Publicado: mayo 16, 2025, 10:15 pm
Fuente de la noticia : https://www.abc.es/salud/jonathan-kipnis-neurocientifico-pudieramos-limpiar-cerebro-dia-20250517042751-nt.html
Jonathan Kipnis, investigador en la Universidad de Washington, estudia cómo interactúan el sistema inmunitario y el cerebro para entender enfermedades neurológicas y el envejecimiento. En 2015 descubrió nuevos vasos sanguíneos de nuestro cerebro, estudio publicado en la revista ‘Nature’, en el que se desveló una desconocida conexión directa entre el cerebro y el sistema inmune. Kipnis impartió una conferencia en el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC).
—¿En qué cambió la comprensión de las enfermedades neurológicas su descubrimiento?
—La mayoría de lo que sabemos proviene de estudios en ratones con enfermedades como alzhéimer y párkinson, donde alterar los vasos linfáticos del cerebro empeora los síntomas, lo que sugiere su papel clave en eliminar residuos. Se habla mucho de trabajos recientes en China. Al parecer, algunos centros de allí están realizando un procedimiento llamado anastomosis venosa linfática (LVA) en pacientes con alzhéimer. Consiste en conectar quirúrgicamente vasos linfáticos a venas del cuello para eliminar residuos del cerebro (o desatascar los linfáticos obstruidos). Afirman haber observado mejoras notables en estos pacientes.
—¿Cree que podría ser una futura cura para el alzhéimer?
—Quizá sea demasiado pronto para hablar de cura, pero la posibilidad es interesante. De hecho, me recuerda a algo que ocurrió hace años, poco después de que descubriéramos los vasos linfáticos del cerebro. Yo estaba en la Universidad de Virginia y mostré nuestros descubrimientos a John Jane, un neurocirujano legendario. Me dijo: «Esto podría desempeñar un papel importante en el alzhéimer. Quizá algún día lo tratemos con neurocirugía». En aquel momento me pareció una idea descabellada, de eso hace unos diez años. Pero estaba claro que era más visionario que yo.
—Entonces ya no es una opción descabellada.
—No sé si se puede curar, pero creo que mejorar y mantener la función de los vasos linfáticos del cerebro podría retrasar la aparición del alzhéimer. Curar una enfermedad neurodegenerativa en curso es muy difícil, pero retrasar su aparición es un objetivo más alcanzable. Tal vez enfoques quirúrgicos como la AVL podrían ayudar , pero no creo que la cirugía sea la solución universal. Creo que potenciar la función linfática con fármacos u otros métodos no invasivos es más prometedor.
—¿Qué es el ‘brainwashing’?
—El cerebro, aunque carece de vasos linfáticos, elimina residuos mediante un sistema único en el que el líquido cefalorraquídeo (LCR) circula a través del cerebro y drena hacia los vasos linfáticos de la duramadre. Este proceso de lavado cerebral ocurre durante el sueño profundo y es clave para prevenir el alzhéimer, ya que la acumulación de desechos puede contribuir a su desarrollo. Dormir bien, por tanto, es esencial para la salud cerebral.
—¿Existen otras formas de limpiar los vasos cerebrales?
—Sí, y la mejor que conocemos ahora es el sueño, sobre todo el sueño profundo. En esa fase nuestro cerebro parece tener la mayor actividad de limpieza. Pero la eliminación de residuos en el cerebro es un proceso de dos pasos. En primer lugar, el LCR debe desplazarse por el tejido cerebral para recoger los residuos. A continuación, debe eliminarse correctamente. Piense en el cerebro como si fuera una casa: puede introducir agua limpia, pero si no expulsa el agua sucia, lo que queda es un pantano. Es importante producir LCR nuevo y limpio; eliminar el viejo y sucio; asegurar un buen flujo a través del tejido cerebral y, por supuesto, un drenaje linfático funcional es fundamental. Por eso no creo que un solo medicamento lo resuelva todo, sino que será necesario un enfoque polifacético.
—A medida que la gente envejece, suele dormir menos y peor.
—Si el cerebro realmente se depura mejor por la noche, deberíamos explorar formas de mejorar ese proceso. Así como ayudamos al sistema inmunitario con vacunas, podríamos encontrar maneras de optimizar la limpieza cerebral. Imagine que pudiéramos desarrollar un método, de modo que en lugar de necesitar 7-8 horas de sueño, pudieras obtener el mismo beneficio en sólo 2 o 3 horas. O aún más radical: ¿y si pudiéramos limpiar el cerebro durante el día, para eliminar la necesidad de dormir? Ese es mi sueño, aunque suene descabellado.
—Parece ciencia ficción.
—Curar el cáncer también lo era hace apenas 20 años.
—¿Puede el sistema inmunitario eliminar los residuos del cerebro?
—El sistema inmunitario es como el equipo de mantenimiento de Fórmula 1. Incluso con el mejor piloto (su cerebro), si el equipo de mantenimiento no funciona, nunca ganará la carrera. Si el sistema inmunitario funciona mal, el cerebro también sufre.
—¿Es el sistema inmunitario la próxima frontera para tratar los trastornos neurológicos?
—Sí, al 100%. Durante mucho tiempo, la neuroinmunología vivió en una edad oscura en la que el cerebro y el sistema inmunitario se consideraban enemigos. Ahora sabemos que se comunican y que, cuando está bien equilibrado, el sistema inmunitario puede ayudar al cerebro a curarse y funcionar mejor. Pero, por supuesto, si es hiperactivo o disfuncional, como en las enfermedades autoinmunes, entonces sí puede causar daños. Por eso es fundamental saber cómo modular la actividad inmunitaria en el cerebro.