Publicado: diciembre 30, 2025, 9:45 pm
La fuente de la noticia es https://www.abc.es/internacional/cumbre-inocentada-zelenski-20251231041127-nt.html
La cumbre Trump-Zelenski celebrada el pasado domingo en Mar-a-Lago para avanzar en el proceso de paz no ha resultado demasiado exitosa, aunque el primero se haya manifestado muy optimista tras el encuentro («Estamos más cerca del acuerdo que nunca»). Ni hubo … un acuerdo final, ni tan siquiera sobre un alto el fuego temporal, que es radicalmente rechazado por Moscú.
Tampoco se produjeron avances mayores en la negociación aunque ambos acordaran seguir trabajando el tema. Es probable que el optimismo explicitado por el presidente norteamericano haya sido fruto, por un lado, de su interés por mantener viva la esperanza de un próximo acuerdo. Y, por el otro, de deducir de la reunión un ablandamiento de las posiciones de Zelenski. Éste salió de la reunión del día de los Inocentes con un monigote en la espalda.
Resulta difícil conocer inmediatamente los resultados de un encuentro al máximo nivel, que combina en el mismo saco un nuevo marco de seguridad en Europa, cesiones territoriales y los correspondientes aspectos económicos y financieros. Puede inferirse que los dos escollos más importantes siguen siendo las garantías de seguridad ofrecidas a Ucrania –se habla de un plazo de 15-50 años– y la cuestión territorial.
La mayor dificultad de la primera reside en la cerrada negativa de Moscú a aceptar el despliegue de tropas de la OTAN en territorio ucraniano. La de la segunda se concreta en las concesiones territoriales, ya que Putin difícilmente renunciará a los espacios ganados por la fuerza de las armas. Un potencial concierto territorial podría pasar por intercambiar los territorios que le faltan por ocupar a Rusia en el Dombás y los ‘óblast’ de Zaporiyia y Jersón, por devolver a Ucrania los ganados por las tropas rusas en los ‘óblast’ ucranianos de Sumy, Dnipropetrovsk y Járkov.
Descartado el alto el fuego temporal perseguido por Zelenski y patrocinado por la mayoría de los países europeos, los combates no decaen. Por el aire prosigue, e incluso se intensifica, el lanzamiento de misiles y drones artillados rusos contra la infraestructura energética ucraniana, y particularmente contra objetivos del complejo militar industrial en la zona de Kiev.
La tropas ucranianas responden atacando refinerías de petróleo ruso, como el reciente lanzamiento de misiles de crucero Storm Shadow contra una refinería de Novoshajtinsk (‘óblast’ de Rostov). También con drones artillados de largo alcance y fabricación propia contra depósitos petrolíferos en el puerto ruso de Temryuk (‘óblast’ de Krasnodar), así como contra una planta de procesamiento de gas en Oremburgo, situada a 1.300 kilómetros de la frontera ucraniana.
Más allá del valor testimonial de la resiliencia ucraniana, tales acciones no parecen tener demasiado éxito al ser los vectores atacantes, en su mayoría, derribados por las defensas antiaéreas rusas.
Sobre el terreno, las tropas rusas conservan la iniciativa. En el ‘óblast’ de Zaporiyia están empeñadas en un desgastante combate urbano en el interior de Guliaipole. Asimismo, en la zona de Orejov avanzan hacia Novoandriivka, para posteriormente atacar Orejov por el oeste de esa ciudad en combinación de otro esfuerzo por el este desde Mala Tokmachka por la dirección de la carretera T0815. La potencial caída de Orejov facilitaría la posterior ocupación de resto del ‘óblast’ de Zaporiyia cuyos objetivos se concretarían en tres: Zaporiyia capital del ‘óblast’; Orejov; y Guliaipole.
En el ‘óblast’ de Donetsk las tropas rusas han alcanzado Andriivka y siguen empeñadas contra el bastión de Kostiantinivska mientras tratan de avanzar por el sur de la ciudad, para alcanzar la carretera H20. Como también están presionando por el este del bastión, probablemente tratarán de repetir la maniobra de cerco ya utilizada en otros puntos fuertes ucranianos. Además, tras la caída de Siversk, las tropas rusas desde Dibrova se dirigen hacia Raihodorok para amenazar el bastión de Sloviansk. Y así, del trapecio Sloviansk-Kramatorsk-Kostiantinivska-Bajmut, que tras la invasión aparecía como la última zona de detención de la ofensiva rusa, solamente Kramatorsk no está enganchada directamente en el campo de batalla.
En Kupiansk (‘óblast’ de Jarkov) está disputándose la tercera batalla por una ciudad que primero cayó en poder de las tropas rusas. Después fue recuperada parcialmente por las ucranianas. Y ahora las rusas tratan de retomar el dominio de toda la ciudad. Zelenski, tras la cumbre de la inocentada, aparece cada vez más acorralado, política y militarmente.
