Tuenti, que llegó a reunir
15 millones de usuarios y marcó una
etapa clave en la historia de las redes
sociales en España.
Actualmente, uno de cada cuatro niños
de 7 a 9 años utiliza TikTok, y alrededor
del 61 % de los menores
son usuarios activos de
la red social china.
Videojuegos
La primera gran consola de masas
fue la PlayStation (1994), con
102 millones de unidades vendidas.
Su sucesora, la PS2, alcanzó los 160
millones, impulsada por su capacidad
de reproducir películas en DVD.
Los Alfa, en cambio, principalmente
juegan desde el móvil o la Nintendo
Switch (más de 153 millones de
unidades), y muestran preferencia
por los juegos online como
Roblox o Fortnite.
Los Millennials comenzaron
escuchando música de forma analógica,
con cassettes, Discman y, a partir de 2003,
en MP3, gracias al auge
del iPod o el Creative
Zen Touch.
Los Alfa, por su parte, han crecido con
el streaming: plataformas como Spotify,
nacida en 2006, cuentan hoy con cerca
de 700 millones de usuarios activos
mensuales, de los cuales más de
240 millones son suscriptores
Premium.
Durante su juventud, los Millennials
acudían al cine como una de sus
principales formas de ocio. En 2004,
España registró más de 140 millones
de entradas vendidas, con una media de
3 películas por persona y año, según
el Ministerio de Cultura.
El visionado de películas era una
experiencia social y colectiva, asociada
al fin de semana, los estrenos en
pantalla grande y la salida con
amigos o familia.
En cambio, los Alfa han crecido en plena
era del streaming. Según la CNMC (2024),
el 83 % de los menores consume
contenidos audiovisuales en plataformas
como Netflix, Disney+, Prime Video o
YouTube, y el 65 % de las familias
españolas afirma ver más películas en
casa que en el cine. En 2023, la asistencia
a salas cayó a 72 millones de
espectadores, menos de la mitad que
dos décadas antes, reflejando un cambio
cultural: el cine se ha vuelto doméstico,
inmediato y personalizado.
La adolescencia de los millenials y los alfa
MILLENIALS
En 2002, cuando los Millennials
entraban en la adolescencia, solo
el 17 % de los hogares españoles
contaba con acceso a Internet.
Para ello, se recurría
al ordenador.
En 2025, la cifra ha crecido
hasta el 96,8 %, y el 98 % de
los menores navega
habitualmente por la red.
El dispositivo favorito para
ello es el ‘smartphone’.
‘smartphones’
Ahora, la edad media para
recibir un smartphone se sitúa
en torno a los 10 años,
y las marcas más populares son
iPhone y Samsung.
Los Millennials recibieron sus
primeros teléfonos móviles entre
los 12 y los 17 años. Destacaban
marcas icónicas como Nokia,
Motorola o Siemens.
De Tuenti a TikTok
Durante su adolescencia, los
Millennials socializaban a través
de herramientas como el chat de
Terra o el Messenger, que llegó a
alcanzar los 13 millones de
usuarios en España.
El panorama cambió en 2008 con
la consolidación de la primera gran
red social española: Tuenti, que
llegó a reunir 15 millones de
usuarios y marcó una etapa clave en
la historia de las redes sociales en
España.
Actualmente, uno de cada cuatro
niños de 7 a 9 años utiliza TikTok,
y alrededor del 61 % de los menores
son usuarios activos de
la red social china.
Videojuegos
La primera gran consola de masas
fue la PlayStation (1994), con
102 millones de unidades
vendidas. Su sucesora, la PS2,
alcanzó los 160 millones,
impulsada por su capacidad de
reproducir películas en DVD.
Los Alfa, en cambio, juegan
principalmente desde el móvil
o la Nintendo Switch (más de 153
millones de unidades), y muestran
preferencia por los juegos online
como Roblox o Fortnite.
Los Millennials comenzaron
escuchando música de forma
analógica, con cassettes,
Discman y, a partir de 2003, en
MP3, gracias al auge del iPod o
el Creative Zen Touch.
Los Alfa, por su parte, han crecido
con el streaming: plataformas
como Spotify, nacida en 2006,
cuentan hoy con cerca de 700
millones de usuarios activos
mensuales, de los cuales más de
240 millones son suscriptores
Premium.
En cambio, los Alfa han crecido
en plena era del streaming. Según
la CNMC (2024), el 83 % de los
menores consume contenidos
audiovisuales en plataformas como
Netflix, Disney+, Prime Video o
YouTube, y el 65 % de las familias
españolas afirma ver más películas
en casa que en el cine. En 2023,
la asistencia a salas cayó a 72
millones de espectadores, menos
de la mitad que dos décadas antes,
reflejando un cambio cultural:
el cine se ha vuelto doméstico,
inmediato y personalizado.
Durante su juventud, los
Millennials acudían al cine
como una de sus principales
formas de ocio. En 2004,
España registró más de 140
millones de entradas
vendidas, con una media de
3 películas por persona y año,
según el Ministerio de Cultura.
El visionado de películas era
una experiencia social y
colectiva, asociada al fin de
semana, los estrenos en
pantalla grande y la salida con
amigos o familia.
«No tiene nada que ver con cómo jugábamos en nuestra época», observa su padre, Diego, que todavía conserva conectada a la televisión del salón su vieja PlayStation 3 de 2006; bien cerca de un buen puñado de videojuegos entre los que se encuentran clasicazos como el primer ‘Borderlands‘ o el ‘God of War 3‘, para los que no hace falta red. Ester, a su lado, muestra su vieja Game Boy de pantalla verde y con un cartucho de ‘Super Mario’ insertado, que es con lo que comenzó a jugar. Y como ella, muchos otros, porque es una de las máquinas más populares de la historia con más de 118 millones de unidades comercializadas desde su lanzamiento en 1989.
La Switch, lanzada en 2016, junto a la primera Game Boy, de 1989
Tanto a Celia como a Lucas les encanta matar el rato en YouTube. «Es muy fácil que pierdan la noción del tiempo. Les dices que pueden usarlo cinco minutos y, cuando te quieres dar cuenta, ha pasado una hora y ni se han enterado», señala el padre. También comenta que intentan que los niños no tengan contacto con sus teléfonos. «Ya nos han preguntado alguna vez cuándo van a tener un móvil, pero tampoco son muy insistentes con el tema», añade Ester, que no tiene intención de darles uno hasta los 12 años. Una decisión algo más prudente que la media: según un estudio de Unicef, la edad promedio para tener el primer ‘smartphone’ es de 10,9 años.
IA para estudiar… y para charlar
Ni a Lucas ni a Celia les interesan las redes sociales. Con YouTube, en principio, tienen suficiente. Pero eso no se cumple en muchos otros alfa. Sobre todo en los que ya están más crecidos. Ese es el caso de Victoria, que está a punto de cumplir los 13 años, pero a los 9 ya le andaba «suplicando» a sus padres que le dieran un móvil. Finalmente, a los 11 se hizo con un viejo Huawei.
«Mis compañeros de clase tienen iPhone y Samsung, yo quiero un móvil nuevo, pero de momento nada de nada», explica la adolescente. Actualmente, la única red social que le permiten tener sus padres es WhatsApp. TikTok lo tiene descargado, pero sin cuenta propia. Con todo, entra dentro de ese 61% de menores que usan actualmente la ‘app’ china, de acuerdo con un informe de Qustodio.
Victoria, a la derecha con su tableta, junto a Carlota, que todavía conserva su dicman
A pesar de las restricciones, Victoria tiene unos conocimientos tecnológicos más profundos que los de muchos adultos. Y es que empezó a trastear con los ‘gadgets’ bien temprano: «En el colegio ya nos daban tabletas en primaria y hacíamos proyectos en el ordenador con internet». Ahora navega sobre todo en YouTube para buscar música y ve la mayoría de las películas en plataformas de ‘streaming’. También le gusta jugar, mucho. Como Lucas, tiene la Nintendo Switch, pero prefiere jugar en su móvil: «El móvil me resulta muy cómodo. Juego a cosas como ‘Fortnite’, antes jugaba todos los días, pero ahora menos», dice Victoria.
La adolescente también usa ChatGPT y Gemini, que es la IA de Google. Normalmente, para entender mejor los deberes, «pero sin copiar nada». También le gusta charlar con la máquina. «Tengo a ChatGPT en WhatsApp, y cuando me aburro le pregunto cómo está y me pongo a charlar con él, como con un amigo», dice Victoria.
Su hermana Carlota nació en 1997, y aunque se encuentra en la frontera entre los milenials y los zetas se siente «muy ‘boomer’«, porque la tecnología no es lo suyo. »Aún me acuerdo de cuando usábamos los SMS y Messenger para chatear y del Hotmail para mandar correos. Si mi hermana ahora quiere estar en TikTok, en mi época yo me tenía que pelear con mis padres para estar en Facebook«, recuerda. Y no necesita estar a la última, hasta hace dos días llevaba un iPhone 8 de 2017 en el bolsillo. Sigue conservando su discman y algunos CD y VHS de la infancia; y se acuerda bien de lo que era ir al videoclub y grabar cintas. Todo muy milenial.